Ok, antes que nada, mencionar que me encanta el diseño de este sitio. Es como si H. R. Giger y Zdzislaw Beksinski se uniesen para diseñar una nave aérea, y las cosas se van volviendo más y más turbias a medida que vas adentrándote y ves que hay sarcófagos por todas partes. Los sarcófagos contienen los demonios cuyo poder los Mhachies usaron para suministrar energía al arca. Todo forma parte de una macabra obra de ingeniería y lo adoro.

La música tampoco se queda muy atrás. Las primeras notas emiten una insinuación de "Probablemente la cagamos entrando aquí dentro" como pocos otros temas he escuchado. El tema se vuelve menos amenazante a los pocos segundos, pero esa primera impresión se queda bastante marcada.



No todo va a ser completamente positivo, sin embargo, y es que de todas las raids de 24 personas que he jugado hasta ahora, El Arca Vacua se me ha hecho la más fácil con diferencia. Esto es un poco decepcionante.
Pero bueno, pasemos a ver de que va el tema.

Durante la primera parte estás explorando las partes exteriores de la nave. Los enemigos aquí no son demonios sino depredadores naturales del Mar de Nubes que parecen seguir al arca, quizá porque han hecho nidos en su interior o porque buscan alimento. Uno de ellos, un pez manta gigantesco, aparece varias veces embistiendo muros y creando pasarelas, hasta que finalmente decide encararse contigo.

Jefe 1: Cetus
Cetus ataca lanzando ataques eléctricos y de agua, así como lanzando su cuerpo entero intentando aplastarte. Todo esto son ataques de área bastante comunes, nada fuera de lo normal. No obstante, llegado a un punto del combate utiliza Simbiosis, y un montón de tiburones aéreos asaltan la plataforma. Cada tiburón elige un objetivo, y hay que intentar matarlos antes de que se lancen a por él (aunque tampoco es tan grave si no se logra detenerles). Mientras tanto, Cetus sobrevuela la plataforma fuera del alcance de los ataques y va lanzando bombas de agua.
Hacia el final del combate, Cetus volverá a invocar a los tiburones, pero seguirá luchando a la vez. Por lo general no es un combate complejo.

La siguiente fase de enemigos normales es, os lo creáis o no, la parte más complicada de toda la raid. Sucede en una sala que tiene vagamente forma de donut triangular, y en cada esquina hay un botón. En medio del donut hay un agujero con un ventilador que da al exterior. La idea es que la raid se divide en tres grupos para matar a todos los bichos alrededor del donut, y a medida que los matas bichos más fuertes van apareciendo hasta que el juego dice que basta y te deja continuar. ¿El problema? Hay unos monstruos que aparecen cada X tiempo y se llaman Nudos Paganos. Son como una especie de bulbos en el suelo. Si se los deja vivir van emitiendo una especie de vapor tóxico que va llenando una barra de corrupción. Si esta barra llega al máximo, es wipe.
Alrededor del donut hay un total de tres botones que, si son pulsados a la vez, activan el ventilador y expulsan el vapor tóxico. Igualmente, matar a los Nudos Paganos es la máxima prioridad, e incluso cuando uno de los grupos de la raid ya ha acabado con su grupo de enemigos conviene que no todos vayan a ayudar al resto y que al menos una persona se quede cerca de su botón, por si acaso. Para complicar las cosas un poco más, los botones se electrifican de vez en cuando. No acabé de pillar si esto es aleatorio, sucede cada cierto tiempo o si hay algo que lo provoca.

Jefe 2: Sawtooth & Irminsul
Sawtooth es una especie de hidra, excepto que en vez de cabezas de reptil tiene un montón de venus atrapamoscas. Está conectado por su cola a Irminsul, una columna o tronco de árbol que está en el centro de la sala. Ambos son objetivos y ambos atacan, incluyendo Irminsul por mucho que parezca que no está haciendo nada (va lanzando magias y ataques de área). Al empezar el combate, uno de ellos obtendrá inmunidad a ataques físicos y el otro a ataques mágicos. En mi caso, Irminsul fue el que era inmune a ataques físicos, así que tuve que concentrar mis ataques en Sawtooth.
Durante todo el combate van saliendo unos enemigos con forma de abejorro. Algunos de los ataques de Sawtooth pueden devorar estos abejorros si no se los mata antes, y si esto ocurra enviará energía hacia Irminsul mediante el enlace de su cola, bufando a su compañero. Ignoro que ocurre si lo bufa demasiado, pero deduzco que acabará en wipe, aunque no se si está programado para hacer un ataque masivo de muerte instantánea o si simplemente Irminsul acaba tan sobredopado que es imposible de contener.
Otras cosas a tener en cuenta, hay un ataque en el que Sawtooth mete sus cabezas en el suelo y luego las hace surgir de forma masiva pegando un bocado y haciendo daño en área. Este es uno de los ataques que pueden comerse a los abejorros, y si además pilla a algún jugador, ese jugador queda "infectado", se convierte en una especie de híbrido-planta y empieza a atacar a sus compañeros.
Luego hay otro ataque en el que escupen unos charcos de moco enormes y todos los jugadores a los que pillen son atados entre si por tiras de mucosidad, impidiendo que puedan moverse. Un jugador cualquiera puede pasar por el medio de esas tiras para liberarlos. Finalmente, Sawtooth tiene otro ataque que se evita escondiéndote detrás del propio Irminsul y usándolo como escudo, o de lo contrario te mata de un golpe.
El combate es un poco confuso al principio. Yo pasé como un cuarto de él atacando a Irminsul antes de darme cuenta de que no le estaba haciendo daño.

