[html]<ul>
<li><strong>Plataformas:</strong> PC, PS3, PSVita, WiiU</li>
<li><strong>Desarrolladora:</strong> NifflasÔÇÖ Games</li>
<li><strong>Género:</strong> Aventura, plataformas</li>
<li><strong>Lanzamiento europeo:</strong> Diciembre de2012 (PS3 y Vita) Octubre de2013 (PC)</li>
<li><strong>Idioma:</strong> Textos en Castellano en consolas, en inglés en PC</li>
</ul>
<p style="text-align: justify;">La progresiva destrucción de la superficie terrestre por parte de la actividad humana tiene incontables consecuencias, pero seguramente no habíamos pensado demasiado en la forma en que otras especies, posibles sociedades al margen de la nuestra, se adaptarían a un nuevo hábitat. En<strong> Knytt Underground</strong> tenemos hadas y duendes que se han visto trasladados al subsuelo más profundo para poder sobrevivir después de que nuestro insano modo de vida volviese inhabitable su antiguo lugar de residencia. Por si esto fuera poco, el definitivo <strong>fin del mundo</strong> es inminente, a no ser que una chica muda con la habilidad de convertirse en una pelota cumpla a tiempo su misión salvadora. Muchos saltos, viajes y diálogos después, aquí traigo una valoración de lo experimentado.</p>
<p><iframe width="618" height="348" src="http://www.youtube.com/embed/EqfRy9f2XQE?feature=oembed" frameborder="0" allowfullscreen></iframe></p>
<h2 style="text-align: center;"></h2>
<h2 style="text-align: center;">Argumento y aspectos jugables</h2>
<p style="text-align: justify;">Knytt Underground es un <strong>juego de plataformas y aventuras</strong>, el tercero de una saga cuyas primeras entregas están <strong>disponibles en libre distribución</strong>, y creado por el respetado <strong>Nicklas Nygren ÔÇ£NifflasÔÇØ</strong>. Su trabajo demuestra ampliamente su buen gusto y conocimiento del medio, pues junto a la simpleza de que hacen gala sus diseños y controles, tenemos una <strong>propuesta jugable prometedora</strong> y realmente capaz de satisfacernos.</p>
<p style="text-align: justify;">Nuestro primer contacto es un menú interactivo donde ya manejamos a <strong>Mi Sprocket</strong>, nuestra protagonista. Se trata de un duende que busca la ayuda de las hadas para corregir su mudez. Después de completar un primer capítulo que sirve de introducción a los <strong>controles básicos del personaje</strong>, pasamos a encarnar a Bob, una pelota roja de simpático gesto que va rebotando en el suelo y en todas las paredes que encontremos, de modo que el motor de físicas del juego cobra bastante protagonismo para la precisión de nuestros movimientos. Una vez hayamos terminado ambos tutoriales, empezaremos con la verdadera e importante historia que Knytt Underground nos quiere contar.</p>
<div id="attachment_5662" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5662 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-2.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">La precisión es la base de la jugabilidad</p></div>
<p> </p>
<p style="text-align: justify;">Mi ha sido elegida como salvadora del mundo y debe buscar <strong>las seis campanas del destino</strong> desperdigadas por un inmenso mapeado, que son la única esperanza para evitar el apocalipsis. Para lograrlo, cuenta con la compañía de Cilia y Dora, dos hadas diminutas de carácter muy contrario que harán las veces de su voz, transmitiendo al resto de personajes los pensamientos de nuestra duende. Mi también dispone de su innata capacidad de convertirse en Bob (una pelota roja) siempre que quiera. Además, hay diversos poderes repartidos por algunos lugares que darán a nuestro personaje habilidades instantáneas para superar obstáculos. Todo esto, unido a la asombrosa e inestimable aptitud escaladora de Mi, da lugar a ingeniosas situaciones y puzles que suelen poder resolverse de más de una manera.</p>
<p style="text-align: justify;">A lo largo de su periplo, Mi y compañía se encontrarán con todo tipo de personajes que, en la mayoría de ocasiones, necesitarán nuestra ayuda. Aunque el cometido inicial parece simple, no es fácil completarlo sin explorar la mayor parte del mapa, ya que muchas veces tendremos rutas cerradas y custodiadas por gente que quiere algo a cambio de dejarnos pasar, lo cual abre <strong>multitud de misiones secundarias</strong> que, a veces, no son opcionales. La verdad es que queda lejos de resultar un recurso sin imaginación en forma de lastre, pues alienta mucho la exploración, que termina siendo la seña de identidad del juego y se convierte en algo muy ameno dada la facilidad con que el enrevesado mapeado nos sumergirá y atrapará para tratar de descubrir absolutamente todo. No es algo tan fácil ni común, pero a base de pequeñas historias alternativas y de un ritmo de juego bastante rápido (recuerda un poco al de Super Meat Boy, aunque sin ser en absoluto un reto tan difícil), nos cuela en el cuerpo el gusanillo de querer llegar a cada rincón oculto. Por si fuera poco, Knytt requiere un buen puñado de horas para ser completado (entre 15 y 20 fácilmente).</p>
