La historia de Portal es todo un ejemplo del poder del hype. CUando sacaron el 1, era poco menos que un mod que regalaban con la Orange Box. Yo lo jugué sin saber nada de él, y me encantó, tenía la originalidad que normalmente sólo tienen algunos juegos indie. Y además de eso, Glados, y la canción...
Cuando salió el 2, fue un boom, pero nunca supe por qué, misterios del marketing. Recuerdo haber tenido una conversación con un compañero de trabajo el día del lanzamiento tal que así:
Él: ¡Yo ya he comprado el Portal 2! ¡No puedo esperar para estrenarlo! ¿Tú lo tienes?
Yo: No, no suelo comprar juegos de salida, prefiero esperar a leer críticas y a que bajen de precio.
Él: ¿En serio? ¿Y tú te consideras un jugón de PC? ¿Y no te has comprado Portal 2 que es el mejor juego del mundo mundial de la historia de la humanidad? ¿Cómo puedes resistir el hype?
Yo: Jugué el 1 y bla bla bla. ¿Qué opinas del 1?
Él: No lo he jugado.
Yo: 
Para mí el 2 es como un 1.5, empezando por que repiten todos los puzzles del 1, siguiendo porque tras pasar el efecto novedad, el 2 no me sorprendió ni la mitad, y terminando porque las novedades tipo fluídos las veo un poco forzadas, como que había que meter alguna novedad sí o sí.
Donde más destaca el 2 es en que deja de parecer un mod de regalo para parecer un juego completo, con más presupuesto, con más guión, más horas de juego (tampoco muchas), todo más redondo, más pulido etc. Pero vaya, que frente a la novedad que supuso el 1, el dos no deja de ser un lavado de cara de la misma idea.
A veces jugar un juego en su día, o jugarlo años después puede cambiar mucho la percepción del mismo. O jugar primero la secuela y luego el original. Pasa como con las películas, a veces requiere un esfuerzo mental poner las cosas en su contexto.