12-09-2023 10:07
Mis dos compañeros de piso se han pasado el FFXVI y ambos coinciden en que el juego está bien pero tiene algunos problemas, sobre todo en lo que se refiere al tema de las misiones secundarias que, aparentemente, "se sienten muy MMO". Tampoco he preguntado mucho al respecto así que no sé cuales son los detalles.
A nivel algo más generalizado, y sin querer insinuar que es justo comparar ambos juegos porque no son lo mismo en absoluto, pero sí usando la reacción de la gente para anclar un poco la perspectiva, las opiniones online que he ido viendo son menos divisivas que las de Starfield y por lo general tienden más al positivismo. Pero a la vez las opiniones positivas sobre Starfield son bastante más entusiastas que las de FFXVI, si bien las opiniones negativas de FFXVI también son menos lapidarias.
En definitiva, la impresión que tengo es que el juego ha sido recibido de forma positiva, pero no ha causado mucho impacto más allá de eso ni ha reventado ninguna mente. La mayoría de la gente a la que he escuchado coinciden en que sus problemas se hacen notar más a medida que el juego avanza. Sin embargo, tengo entendido que el porcentaje de gente que se ha acabado el juego roza el 40%, lo cual es bastante estándar para otros géneros pero es curiosamente alto para tratarse de un RPG, y habla a favor de él. Por supuesto, todavía es temprano dentro del ciclo de vida del juego para sacar conclusiones.
Pero bueno, resumen con un día de retraso.
Llegando a lo que parece ser la parte final de CrossCode.
Tras superar el tercer templo de los Jardines de Gaia se abre una nueva zona, la Cresta de Zafiro, reconocible por ser el lugar que aparece en los sueños de Lea y hypeado como el sitio en el que, al llegar, por fin se revelarán los secretos de la trama. Bueno... No exactamente al llegar. Primero tienes que completar las aventurillas de la zona.
A diferencia de las zonas anteriores, la Cresta de Zafiro no tiene mazmorra (la verdad es que no sé como sentirme al respecto, por una parte las mazmorras de este juego son excelentes, pero por otra pueden hacerse agotadoras). Siendo más específicos, sí que hay una mazmorra, pero está cerrada y los personajes te comentan que se supone que tienen que abrirla en el siguiente parche. Por el momento, la Cresta en sí es el área de mayor nivel del juego, en la que tienes que superar una quest que consiste en encontrar cuatro escarabajos dorados, cada uno de los cuales te reta a una especie de mini-juego y, al superarlos, se te abre el camino a lo que viene a ser el jefe de la zona. Tras derrotar al jefe todo el área queda abierta, y es cuando Lea puede por fin explorarla a su voluntad para intentar recuperar sus memorias.
Eso no es lo único que se desbloquea, sin embargo. También te dejan volver a la Plaza del Rombo, sitio que había sido visitado parcialmente al principio del juego como área de tutorial, pero que ahora puedes explorar al completo. No es una zona propiamente dicha sino que viene a ser el área social del juego, donde los jugadores pueden comprar equipo de alto nivel, charlar e incluso comprar una casa para decorarla a su gusto. Aquí suceden algunas cosas importantes en la trama, incluyendo un encuentro que define si obtienes el final bueno o no, pero más allá de eso y de ser el lugar donde venden el equipo más tocho del juego la verdad es que tampoco he visto que hayan muchas cosas que hacer. Lo que sí que hay es una arena donde parecen haber varias copas que todavía no he probado a hacer, pero deduzco que funcionarán un poco como lo hacían en Kingdom Hearts. Quizá las complete en el futuro, o no, no sé. El juego me está gustando mucho, pero si soy sincero llevo tanto tiempo con él que casi prefiero que no se alargue mucho más.
