12-04-2021 18:22
MS está experimentado aún sobre cuál es la forma de distribuir beneficios entre los desarrolladores aunque actualmente parece evidente que en la mayoría de casos está cubriendo directamente desarrollos o ventas para potenciar la plataforma – si hay un momento en el que meterse por seguridad económica a Game Pass, es éste. Hay excepciones – EA se mete pronto porque le interesa una plataforma donde el modelo en el que hace dinero de verdad actualmente, microtransacciones, se abra a millones de potenciales clientes. Otros tratos, como el de Square Enix reciente, parece más un salvavidas por lo que se anticipaba como un caso Avengers 2.0 con Outriders a cambio de un par de juegos que estaban evitando meter en Pass (especialmente Octopath y Nier:Automata en PC, donde aún estaban ordeñando el long tail); así obtuvieron una plataforma de lanzamiento que evitó el desastre del juego y lo promocionó para llevarlo a un éxito relativo.
El ecosistema que puede crear Game Pass dependerá de la distribución de beneficios en el futuro a medio plazo, y como todo en esta vida en donde se mete el dinero, al final los títulos que salgan gravitarán en torno a él – si hay spotifyización de la plataforma, aquellos que atrapen a jugadores por más tiempo serán los beneficiados (que suelen ir de la mano además de mictrotransacciones). Si, tal y como han ido declarando últimamente, prevén un modelo híbrido, seguiremos viendo probablemente como juegos de bajo y medio presupuesto son financiados por la compañía para cubrir mercado y, según el estado de la industria y la propia plataforma, quizás dar financiación externa a juegos de más presupuesto si lo consideran necesario, pero esto dependerá mucho del vuelo que levante Game Pass para entonces. Game Pass no es, de todas formas, una plataforma sostenible para AAAAs, especialmente para estudios externos.
Las posibilidades son tan prometedoras como inciertas – el potencial de que Game Pass se convierta en un ecosistema que revitalice el medio como lo fue la explosión comercial de juegos independientes hace 15 años existe, y a priori parece un medio fértil para revivir la cultura doble A que lleva en peligro de extinción una década. De la misma forma, si la spotifyización de beneficios termina empujando a los juegos a luchar encarnizadamente por tu tiempo, veremos como los “juegos servicio” y tragaperras inundan el GamePass más allá de los estudios internos de MS (que también irían bien servidos de esto). O cómo la influencia de los juegos en streaming puede empujar a ciertos géneros para ser consumidos en remoto, en móviles o smartTVs.
A día de hoy Game Pass es la incógnita más interesante de la industria con diferencia, pero aún está por ver si lo que va a salir de ahí es una revitalización de la industria o un auténtico monstruo. De momento estamos en la fase luna de miel.
(Ultima edición: 12-04-2021 19:01 por bloodybadger.)
El ecosistema que puede crear Game Pass dependerá de la distribución de beneficios en el futuro a medio plazo, y como todo en esta vida en donde se mete el dinero, al final los títulos que salgan gravitarán en torno a él – si hay spotifyización de la plataforma, aquellos que atrapen a jugadores por más tiempo serán los beneficiados (que suelen ir de la mano además de mictrotransacciones). Si, tal y como han ido declarando últimamente, prevén un modelo híbrido, seguiremos viendo probablemente como juegos de bajo y medio presupuesto son financiados por la compañía para cubrir mercado y, según el estado de la industria y la propia plataforma, quizás dar financiación externa a juegos de más presupuesto si lo consideran necesario, pero esto dependerá mucho del vuelo que levante Game Pass para entonces. Game Pass no es, de todas formas, una plataforma sostenible para AAAAs, especialmente para estudios externos.
Las posibilidades son tan prometedoras como inciertas – el potencial de que Game Pass se convierta en un ecosistema que revitalice el medio como lo fue la explosión comercial de juegos independientes hace 15 años existe, y a priori parece un medio fértil para revivir la cultura doble A que lleva en peligro de extinción una década. De la misma forma, si la spotifyización de beneficios termina empujando a los juegos a luchar encarnizadamente por tu tiempo, veremos como los “juegos servicio” y tragaperras inundan el GamePass más allá de los estudios internos de MS (que también irían bien servidos de esto). O cómo la influencia de los juegos en streaming puede empujar a ciertos géneros para ser consumidos en remoto, en móviles o smartTVs.
A día de hoy Game Pass es la incógnita más interesante de la industria con diferencia, pero aún está por ver si lo que va a salir de ahí es una revitalización de la industria o un auténtico monstruo. De momento estamos en la fase luna de miel.