<div id="attachment_5663" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5663 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-3.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">El mapa ofrece buena variedad de escenarios, siempre partiendo de lo más simple</p></div>
<p style="text-align: justify;">Los motivos de cada misión suelen ser variados: en ocasiones sólo echaremos una mano a un duende cualquiera que quiere conseguir alguna locura, y otras muchas veces nos veremos envueltos en diálogos que llevan a cambios de parecer en los personajes protagonistas, e incluso a plantearse todo tipo de preguntas sin respuesta. Después de todo, nuestra misión obedece a las supersticiones más extrañas de una comunidad sectariaÔǪ Cada pequeño detalle puede hacer estallar algún micro-acontecimiento de lo más entretenido, yendo desde peleas de colegio a transformaciones personales, pasando por todo tipo de <strong>humor violento y sexual</strong>. Y lo mejor es que los diálogos no suelen acaparar tanto protagonismo como para cansarnos. Sin embargo, estos encargos se basarán siempre en buscar algún objeto requerido por el personaje que nos pida ayuda, por lo que la acción no varía demasiado.</p>
<p style="text-align: justify;">Aunque los elementos centrales de la jugabilidad ya se han descrito más arriba, vale la pena <strong>remarcar la simpleza del control</strong>, ya que apenas se usan dos botones más allá de las flechas de dirección: uno para cambiar de forma y otro para utilizar los poderes especiales cuando dispongamos de ellos. Aun con todo, resulta que sobra para ofrecer diversidad de situaciones en las que poner en práctica las posibilidades de Mi y Bob con un acertado diseño de niveles. No obstante, el juego peca de cierta falta de retos para la enormidad del mapeado, ya que hay muchas zonas de simple transición (algo normal y necesario, pero quizás aquí sean más de la cuenta) y los enemigos no suelen ser especialmente efectivos en su tarea de obstaculizar nuestro avance, siendo la eventual dificultad para encontrar el camino correcto el principal motivo de preocupación. Esto no quiere decir que el juego sea demasiado fácil, y de hecho está bastante bien equilibrado, pero se podrían haber añadido aún más cantidad de desafíos.</p>
<div id="attachment_5664" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5664 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-4.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">Las reflexiones más ácidas sobre cualquier tema tienen cabida en Knytt</p></div>
<p style="text-align: justify;">Además de esto, cabe destacar que <strong>la versión del juego para PS3 y PS Vita</strong> cuenta con la diferencia de utilizar mando, algo que <strong>la versión Steam</strong> no admite de forma nativa y podría ser atractivo para muchos jugadores en un juego de estas características, donde el teclado no siempre es lo más preciso.</p>
<h2 style="text-align: center;">Apartado técnico</h2>
<p style="text-align: justify;">Simple y llamativo, bonito en muchos puntos pero sin alardes gráficos. Lo mejor es su fluidez y velocidad, que acompaña a un manejo convincente. Los<strong> diseños de personajes</strong> resultan deliberadamente similares entre sí y los escenarios ofrecen diferentes ambientaciones según su localización, dando un poco de personalidad a cada lugar. Podemos decir que artísticamente tiene un estilo muy definido pero no demasiado variado.</p>
<p style="text-align: justify;">En el apartado sonoro nos encontramos en una situación similar: tanto los efectos como la banda sonora cumplen sin problemas (algo muy de esperar viniendo de un desarrollador que gusta de componer su propia música ambiental), pero tampoco es que cuente con demasiada amplitud de temas.</p>
