Resumen de la semana, como siempre.
Siguiendo con
Octopath Traveller.
Me he pasado los capítulos 2 de todos los personajes, así que en cierta forma voy ya por la mitad del juego. Podría hablar de lo que me parece la historia de cada uno, pero creo que mejor lo dejo para cuando las acabe.
Cada personaje tiene su habilidad especial que puede usar fuera de la batalla, aunque por lo general suelen funcionar en parejas. La clériga y la bailarina pueden convencer a NPCs para que se unan al grupo, y después pueden invocarlos en combate. La diferencia es que la clériga necesita un nivel mínimo para convencer a ciertas personas, pero si llegas a ese nivel se te unen seguro, mientras que la bailarina puede convencer a cualquiera sin importar su nivel pero usa una tirada de dados porcentual; si la supera el NPC se une, y si no recibes una penalización a reputación. Si tu reputación sufre demasiado dejas de poder interactuar con NPCs en esa ciudad y tienes que pagarle a un tabernero para que suelte rumores positivos sobre ti.
El escolar y el boticario pueden interrogar a la gente para descubrir objetos secretos, información sobre sidequests, debilidades de enemigos, y cosas así. La diferencia es la misma que con la bailarina y la clériga: El boticario necesita un nivel mínimo, mientras que el escolar hace una tirada de dados.
El caballero y la cazadora pueden enfrentarse a NPCs en duelos. Por lo general esto solo es necesario en ciertos sidequests (como en el que tienes que deshacerte de un tío que está acosando a una mujer) o para quitar del medio a NPCs que te bloquean el camino a ciertas casas. Los duelos son un 1 vs 1, y no soy especialmente fan de ellos si soy sincero. La diferencia entre ambos es que la cazadora recibe una penalización a la reputación si pierde el combate.
Finalmente, la mercader y el ladrón pueden hacerse con objetos que los NPCs tienen a la venta. La mercader paga por ellos, mientras que el ladrón puede intentar llevárselos gratis como quien roba una cartera. Pero de nuevo: Es una tirada de dados: Cada objeto tiene un porcentaje asignado, y si superas la tirada te llevas el objeto, y si no, te penalizan. Algunos objetos tienen un porcentaje de 3%, y ahí es cuando quizá valga la pena plantearse comprarlos con la mercader. Eso, o abusar del guardar y cargar partida una y otra vez hasta que consigues llevártelos. Lo sé porque yo mismo he hecho esto. Varias veces.
Esto no es lo único que pueden hacer los personajes. También tienen otras habilidades únicas: El caballero puede bufar su defensa en combate, la mercader encuentra dinero cada vez que entras en un área, el escolar revela debilidades de los enemigos al empezar los combates, la cazadora puede capturar monstruos y luego usarlos como invocaciones, el ladrón puede abrir cofres púrpuras, el boticario puede mezclar ingredientes para crear pociones en combate... Las únicas que no parecen tener un talento separado de su habilidad de interactuación con NPCs son la clériga y la bailarina, que pueden invocar a los NPCs que han convencido para que les sigan en combate. Estos NPCs se quedan en combate unas cuantas rondas y actúan después de cada turno de ambas, como si fuesen un personaje más, aunque no puedes controlar lo que hacen.
La verdad es que aprecio el esfuerzo que han dedicado en hacer que cada personaje esté separado del resto, aunque al final pase bastante de muchas de estas habilidades. El dinero escasea y el equipo que vale la pena no es especialmente barato, así que la mercader siempre es útil. La habilidad de fabricar pociones del boticario es bastante chula, pero no me acaban de convencer las habilidades de su clase comparándolas con las de la clériga así que casi nunca lo uso. Tampoco soy alguien que use el comando de defender en combate casi nunca, así que el talento del caballero me la pela bastante. Y para usar bien los Pokémon de la cazadora hay que dedicarle tiempo a capturarlos (me recuerda un poco al sistema de magias de
FF8), cosa que no hago.
En fin, ahora mismo estoy haciendo sidequests para subir de nivel antes de pasar a los capítulos 3. Me he cargado a un pulpo en una cueva que ha sido el jefe más difícil del juego hasta ahora.
He jugado un poco al
Redout también. Ya casi me había olvidado de él.
Vale, uno puede hablar mucho acerca de todos esos juegos que intentan ser un
F-Zero y que se quedan a medio camino (prácticamente todos los juegos de este estilo que no son
F-Zero en mi opinión). Sin embargo... Si pasamos esto por alto y aceptamos las cosas como son, al final Redout tampoco está nada mal.
... Lamentablemente también es un juego del que no tengo gran cosa que decir debido a su simple premisa. Hmmm...
Ah, sí. Creo que es la primera vez que he escuchado canciones de dubstep que no me han hecho desear volarme la cabeza con un revólver. El estilo musical funciona sorprendentemente bien con el gameplay.
Tuve también mis primeros encuentros con las misiones de "jefe", en las que básicamente agarran todos los circuitos de un tipo de bioma y te los meten a la vez conectados por portales dimensionales y creando un circuito extra-largo.
