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Estados Unidos, abanderado del libre mercado extremo, lo es solamente para fuera de sus fronteras para que sus negocios externos puedan florecer más rápidamente para perjuicio de las poblaciones donde imperan. En realidad es el país más intervencionista del mundo para todo lo que venga de fuera y entre en su mercado interior. No es casualidad que se esté recuperando mucho mejor que otros de esta crisis estructural en la que estamos globalmente. China ya ni hablamos de lo intervencionista que es, para lo consciente, inconsciente, justo, injusto o para lo que quieras.

Sudamérica sólo ha empezado a levantar cabeza a partir de que han empezado a tomar el control sobre su industria y su producto interior bruto, que antes estaba casi totalmente bajo manos extranjeras. Pese a la percepción negativa que tengamos al ver los telediarios (con un sesgo brutal porque las grandes empresas que tienen/tenían intereses allí son las mismas dueñas de la casi totalidad de medios de comunicación de aquí), decenas de millones de personas han abandonado el umbral de la pobreza en la última década. Eso es un hecho.

En los países europeos dónde había menos regulación financiera y la soberanía de los ciudadanos era más escasa ha sido donde la corrupción de los que tomaban decisiones ha provocado que se aplicase una austeridad más cruel a la población. Eso ha llevado al abismo de la desesperación al sur de Europa. Claro está, los países poderosos quieren implantar más y más austeridad para esos países, lo que significa privatizar lo intocable y tener una deuda disparatada e injusta que les permita tener control sobre las políticas económicas importantes a partir de ahora. Es decir, da igual donde pongas las papeleta en todas las elecciones que haya, en realidad el que sale elegido aquí no manda, el que decide las políticas macroeconómicas importantes es el llamado mercado. El mercado que lo domina todo no tiene nada que ver con la oferta y la demanda, el mercado es la desregulación financiera que les permite a las empresas y fortunas grandes pagar muchos menos impuestos que la gente sin recursos, sin necesidad de irse a ningún paraíso fiscal. De forma legal debido a que cada vez el poder financiero ha ido teniendo menor regulación.

La austeridad, la política estrella que quieren implantar los países poderosos a los que no lo son tanto, históricamente NUNCA ha funcionado. La austeridad significa recortes para los menos favorecidos, significa desregularizar las grandes transacciones, significa privatizar todo lo rentable para que unos pocos ganen más y más dinero. Un país para levantar cabeza necesita crecimiento, y la austeridad es el antónimo del crecimiento económico porque implica intrínsecamante que la mayor parte de la población tendrá menos poder adquisitivo lo cual NO es compatible con el crecimiento, eso cualquier alumno de economía espabilado lo puede dilucidar en primero de carrera. En todos los países donde se ha dejado campar sin regulaciones de sentido común al mercado para que se regule él solito a la vez que se ha dejado de proteger al estado del bienestar (educación, sanidad, cultura, políticas sociales) se ha ido todo a la mierda: el sudeste asiático a finales del siglo XX, Argentina, ahora el sur de Europa, etc.

Aquí se pagan casi los mismos impuestos que en los países nórdicos pero luego el gasto público social del Estado por persona es ridículo en comparación. La I+D es de risa también porque quieren que lo sea y el fin último de todo esto es que los salarios del sur de Europa sigan bajando a este ritmo estrepitoso para que nos convirtamos en la mano de obra barata del resto de Europa, ahora que la mano de obra de otros sitios (China, Sudamérica, países emergentes como India, por ejemplo) empieza a ser cada día menos rentable.