<div id="attachment_5665" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="size-full wp-image-5665" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-5.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">El surtido de fondos y estructuras en negro logra resultados llamativos</p></div>
<p style="text-align: justify;">Cabe mencionar que <strong>el juego está traducido al castellano</strong> en sus versiones para PS3 y PS Vita, algo que no ocurre en su versión de Steam (que es la que he jugado yo). Es una decisión un tanto incomprensible dado que<strong> las versiones de consola</strong> llevaban meses en el mercado cuando la de PC se puso a la venta, pero el caso es que todos los textos (no hay doblaje) están en inglés. No exige un nivel demasiado alto, y además es el jugador quien decide el ritmo de los diálogos, dado que no pasan hasta que no pulsamos el botón para ello, pero aun así más de uno se podría perder detalles importantes.</p>
<h2 style="text-align: center;">Valoración final</h2>
<p style="text-align: justify;">Knytt Underground ofrece muchas horas de entretenimiento. Antes de darnos cuenta, estaremos enganchados a su particular mundo y enorme mapeado, además de unos diálogos que nos harán pensar para sacarnos unas risas a continuación. Quizás visualmente no atraiga a todos, pero cualquier amante de las aventuras en dos dimensiones debería darle una buena oportunidad. <strong>Las posibilidades jugables</strong> que otorga el cambio de forma del protagonista, así como la exploración y su enorme mapeado, son sus mejores señas de identidad, aunque debería tener más cantidad de puzles y puede resultar algo repetitivo en lo audiovisual.</p>
<p style="text-align: justify;">En consecuencia queda un producto notable en el global, merecedor de un 7 como nota final.</p>
<h2 style="text-align: center;"><strong>Alternativas</strong></h2>
<p style="text-align: justify;">Por su aspecto visual podría recordar un poco a Limbo, aunque hay otros juegos interesantes que quizás se asemejen más en su propuesta jugable además de la perspectiva como Cave Story, The Great Work y/o VVVVVV.</p>
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<li><strong>Plataformas:</strong> PC, PS3, PSVita, WiiU</li>
<li><strong>Desarrolladora:</strong> NifflasÔÇÖ Games</li>
<li><strong>Género:</strong> Aventura, plataformas</li>
<li><strong>Lanzamiento europeo:</strong> Diciembre de2012 (PS3 y Vita) Octubre de2013 (PC)</li>
<li><strong>Idioma:</strong> Textos en Castellano en consolas, en inglés en PC</li>
</ul>
<p style="text-align: justify;">La progresiva destrucción de la superficie terrestre por parte de la actividad humana tiene incontables consecuencias, pero seguramente no habíamos pensado demasiado en la forma en que otras especies, posibles sociedades al margen de la nuestra, se adaptarían a un nuevo hábitat. En<strong> Knytt Underground</strong> tenemos hadas y duendes que se han visto trasladados al subsuelo más profundo para poder sobrevivir después de que nuestro insano modo de vida volviese inhabitable su antiguo lugar de residencia. Por si esto fuera poco, el definitivo <strong>fin del mundo</strong> es inminente, a no ser que una chica muda con la habilidad de convertirse en una pelota cumpla a tiempo su misión salvadora. Muchos saltos, viajes y diálogos después, aquí traigo una valoración de lo experimentado.</p>
<p><iframe width="618" height="348" src="http://www.youtube.com/embed/EqfRy9f2XQE?feature=oembed" frameborder="0" allowfullscreen></iframe></p>
<h2 style="text-align: center;"></h2>
<h2 style="text-align: center;">Argumento y aspectos jugables</h2>
<p style="text-align: justify;">Knytt Underground es un <strong>juego de plataformas y aventuras</strong>, el tercero de una saga cuyas primeras entregas están <strong>disponibles en libre distribución</strong>, y creado por el respetado <strong>Nicklas Nygren ÔÇ£NifflasÔÇØ</strong>. Su trabajo demuestra ampliamente su buen gusto y conocimiento del medio, pues junto a la simpleza de que hacen gala sus diseños y controles, tenemos una <strong>propuesta jugable prometedora</strong> y realmente capaz de satisfacernos.</p>
