(30-01-2016 13:11)Razork [ -> ]...
La diplomacia siempre ha sido la asignatura pendiente del Civ 5. La forma con la que funciona es que dependiendo de las acciones que hagas puedes sumar o restar puntos a tus relaciones con un líder, y cuantos menos puntos tengas, más probable es que les caigas como el culo. Además siempre existe la posibilidad de que te traicionen, lo cual es un valor que viene definido por la personalidad del líder (que incluye valores como la probabilidad que tiene de traicionarte, la probabilidad que tiene de denunciarte, o la probabilidad que tiene de realmente declarar la guerra, entre otras).
Una de las cosas más chirriantes es que la IA ignora por completo cualquier tipo de contexto. Tengo varias anécdotas simpáticas al respecto.
En una partida, Guillermo "el Naranjitas" de┬áHolanda era mi aliado y estaba en guerra contra Gustavo Adolfo de Suecia, el tipo cuyo tema musical siempre me pone feliz y alegre. Guillermo me pide ayuda, pero yo estaba llevando una vida de paz y armonía (con alguna puñalada trapera por parte del líder de nombre inpronunciable de Siam), así que en vez de ayudarle de inmediato le pido que espere unos días para que pueda preparar a┬ámis tropas. Guillermo acepta.┬á
Pocos turnos después, Guillermo me denuncia públicamente por estar amasando tropas y ser un peligro para el mundo. Yo respondo borrándolo del mapa con las tropas que se supone que iban a ayudarle.
En esa misma partida, Siam era mi antagonista principal, y ambos competíamos el uno contra el otro por territorio. Llegado un momento, Siam decide que yo no soy su único rival, y absorbe Francia por completo, eliminándola del juego (no se como se lo monta Napoleón que siempre lo aalizan en las partidas a las que juego y yo nunca tengo nada que ver). Decido sacar algo de tajada de esto y, la siguiente ciudad que ataco de Siam es París, la antigua capital Francesa. En lugar de quedármela se la otorgo a Napoleón como regalo para intentar ganarme un aliado de comercio. Napoleón la acepta muy feliz y contento.
En el siguiente turno, Napoleón me denuncia públicamente por tener demasiadas tropas cerca de París. Obviamente, eran las tropas que acababan de conquistar la ciudad para devolvérsela. No volví a ayudarle cuando Siam contraatacó.
En otra partida yo llevaba a Brasil y estaba trazando planes para extender la fiebre del carnaval por todo el mundo y convertir los bikinis de colores con lumas de pavo real en la norma básica de vestuario. Mi cultura se estaba disparando y absorbiendo a todas las otras civilizaciones. El único problema era Asiria, que básicamente se había convertido en algo así como el malo de la partida. Asiria había ido conquistando terreno a un montón de otros líderes y todo el mundo la odiaba. Yo también odiaba a Asiria porque su cultura estaba por las nubes. Intenté varias veces promover la guerra contra Asiria, y mis aliados de Rusia, Mongolia y Persia estuvieron de acuerdo. El problema es que para llegar a Asiria había que pasar primero por Babilonia.┬áNabucondonsor de Babilonia había sido algo así como un cero a la izquierda durante toda la partida, aliado de todo el mundo pero sin ayudar nunca a nadie.┬áTodos teníamos pactos de apertura de fronteras con él, pero┬áa mis aliados se les pasaba el enfado contra Asiria┬áa mitad del camino de Babilonia, llevando las tropas de vuelta antes de llegar al territorio enemigo.
Decido entonces que la mejor forma de ganar era borrar a Asiria del mapa, y que para hacerlo lo tendría que hacer yo solo. Reuno tropas y decido que esta vez voy a ir con mis aliados a Asiria, y que si ellos dan la vuelta atrás, yo acabaría el trabajo.
Nuestras tropas están pasando por el lado de la capital de Babilonia. Nabucondonsor expresa su inquietud al ver que un montón de tropas pasan cerca de su capital, a lo cual le digo que solo están de paso. Nabu se tranquiliza. No lo hacen otras civilizaciones que me acusan de estar amenazando a un líder indefenso, incluyendo los aliados que comparten la fuerza de asalto┬áconmigo. De pronto, todo el mundo me odia, todo el mundo cree que soy una amenaza, todo el mundo... Menos Nabu. Babilonia, la gran amenazada, se mantiene completamente neutral y amistosa durante la crisis diplomática. Como no podía ser de otra forma, mis aliados dan la vuelta a medio camino porque aparentemente soy un abusón, y yo me quedo solo en la guerra contra Asiria. El único que se mantiene fiel es Genghis Khan. Tampoco importa porque me las apaño para borrar a Asiria del mapa yo solo y obtener la victoria cultural.
Como digo, la IA sigue unas reglas muy estrictas que hacen que parezcan excéntricos dementes a ojos de una persona humana. También hay que tener en cuenta que la IA NUNCA es tu amiga. Puede ser tu aliada, pero eso solo es por conveniencia. Si alguien paga suficiente dinero a un líder para que vaya a la guerra contra ti, el líder te declarará la guerra porque puede sacar tajada de ello, no importa cuan "amigo" fuese. Algunos líderes son más propensos a traicionar que otros , pero ninguno de ellos es inmune a hacerlo. Pongo aquí una tabla de personalidad de los líderes de la IA:┬áhttp://civdata.com/
Supuestamente, a cada valor se le debe añadir un modificador aleatorio que creo que va del -2 al +2. Es decir, que si alguien tiene un 5 en un valor, al iniciar la partida ese valor puede fijarse a cualquier número entre 3 y 7. CREO que el modificador era un máximo de 2┬ápositivo o negativo. Puede que fuese 3. Ahora mismo no estoy seguro.
Al final del día todo esto significa que conocer estos valores no sirve de gran cosa, pero el problema real es que intentar cultivar verdaderas relaciones diplomáticas en el Civ 5 no es una estrategia viable, debido a que al final del día la IA tiende a actuar con excentricidad aparentemente aleatoria, guiada en realidad por unos valores demasiado simples que ignoran contexto.