En la parte final de la Cresta de Zafiro efectivamente se destapa una parte importante del pastel y tenemos nuestro duelo contra Shizuka, quien... Bueno, podría explicar de que va todo, pero sería algo spoiler y tampoco querría enrollarme al respecto. Tras estos eventos llegas al capítulo 10, que si no me equivoco es el último capítulo del juego... Si no tienes en cuenta el DLC. Ahora estoy completando algunas misiones secundarias que se han abierto al llegar a esta parte. No creo que me vaya a dar tiempo acabarlo todo para la semana que viene.
Y bueno, siguiendo también con Daggerfall.
El mapa de Daggerfall está dividido en unas 40 y pico comarcas, pero muy pocas de ellas están involucradas en las misiones de la trama, con el resto siendo más relleno que otra cosa. Obviamente tienes la comarca de Daggerfall, que es donde empiezas y el primer lugar a donde te lleva la historia una vez decide por fin empezar. Luego tienes sitios como Sentinel, donde también hay alguna cosilla, y Orsinium, que es donde los orcos tienen su fortaleza, la cual tienes que visitar en algunas de las misiones que te mandan por ahí. El líder de los orcos, un tal Gortwog, es un tipo curioso porque parece importarle una mierda lo que hagas con su gente. De hecho hay un par de veces en las que acudes a su fortaleza para obtener algún objeto que está en su poder y el tío te anima a que explores su castillo para encontrarlo abriéndote paso a mandoblazos entre sus guardias.
Y luego está Wayrest. Oh dios, Wayrest. Wayrest es junto con Daggerfall el reino en el que se obtienen más misiones de la trama principal, y la gran mayoría de ellas giran en torno a la familia real y sus maquinaciones. Al poco de empezar una de las misiones iniciales consiste en hacer de cartero para un príncipe y enviarle una nota de chantaje a un tipo llamado Lord Castellian. Este pobre hombre es un poco como el paria del juego, porque luego hay otra misión que te encarga la princesa Elysana de Wayrest para darle una capa como regalo... excepto que la capa está maldita y cuando se la pone salen un montón de Daedras y se lo cargan. Elysana es toda una energúmena, porque más tarde tiene otra misión en la que te pide que escoltes a su prima a un pueblo, pero por el camino te asaltan un montón de mercenarios, y "la prima" en sí no es más que una agente contratada para tenderte una emboscada. Más tarde incluso empiezas a recibir la visita de asaltantes, cada uno de ellos portando una nota pidiendo que se te dé caza, y las implicaciones apuntan a que es la princesa Elysana quien les está pagando.
El tema es que hay otra misión en Wayrest que te la da la reina (y de hecho es una de las que te hacen entrar a la fortaleza de los orcos que mencioné antes), pero solo te la da si obtienes suficiente reputación con ella, y para ello tienes que ponerte a hacer misiones secundarias que te dan los NPCs que la rodean hasta que finalmente decide dignarse a dirigirte la palabra. Y eso ha ocupado gran parte de mi tiempo esta semana.
Afortunadamente, a pesar de que estas misiones forman parte de la trama principal, la mayoría de ellas son opcionales así que tampoco tienes por qué mantener mucha relación con este nido de víboras. La única que creo que realmente cuenta es la que te da la princesa Morgiah, la cual consiste en ayudarla a hacer un pacto con el Rey de los Gusanos y su cábala de nigromantes, los cuales son una de las facciones principales del juego. Nunca fui muy dado al lore de la saga de The Elder Scrolls, pero el tema del Rey de los Gusanos me resultaba familiar, y tras mirar online resulta que el tipo es Mannimarco, al cual recuerdo como uno de los antagonistas principales de The Elder Scrolls Online, lo cual ha sido una sorpresa agradable. Aparentemente también aparecía en Oblivion, pero si soy sincero no recuerdo casi nada de la trama de Oblivion. Y probablemente me olvide de gran parte de la trama de Daggerfall en poco tiempo también. Todo este tema de las rencillas territoriales y cartitas secretas entre familias nobles me resulta algo tedioso.