En la siguiente parte entramos ya en lo que sería la "sala de motores" del arca, y nos encontramos con Diabolos. Este personaje ya había salido anteriormente en el juego, era el jefe de la Ciudad Perdida de Amdapor, una mazmorra del postjuego del juego base. Aparentemente nuestra escaramuza en aquel sitio acabó rompiendo sus cadenas, y ahora está en el arca disfrutando de una reunión familiar. El tipo empieza a cortar las cadenas de algunos de los sarcófagos que cuelgan por la zona, y al caer se rompen y de ellos salen demonios contra los que tienes que luchar. Vas avanzando de esta forma hasta que llegas al siguiente jefe.

Jefe 3: Cúchulainn
Su diseño es algo distinto al del esper de FFXII, pero sigue el mismo concepto de ser un ser obeso que vomita podedumbre y pestilencia. Pero esta vez tiene tentáculos. Y una boca en el estómago.
Pues si, es más o menos lo que cabe esperar: Ataques de vómito, charcos de mierda... Muchos de sus ataques de área se quedan en el suelo durante un rato. Es importante no llevarlos a unas zonas que están ligeramente elevadas, porque Cúchulainn tiene un ataque que inunda toda la sala en ácido excepto esas zonas.
Todos los jugadores están levemente envenenados durante todo este combate, y aunque el daño es relativamente menor, no puede curarse. Eso si: Llegado cierto punto, Cúchulainn invoca unas estatuas que multiplican el daño de este veneno y tienen que ser destruidas cuanto antes. De forma similar, unos enemigos con forma de pudding empiezan a salir también por la plataforma, y al igual que con Sawtooth en el combate anterior, Cúchulainn puede devorarlos para aumentar su poder de ataque, por lo que conviene intentar eliminarlos cuanto antes.
Hacia el final del combate, Cúchulainn empieza a usar un ataque que se llama Pulmones Negros, que aumenta de forma permanente e irreversible la cantidad de daño que el veneno constante hace. Supongo que la idea es que si se tarda demasiado en matarlo, Pulmones Negros acaba potenciando tanto el veneno que al final se hace insostenible y todo el mundo muere, pero el tiempo que te dan es bastante generoso.

No hay enemigos entre este jefe y el último. Pasamos pues a la sala final, donde hay un gigantesco sarcófago encadenado. Sea quien sea el demonio que habita dentro, tiene pintas de ser la hostia. Pero no vamos a luchar contra él. En vez de eso, nos enfrentamos contra una mujer-serpiente llamada Equidna.

Jefe Final: Equidna
Equidna es una bicha muy rara formada a partir de una Lamia y dos serpientes gigantes, aunque la combinación tiene más pintas de insectoide que de reptil. También es un jefe más fácil que los dos anteriores.
No hay gran cosa que decir sobre ella porque la mayoría de sus ataques son cosas que ya hemos visto antes. Tan solo tiene una fase en la que se separa en los tres monstruos y cada uno tiene que ser recogido por un tanque y llevado a extremos opuestos de la plataforma (de lo contrario se bufan por proximidad). Tras matar a los tres, volverán a unirse en uno y empieza la segunda fase, que viene a ser más de lo mismo.
Otros demonios empiezan a aparecer por la sala y tienen que ser eliminados antes de que empiecen a incordiar demasiado. Equidna usará nuevos ataques de área, como uno en el que lanza explosiones en varios sitios a la vez, u otro en el que divide la plataforma en dos dejando solo una línea central como lugar seguro. El ataque que suele pillar a la gente desprevenida es Petrificación, que petrifica a todos los jugadores que estén mirando a Equidna cuando la lanza.
El combate no es muy largo, pero si se tarda demasiado Equidna puede volver a dividirse en sus tres partes otra vez. No es problema, simplemente hay que volver a separarlas como antes.

Raid fácil, fácil. Pero claro, no todo puede salir bien, e inmediatamente después las cosas se complican.