Resumen semanal...
Pegando un aceleron sin frenos en el
Atelier Totori.
Voy bastante más adelantado en el juego de lo que debería.
Retomando un poco mi entrada anterior, mientras que en
Rorona tenías que completar unas misiones principales que te daban en el castillo cada trimestre para evitar que cerrasen la tienda, en
Totori debes conseguir suficientes puntos antes de que acabe un periodo de tres años para que no te revoquen la licencia de aventurero. Esto es un proceso mucho más complejo que en
Rorona, donde muy a menudo podías comprar los objetos necesarios para superar las misiones en la misma tienda de al lado y tener el resto de los tres meses para hacer lo que te diese la gana.
Totori funciona mediante un sistema de "logros". Hay logros por matar X enemigos de un tipo, por recolectar en todos los puntos de una zona concreta, por completar X misiones del gremio, por derrotar subjefes opcionales, por hacer objetos alquímicos diversos, etc... Esto hace que el gameplay sea mucho más variado y entretenido. Sin embargo,
Totori también es un tigre agazapado con toda la intención de saltarte al cuello.
A diferencia de
Rorona, donde gastabas tiempo viajando de un lado al otro y haciendo objetos en el sistema de alquimia, en
Totori entrar en un combate ya gasta tiempo, y recolectar cosas también (si bien ninguna de las dos cosas gasta un día entero, afortunadamente). Quizá para compensar esto, allí donde
Rorona sucedía a lo largo de tres años, en
Totori son seis. Pero no compensa, porque los requisitos para obtener el final bueno en
Totori son absolutamente salvajes. En
Rorona solo tenías que preocuparte por cumplir con tus misiones y entregar objetos de más a la vez que cumplías misiones optativas para aumentar la popularidad de la tienda, las tramas de los personajes solo importaban si querias uno de sus finales. En
Totori DEBES cumplir con todas las tramas si quieres el final bueno, y estas son bastante más complejas que en
Rorona. La cantidad de cosas que pueden salir mal y joderte la partida es estratosférica, y no en vano este juego se considera el más difícil de la serie.
Con respecto a los personajes, son más entretenidos que los de Rorona en general. Incluso Sterk, quien vuelve a aparecer, tiene alguna escena graciosa. Rorona también aparece como personaje jugable, y sigue siendo un accidente ferroviario de mujer. Yo creo que ha ido a más.
Acabado
Arcanum: Of Steamworks and Magick Obscura. Ya iba siendo hora.
No tengo gran cosa que decir que no haya dicho ya porque la última vez que hablé de él me quedé justo delante del jefe final.
El último área no es especialmente interesante salvo por una cosa, y es que en ella conoces a varios NPCs de los que has oido hablar a lo largo del juego. Todos ellos desterrados al abismo por ser gente muy, muy mala. Hay un giro argumental justo en este área donde descubres que el malo final no es quien creías que era, pero poco importa porque al final sigues teniendo que meterte en la fortaleza del abismo para derrotar a quien dirige el cotarro. Las cosas no cambian.
Tengo entendido que este es uno de esos juegos donde puedes convencer al malo para que se suicide, pero no tenía el nivel de carisma necesario para hacerlo así que tuve que luchar contra él. Lo cual no es un problema:
Arcanum es uno de esos juegos que empiezan jodidillos pero tu personaje pronto se convierte en una bola de nieve imparable. El jefe final tiene mucha vida, pega fuerte y envenena; no logró hacer que mis puntos de vida bajasen de la mitad.
Creo que no llegué a hablar de la OST de este juego. Se puede resumir de la siguiente forma: Espero que os gusten los violines, porque son básicamente el único instrumento que vais a escuchar durante toda la partida. Bueno, creo que hay un poco de percusión durante el tema de combate, pero vamos, que incluso entonces el violín es la melodía principal. Y no es que tenga nada en contra de las composiciones en sí, ni de los violines. Me gustan los violines, y me gustaron varios de los temas del juego, pero también es cierto que resulta curiosa la dirección que tomaron al componer la OST.
Me ha gustado: Mundo grande, muchos sidequests, cosas escondidas... RPG de la antigua escuela con todo lo que ello conlleva, por lo general para bien. Y en un mar de juegos de alta fantasía genérica, un juego que prueba con el steampunk se agredece, la verdad.
No me ha gustado: Es uno de esos juegos antiguos que puede dar problemas en sistemas modernos. Tuve que meterle varios parches y aún así habían cosillas que no tiraban del todo bien. La curva de dificultad es una cuesta abajo sin frenos. Hay mucha disparidad entre lo interesantes que son tus compañeros de grupo. La OST no está mal, pero es muy monotemática.
Hace un tiempo intenté ponerme con el
Bard's Tale original, pero es uno de esos juegos que son DEMASIADO arcaicos, incluso para mí. Hace poco, sin embargo, alguien me comentó acerca de un remake que sacaron hace un par de años, que se mantenía bastante fiel al juego original a la vez que introducía mejoras de calidad de vida. Y eso es a lo que me he puesto a jugar ahora: Al
Bard's Tale Trilogy.
Y ya para empezar las diferencias se hacen notar, y no lo digo en aspecto gráfico, que puede gustar más o menos (yo creo que los gráficos antiguos tenían un carisma que los nuevos no tienen, pero los nuevos tampoco son feos). Al crear un personaje tienes un botón para hacer re-roll de sus estatus en la misma pantalla de creación, mientras que en original tenías que cancelar la creación y volver a elegirle la clase para generar estatus nuevos. En el original, creo recordar, no te daban información apenas acerca del poder y defensa de las armas y armaduras, y te guiabas por el precio de venta en la tienda. En el rameke, tienes la información bien visible.
La primera zona del juego también ha sido allanada para permitir un inicio más suave. En el original era perfectamente posible que nada más empezar te encontrases con un grupo de tres bárbaros que ANIQUILABAN a tus pobres aventureros de nivel 1. Aquí también es posible, pero los requisitos para subir de nivel han sido reducidos, y creo que algunos de los enemigos de la primera zona nerfeados. Sigues teniendo que elegir los primeros combates, y mantenerte cerca del templo hasta que llegas al nivel 2 o 3, momento en el que por fin puedes explorar la ciudad con más libertad, pero ahora es mucho menos grindeo, mucho más accesible, aunque igualmente vas a tener que regresar corriendo al templo tarde o temprano porque los bichos tampoco se andan con bromas.
El remake también incluye un mini-mapa que puede desactivarse si prefieres jugar a la antigua, y un modo "Legacy" para los que prefieran la experiencia original.
Por lo general creo que los cambios son casi todos positivos, aunque la naturaleza del juego sigue sin ser para todo el mundo. Es un dungeon crawler antiguo, de los de mazmorras laberínticas y trampas en cada cofre que suelten los enemigos al morir. Explorar cada vez más la mazmorra mientras vas y vuelves del templo y eliges que combates quieres luchar y cuales prefieres salir por patas... Pero adaptado a las nuevas sensibilidades. Y resulta adictivo.
Y eso es todo por ahora.