Para la semana que viene... Más de lo mismo. PERO espero haber empezado (y dependiendo de como incluso acabado, aunque lo dudo) con otro juego para entonces, a pesar de que ni CrossCode ni Daggerfall habrán finalizado.
A nivel algo más generalizado, y sin querer insinuar que es justo comparar ambos juegos porque no son lo mismo en absoluto, pero sí usando la reacción de la gente para anclar un poco la perspectiva, las opiniones online que he ido viendo son menos divisivas que las de Starfield y por lo general tienden más al positivismo. Pero a la vez las opiniones positivas sobre Starfield son bastante más entusiastas que las de FFXVI, si bien las opiniones negativas de FFXVI también son menos lapidarias.
En definitiva, la impresión que tengo es que el juego ha sido recibido de forma positiva, pero no ha causado mucho impacto más allá de eso ni ha reventado ninguna mente. La mayoría de la gente a la que he escuchado coinciden en que sus problemas se hacen notar más a medida que el juego avanza. Sin embargo, tengo entendido que el porcentaje de gente que se ha acabado el juego roza el 40%, lo cual es bastante estándar para otros géneros pero es curiosamente alto para tratarse de un RPG, y habla a favor de él. Por supuesto, todavía es temprano dentro del ciclo de vida del juego para sacar conclusiones.
Pero bueno, resumen con un día de retraso.
Llegando a lo que parece ser la parte final de CrossCode.
Tras superar el tercer templo de los Jardines de Gaia se abre una nueva zona, la Cresta de Zafiro, reconocible por ser el lugar que aparece en los sueños de Lea y hypeado como el sitio en el que, al llegar, por fin se revelarán los secretos de la trama. Bueno... No exactamente al llegar. Primero tienes que completar las aventurillas de la zona.
A diferencia de las zonas anteriores, la Cresta de Zafiro no tiene mazmorra (la verdad es que no sé como sentirme al respecto, por una parte las mazmorras de este juego son excelentes, pero por otra pueden hacerse agotadoras). Siendo más específicos, sí que hay una mazmorra, pero está cerrada y los personajes te comentan que se supone que tienen que abrirla en el siguiente parche. Por el momento, la Cresta en sí es el área de mayor nivel del juego, en la que tienes que superar una quest que consiste en encontrar cuatro escarabajos dorados, cada uno de los cuales te reta a una especie de mini-juego y, al superarlos, se te abre el camino a lo que viene a ser el jefe de la zona. Tras derrotar al jefe todo el área queda abierta, y es cuando Lea puede por fin explorarla a su voluntad para intentar recuperar sus memorias.
Eso no es lo único que se desbloquea, sin embargo. También te dejan volver a la Plaza del Rombo, sitio que había sido visitado parcialmente al principio del juego como área de tutorial, pero que ahora puedes explorar al completo. No es una zona propiamente dicha sino que viene a ser el área social del juego, donde los jugadores pueden comprar equipo de alto nivel, charlar e incluso comprar una casa para decorarla a su gusto. Aquí suceden algunas cosas importantes en la trama, incluyendo un encuentro que define si obtienes el final bueno o no, pero más allá de eso y de ser el lugar donde venden el equipo más tocho del juego la verdad es que tampoco he visto que hayan muchas cosas que hacer. Lo que sí que hay es una arena donde parecen haber varias copas que todavía no he probado a hacer, pero deduzco que funcionarán un poco como lo hacían en Kingdom Hearts. Quizá las complete en el futuro, o no, no sé. El juego me está gustando mucho, pero si soy sincero llevo tanto tiempo con él que casi prefiero que no se alargue mucho más.
En la parte final de la Cresta de Zafiro efectivamente se destapa una parte importante del pastel y tenemos nuestro duelo contra Shizuka, quien... Bueno, podría explicar de que va todo, pero sería algo spoiler y tampoco querría enrollarme al respecto. Tras estos eventos llegas al capítulo 10, que si no me equivoco es el último capítulo del juego... Si no tienes en cuenta el DLC. Ahora estoy completando algunas misiones secundarias que se han abierto al llegar a esta parte. No creo que me vaya a dar tiempo acabarlo todo para la semana que viene.