Como dije, el juego está bien, pero tampoco sé cuanto tiempo voy a quedarme con él. Me da la sensación de que va a ser uno de esos que voy a dejar atrás en cuanto la CPU empiece a encabritarse demasiado, porque si bien mola para descargar adrenalina tampoco me satisface tanto como para querer dedicarle tiempo y esfuerzo a dominarlo. Y odio tener que sonar negativo con este juego, porque no es mi intención en absoluto. En realidad me gusta, en serio. De hecho tengo intención de pillarme todos los DLCs.
Completando más misiones del
Shadowrun: Dragonfall.
Completadas un par de misiones más.
La primera consistió en infiltrarse en unas instalaciones y cargarse a otro tipo infiltrado que había sido capturado, antes de que soltase la lengua. Por supuesto, tienes la opción de liberarlo y dejarlo huir, pero el tipo resulta no ser exactamente buena persona así que casi mejor pegarle un tiro. De hecho, recibes más karma si lo haces. Fue una misión simple y limpia, excepto cuando desactivé unas jaulas para que saliesen unos basiliscos a atacar a los guardias. Sin embargo, al regresar del trabajo unos tíos te atacan en la estación de metro. Eso fue una sorpresa.
La segunda misión no fue tan sencilla. Consistía en robar una especie de banco con la ayuda del hacker del grupo, el cual lo tiene todo controlado en lo que se refiere a permitirte entrar... pero se olvida por completo de trazar un plan que te permita salir. Lo que hace que esta misión sea más compleja es que vas únicamente con tu personaje principal, y se te une otro NPC que no forma parte del grupo. Además, es la primera misión donde se te fuerza a combatir en el mundo real y en la red a la vez. El último combate sucede en una sala con cuatro torretas, y tienes que hacer frente a los guardias mientras que tu hacker se enfrenta contra un jefe en el mundo virtual e intenta tomar el control de las torretas a la vez. Mi personaje es una rigger (lucha ocultándose y controlando drones), así que si tenía que tocar alguna palanca o algo en medio del combate tenía que dejar que el otro personaje lo hiciese.
La siguiente misión que tengo consiste en infiltrarme en otra instalación y robar un prototipo. Por otra parte, ya tengo la mitad de la pasta necesaria para pagar a la informante y seguir con la historia central del juego.
Me pasé la historia principal del parche 5.5 en
FFXIV.
Recibimos algo más de información acerca de las torres que han ido apareciendo en distintos puntos del mundo, y que parecen estar lavándole el cerebro a la gente e invocando primordiales. En concreto, el Bahamut Lunar de Fandaniel ha sido visto en Paglth'an (tuve que reescribir ese nombre tres veces), la tierra santa de los Amalj'aa. Los Amalj'aa son una raza de hombres-bestia con la que hemos tenido varios encuentros desagradables, pero con los Telophoroi liándola parda alrededor del mundo no nos queda más remedio que invadir su lugar sagrado. Tampoco es que vayan a protestar, al fin y al cabo están defendiéndolo de soldados imperiales y podrían necesitar nuestra ayuda.
Como mazmorra, Paglth'an es una de esas en las que varios NPCs aparecen para ayudarte a medida que avanzas. La estrella invitada, Tiamat, la esposa de Bahamut, aparece para cargarse a varias tropas enemigas hacia el final. Tiamat era un personaje que había aparecido en
Heavensward, encarcelada por voluntad propia para redimirse de los crímenes que cometió en el pasado (fue ella quien invocó al primordial Bahamut originalmente). Tras convencerla de que los dragones de su prole están siendo usados por Fandaniel y los Telophoroi para invocar una versión retorcida de Bahamut, decide que sería de más ayuda rompiendo sus cadenas y tomando parte activa de la lucha como parte de su redención. Esto estuvo bastante guay, un personaje que había aparecido hace dos expansiones como parte del lore de pronto reapareciendo y tomando cartas en el asunto. Me gustó bastante.
Lamentablemente, otro de los personajes aliados acaba resultando herido durante su infiltración en la torre. Y ahí queda la trama, con este personaje en la enfermería.
También tenemos una escena extremadamente tocahuevos con Zenos, el malo, intentando decidir que arma usará para los eventos que se avecinan. SABEMOS que el arma será la que llevará la nueva clase DPS de la próxima expansión, pero la escena se corta justo cuando el tío la desenvaina y no somos capaces de verla.
Tampoco importa tanto. Este Viernes es la convención, si no me equivoco, y mostrarán la clase entonces. Así como el trailer extendido, espero.
Para la siguiente semana... Más
Shadowrun. Más
Octopath. Y seguiré con la trama de Edén en
FFXIV. No sé cuando va a salir el parche 5.55, que seguramente contendrá algunas misiones de historia más, aunque no sé si ninguna mazmorra o cosas parecidas. Se rumorea que a finales de Mayo.