<p style="text-align: justify;">Nuestro primer contacto es un menú interactivo donde ya manejamos a <strong>Mi Sprocket</strong>, nuestra protagonista. Se trata de un duende que busca la ayuda de las hadas para corregir su mudez. Después de completar un primer capítulo que sirve de introducción a los <strong>controles básicos del personaje</strong>, pasamos a encarnar a Bob, una pelota roja de simpático gesto que va rebotando en el suelo y en todas las paredes que encontremos, de modo que el motor de físicas del juego cobra bastante protagonismo para la precisión de nuestros movimientos. Una vez hayamos terminado ambos tutoriales, empezaremos con la verdadera e importante historia que Knytt Underground nos quiere contar.</p>
<div id="attachment_5662" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5662 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-2.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">La precisión es la base de la jugabilidad</p></div>
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<p style="text-align: justify;">Mi ha sido elegida como salvadora del mundo y debe buscar <strong>las seis campanas del destino</strong> desperdigadas por un inmenso mapeado, que son la única esperanza para evitar el apocalipsis. Para lograrlo, cuenta con la compañía de Cilia y Dora, dos hadas diminutas de carácter muy contrario que harán las veces de su voz, transmitiendo al resto de personajes los pensamientos de nuestra duende. Mi también dispone de su innata capacidad de convertirse en Bob (una pelota roja) siempre que quiera. Además, hay diversos poderes repartidos por algunos lugares que darán a nuestro personaje habilidades instantáneas para superar obstáculos. Todo esto, unido a la asombrosa e inestimable aptitud escaladora de Mi, da lugar a ingeniosas situaciones y puzles que suelen poder resolverse de más de una manera.</p>
<p style="text-align: justify;">A lo largo de su periplo, Mi y compañía se encontrarán con todo tipo de personajes que, en la mayoría de ocasiones, necesitarán nuestra ayuda. Aunque el cometido inicial parece simple, no es fácil completarlo sin explorar la mayor parte del mapa, ya que muchas veces tendremos rutas cerradas y custodiadas por gente que quiere algo a cambio de dejarnos pasar, lo cual abre <strong>multitud de misiones secundarias</strong> que, a veces, no son opcionales. La verdad es que queda lejos de resultar un recurso sin imaginación en forma de lastre, pues alienta mucho la exploración, que termina siendo la seña de identidad del juego y se convierte en algo muy ameno dada la facilidad con que el enrevesado mapeado nos sumergirá y atrapará para tratar de descubrir absolutamente todo. No es algo tan fácil ni común, pero a base de pequeñas historias alternativas y de un ritmo de juego bastante rápido (recuerda un poco al de Super Meat Boy, aunque sin ser en absoluto un reto tan difícil), nos cuela en el cuerpo el gusanillo de querer llegar a cada rincón oculto. Por si fuera poco, Knytt requiere un buen puñado de horas para ser completado (entre 15 y 20 fácilmente).</p>
<div id="attachment_5663" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5663 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-3.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">El mapa ofrece buena variedad de escenarios, siempre partiendo de lo más simple</p></div>
<p style="text-align: justify;">Los motivos de cada misión suelen ser variados: en ocasiones sólo echaremos una mano a un duende cualquiera que quiere conseguir alguna locura, y otras muchas veces nos veremos envueltos en diálogos que llevan a cambios de parecer en los personajes protagonistas, e incluso a plantearse todo tipo de preguntas sin respuesta. Después de todo, nuestra misión obedece a las supersticiones más extrañas de una comunidad sectariaÔǪ Cada pequeño detalle puede hacer estallar algún micro-acontecimiento de lo más entretenido, yendo desde peleas de colegio a transformaciones personales, pasando por todo tipo de <strong>humor violento y sexual</strong>. Y lo mejor es que los diálogos no suelen acaparar tanto protagonismo como para cansarnos. Sin embargo, estos encargos se basarán siempre en buscar algún objeto requerido por el personaje que nos pida ayuda, por lo que la acción no varía demasiado.</p>
