08-08-2015 00:03
Gracias por la crítica, @Ricardo
Lo mío también es una opinión personal, lejos de ser cualquier tipo de verdad. Por mucho que yo haya escrito esto, soy de la opinión de que tiene que defenderse solo, y que cualquier cosa que yo añada, no es más que una perspectiva de algo que puede ser interpretado en otro sentido o bajo otra lógica.
El inmortal puede comunicarse, pero desiste de continuar con este método porque resulta tremendamente cansino (tiene que mirar detenidamente varios segundos a un mismo punto del alfabeto para lanzar la letra) y poco productivo, puesto que ha sido confinado y su existencia es, por así decirlo, el de ser un plato de morgue sin más propósito. Es cierto que le meten programas de mierda, pero en este sentido es más el ampliar su aplastamiento emocional que el hecho de ver este u otro programa de televisión. Quería recalcar la enorme abulia de su condición, un entrenamiento, digamos, para la única forma de ver pasar los milenios sin desesperar. Pero esto último es más un pensamiento actual que algo real del momento de su creación. Cuando lo escribí, la verdad es que no recuerdo lo que estaba pensando.
Sobre la prosa, ten en cuenta que, sobre todo el arranque, busco la elocuencia de un ser que ha trascendido (por decirlo de alguna forma) a su condición de simple mortal y también a su situación de prisionero en la carne y en la tierra. También es verdad que locutado un relato con algo de boato literario siempre quedará algo recargado. Por último, comentar que este relato es del 2012, el principio, por así decirlo, tras un duro punto de inflexión, de mi etapa madura como escritor (en cuanto a estilo), lo cual no significa que hoy en día no siga madurando y creciendo en este sentido. Esta es una carrera infinita.
Lo mío también es una opinión personal, lejos de ser cualquier tipo de verdad. Por mucho que yo haya escrito esto, soy de la opinión de que tiene que defenderse solo, y que cualquier cosa que yo añada, no es más que una perspectiva de algo que puede ser interpretado en otro sentido o bajo otra lógica.
El inmortal puede comunicarse, pero desiste de continuar con este método porque resulta tremendamente cansino (tiene que mirar detenidamente varios segundos a un mismo punto del alfabeto para lanzar la letra) y poco productivo, puesto que ha sido confinado y su existencia es, por así decirlo, el de ser un plato de morgue sin más propósito. Es cierto que le meten programas de mierda, pero en este sentido es más el ampliar su aplastamiento emocional que el hecho de ver este u otro programa de televisión. Quería recalcar la enorme abulia de su condición, un entrenamiento, digamos, para la única forma de ver pasar los milenios sin desesperar. Pero esto último es más un pensamiento actual que algo real del momento de su creación. Cuando lo escribí, la verdad es que no recuerdo lo que estaba pensando.
Sobre la prosa, ten en cuenta que, sobre todo el arranque, busco la elocuencia de un ser que ha trascendido (por decirlo de alguna forma) a su condición de simple mortal y también a su situación de prisionero en la carne y en la tierra. También es verdad que locutado un relato con algo de boato literario siempre quedará algo recargado. Por último, comentar que este relato es del 2012, el principio, por así decirlo, tras un duro punto de inflexión, de mi etapa madura como escritor (en cuanto a estilo), lo cual no significa que hoy en día no siga madurando y creciendo en este sentido. Esta es una carrera infinita.