Y bueno, siguiendo también con Daggerfall.
El mapa de Daggerfall está dividido en unas 40 y pico comarcas, pero muy pocas de ellas están involucradas en las misiones de la trama, con el resto siendo más relleno que otra cosa. Obviamente tienes la comarca de Daggerfall, que es donde empiezas y el primer lugar a donde te lleva la historia una vez decide por fin empezar. Luego tienes sitios como Sentinel, donde también hay alguna cosilla, y Orsinium, que es donde los orcos tienen su fortaleza, la cual tienes que visitar en algunas de las misiones que te mandan por ahí. El líder de los orcos, un tal Gortwog, es un tipo curioso porque parece importarle una mierda lo que hagas con su gente. De hecho hay un par de veces en las que acudes a su fortaleza para obtener algún objeto que está en su poder y el tío te anima a que explores su castillo para encontrarlo abriéndote paso a mandoblazos entre sus guardias.
Y luego está Wayrest. Oh dios, Wayrest. Wayrest es junto con Daggerfall el reino en el que se obtienen más misiones de la trama principal, y la gran mayoría de ellas giran en torno a la familia real y sus maquinaciones. Al poco de empezar una de las misiones iniciales consiste en hacer de cartero para un príncipe y enviarle una nota de chantaje a un tipo llamado Lord Castellian. Este pobre hombre es un poco como el paria del juego, porque luego hay otra misión que te encarga la princesa Elysana de Wayrest para darle una capa como regalo... excepto que la capa está maldita y cuando se la pone salen un montón de Daedras y se lo cargan. Elysana es toda una energúmena, porque más tarde tiene otra misión en la que te pide que escoltes a su prima a un pueblo, pero por el camino te asaltan un montón de mercenarios, y "la prima" en sí no es más que una agente contratada para tenderte una emboscada. Más tarde incluso empiezas a recibir la visita de asaltantes, cada uno de ellos portando una nota pidiendo que se te dé caza, y las implicaciones apuntan a que es la princesa Elysana quien les está pagando.
El tema es que hay otra misión en Wayrest que te la da la reina (y de hecho es una de las que te hacen entrar a la fortaleza de los orcos que mencioné antes), pero solo te la da si obtienes suficiente reputación con ella, y para ello tienes que ponerte a hacer misiones secundarias que te dan los NPCs que la rodean hasta que finalmente decide dignarse a dirigirte la palabra. Y eso ha ocupado gran parte de mi tiempo esta semana.
Afortunadamente, a pesar de que estas misiones forman parte de la trama principal, la mayoría de ellas son opcionales así que tampoco tienes por qué mantener mucha relación con este nido de víboras. La única que creo que realmente cuenta es la que te da la princesa Morgiah, la cual consiste en ayudarla a hacer un pacto con el Rey de los Gusanos y su cábala de nigromantes, los cuales son una de las facciones principales del juego. Nunca fui muy dado al lore de la saga de The Elder Scrolls, pero el tema del Rey de los Gusanos me resultaba familiar, y tras mirar online resulta que el tipo es Mannimarco, al cual recuerdo como uno de los antagonistas principales de The Elder Scrolls Online, lo cual ha sido una sorpresa agradable. Aparentemente también aparecía en Oblivion, pero si soy sincero no recuerdo casi nada de la trama de Oblivion. Y probablemente me olvide de gran parte de la trama de Daggerfall en poco tiempo también. Todo este tema de las rencillas territoriales y cartitas secretas entre familias nobles me resulta algo tedioso.
Para la semana que viene... Más de lo mismo. PERO espero haber empezado (y dependiendo de como incluso acabado, aunque lo dudo) con otro juego para entonces, a pesar de que ni CrossCode ni Daggerfall habrán finalizado.