<p style="text-align: justify;">Aunque los elementos centrales de la jugabilidad ya se han descrito más arriba, vale la pena <strong>remarcar la simpleza del control</strong>, ya que apenas se usan dos botones más allá de las flechas de dirección: uno para cambiar de forma y otro para utilizar los poderes especiales cuando dispongamos de ellos. Aun con todo, resulta que sobra para ofrecer diversidad de situaciones en las que poner en práctica las posibilidades de Mi y Bob con un acertado diseño de niveles. No obstante, el juego peca de cierta falta de retos para la enormidad del mapeado, ya que hay muchas zonas de simple transición (algo normal y necesario, pero quizás aquí sean más de la cuenta) y los enemigos no suelen ser especialmente efectivos en su tarea de obstaculizar nuestro avance, siendo la eventual dificultad para encontrar el camino correcto el principal motivo de preocupación. Esto no quiere decir que el juego sea demasiado fácil, y de hecho está bastante bien equilibrado, pero se podrían haber añadido aún más cantidad de desafíos.</p>
<div id="attachment_5664" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="wp-image-5664 size-full" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-4.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">Las reflexiones más ácidas sobre cualquier tema tienen cabida en Knytt</p></div>
<p style="text-align: justify;">Además de esto, cabe destacar que <strong>la versión del juego para PS3 y PS Vita</strong> cuenta con la diferencia de utilizar mando, algo que <strong>la versión Steam</strong> no admite de forma nativa y podría ser atractivo para muchos jugadores en un juego de estas características, donde el teclado no siempre es lo más preciso.</p>
<h2 style="text-align: center;">Apartado técnico</h2>
<p style="text-align: justify;">Simple y llamativo, bonito en muchos puntos pero sin alardes gráficos. Lo mejor es su fluidez y velocidad, que acompaña a un manejo convincente. Los<strong> diseños de personajes</strong> resultan deliberadamente similares entre sí y los escenarios ofrecen diferentes ambientaciones según su localización, dando un poco de personalidad a cada lugar. Podemos decir que artísticamente tiene un estilo muy definido pero no demasiado variado.</p>
<p style="text-align: justify;">En el apartado sonoro nos encontramos en una situación similar: tanto los efectos como la banda sonora cumplen sin problemas (algo muy de esperar viniendo de un desarrollador que gusta de componer su propia música ambiental), pero tampoco es que cuente con demasiada amplitud de temas.</p>
<div id="attachment_5665" style="width: 660px" class="wp-caption aligncenter"><img class="size-full wp-image-5665" src="http://33bits.es/wp/wp-content/uploads/2014/10/knytt-underground-5.jpg" alt="Análisis de Knytt Underground" width="650" height="365" /><p class="wp-caption-text">El surtido de fondos y estructuras en negro logra resultados llamativos</p></div>
<p style="text-align: justify;">Cabe mencionar que <strong>el juego está traducido al castellano</strong> en sus versiones para PS3 y PS Vita, algo que no ocurre en su versión de Steam (que es la que he jugado yo). Es una decisión un tanto incomprensible dado que<strong> las versiones de consola</strong> llevaban meses en el mercado cuando la de PC se puso a la venta, pero el caso es que todos los textos (no hay doblaje) están en inglés. No exige un nivel demasiado alto, y además es el jugador quien decide el ritmo de los diálogos, dado que no pasan hasta que no pulsamos el botón para ello, pero aun así más de uno se podría perder detalles importantes.</p>
<h2 style="text-align: center;">Valoración final</h2>
<p style="text-align: justify;">Knytt Underground ofrece muchas horas de entretenimiento. Antes de darnos cuenta, estaremos enganchados a su particular mundo y enorme mapeado, además de unos diálogos que nos harán pensar para sacarnos unas risas a continuación. Quizás visualmente no atraiga a todos, pero cualquier amante de las aventuras en dos dimensiones debería darle una buena oportunidad. <strong>Las posibilidades jugables</strong> que otorga el cambio de forma del protagonista, así como la exploración y su enorme mapeado, son sus mejores señas de identidad, aunque debería tener más cantidad de puzles y puede resultar algo repetitivo en lo audiovisual.</p>
<p style="text-align: justify;">En consecuencia queda un producto notable en el global, merecedor de un 7 como nota final.</p>
<h2 style="text-align: center;"><strong>Alternativas</strong></h2>
<p style="text-align: justify;">Por su aspecto visual podría recordar un poco a Limbo, aunque hay otros juegos interesantes que quizás se asemejen más en su propuesta jugable además de la perspectiva como Cave Story, The Great Work y/o VVVVVV.</p>
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Gran análisis Bon.

Gran análisis Bon.