Yo no he subido de nivel nunca

(21-07-2017 15:50)Mafrune escribió:Ultimamente estoy bastante de acuerdo con Ricardo. Es grave? Necesito tratamiento?

Ricardo es un poco como un filósofo clásico. Está chapado a la antigua y a veces es un poco rollo y gruñón, y no le elegirías nunca para irte de cañas y echar unas risas, pero de cuando en cuando te suelta sus perlas de sabiduría que a todos nos hacen reflexionar. Yo a veces le daría un abrazo. Otras le insulto por privado.

(21-07-2017 16:33)Jesucristo escribió:Ricardo es un poco como un filósofo clásico. Está chapado a la antigua y a veces es un poco rollo y gruñón, y no le elegirías nunca para irte de cañas y echar unas risas, pero de cuando en cuando te suelta sus perlas de sabiduría que a todos nos hacen reflexionar. Yo a veces le daría un abrazo. Otras le insulto por privado.

Veo que no soy el unico que piensa asi. A veces pienso que es un !"·!$I· y otras veces me quedo acechando un hilo a la espera de lo que diga.

(20-07-2017 18:37)Xiphias escribió:Yo creo que ni todos necesitan un capón ni todos se tienen que librar de alguno. Hay de todo, que es lo que se ha aplicado siempre. En la mayoría de casos se podrá educar, que no consentir a diestro y siniestro, con cierta disciplina sin ningún cachete de por medio, y es lo preferible, pero también hay niños malos a rabiar que no entienden de otra. A uno de esos a los que las cosas le entran por un oído y le salen por el otro ya puedes sentarte a explicarle las cosas, que se las traen al pairo y a la siguiente la hace igual o peor. Porque los hay así, que no siempre (aunque sí en muchas ocasiones) es culpa de los padres.

Me gustaría ver a mí a alguno de los dialogantes zapateros como le tocase en la tómbola de la vida un trasto de esos malos como ellos solos... Porque parte de la personalidad y el comportamiento es moldeable en el proceso de aprendizaje, pero otra la traemos de serie.

Tampoco es que se esté defendiendo meter un hostiazo o una paliza.

Lo subscribo punto por punto. No se puede decir más claro.
Yo en ese sentido tuve suerte con los niños, pero conozco un caso muy cercano, en que una de las criaturas les salió 'rana' a los padres. Y fueron igual con los otros dos hijos, no hubo trato especial al tercero. El niño ha salido un tirano egocéntrico y déspota a no poder más, y no hace ni puto caso a nada, se ríe de todo el mundo.
Hablar con esos niños es como hacerlo con un pez, no sirve de nada.
A mí mis padres no me maltrataron, pero alguna torta me llevé por pasarme de la raya. Y no pasó nada, ni me volví un delincuente ni un abusón. Entendí el mensaje al instante. Pero ahora hay una especie de corriente en el que decir no a los niños o advertirles de su mal comportamiento es reprobable, y esos padres están creando auténticos cabrones sicópatas, con falta de empatía por todos, a los que lo único que les importa es tenerlo todo con solo abrir la boca, y una nula obediencia a cualquier figura disciplinaria.

Enviado desde mi Mi Note 2 mediante Tapatalk

Yo no tengo hijos, pero siempre comparo la educación de los niños con el entrenamiento de perros, que es un tema que sí domino. No os imagináis la cantidad de dueños de perro que están convencidos de estar haciendo lo correcto. Que incluso se informan de las técnicas para educar o corregir comportamientos no deseados, y las aplican. Y no entienden por qué el perro no responde a su entrenamiendo, es desobediente etc. Yo necesito verlos sólo unos minutos para darme cuenta de que lo están haciendo MAL, así de simple. No es algo que el perro traiga de serie grabado en su cerebro, es que los dueños se están equivocando a la hora de aplicar ese entrenamiento.

Hay clientes que llegan a mentir sobre su relación con su perro, porque les importa más su orgullo y su imagen de cara a los demás que el aprender a solucionar esos pequeños problemas que tienen. Y esto lo he visto no una sino varias veces.

Y estoy convencido de que con los niños es lo mismo. Al igual que estoy convencido de que sencillamente no existe eso de "han dado exactamente la misma educación a sus dos hijos, uno salió bueno y el otro malo". Nadie puede repetir la misma vida dos veces punto por punto. Con el segundo, los padres pueden estar más cansados, o el segundo tiene la experiencia extra de tener un hermano mayor que el primero no tuvo, o el segundo es más hiperactivo, y el caracter blando de los padres que no fue un problema con el primero sí lo es con el segundo. 

Una vez más, la gente comete errores muy obvios y no los ven. A veces, incluso después de que se los señalas, siguen sin verlos.