27-02-2024 12:30
Los Transformers de Daniel Warren Johnson y Mike Spicer solo me dan alegrías y alegrías. Como aún no ha llegado la colección a España, pongo en spoiler las tres últimas páginas de la quinta grapa recién lanzada:
Y parece irme al lado contrario, pero es que me ha encantado la historia de Sargento Inmortal, aunque no lo hubiera hecho de la misma manera sin el dibujazo de Ken Niimura. Lo que parecen cuatro líneas sin cerrar, que el cabrón no cierra ni bocas ni ojos ni... me parece una de los mejores apartados narrativos que me he echado al morro en tiempo:
Ameriespañomanga para la historia de un padre y un hijo. El padre, un poli facha y caduco, pero muy eficiente y resolutivo en su trabajo. El hijo, timorato, inseguro y pusilánime, pero ha logrado desarrollar su vida y su familia mejor que su viejo. Ambos unidos por el único caso que le taladra la cabeza desde hace décadas a papá, y que va a intentar resolver justito el día antes de su cena de jubilación del cuerpo.
Y ayer noche fue un "voy a leer un poco antes de irme a dormir", y cuando llevaba siete números me di cuenta que, o me iba a la cama, o me daban las tantas al leerme de tirón el integral enterito de Velvet. Ed Brubaker es un genio de la escritura de cómics, aún con sus tropiezos en Marvel a la hora de tratar a los superhéroes de forma más superheroica. Porque cuando lo ha hecho más a la suya, género negro, espionaje... le han quedado mucho mejor las cosas. Precisamente esta mini-saga es lo que nos da, espionaje en 1973, una trama de traiciones, doble juego, y mucha acción. Pues esta vez no lo hace con su compinche Sean Phillips, sino con otro grande como es Steve Epting, con quien llevó a cabo su gloriosa etapa en el Capitán América, donde resucitaría a Bucky Barnes y lo reconvertiría en el Soldado de Invierno. Palabras mayores.
Pues me ha parecido un vicio, un ritmo formidable, una intriga que me ha enganchado en los números que llevo. Y no podía a esperar a dejar una impronta por aquí de tanto como me ha pillado. Tengo que mencionar a la colorista Elizabeth Breitweiser, que aunque Brú y Phill hayan dejado de colaborar con ella hace unos años, es una artistaza, y mira, con su formidable colorido hace que Epting recuerde a Phillips en tantas correrías de la pareja en viñetas.
(Ultima edición: 27-02-2024 13:09 por Rosstheboss.)
Spoiler :
¡PUÑETERA GLORIA!
Y parece irme al lado contrario, pero es que me ha encantado la historia de Sargento Inmortal, aunque no lo hubiera hecho de la misma manera sin el dibujazo de Ken Niimura. Lo que parecen cuatro líneas sin cerrar, que el cabrón no cierra ni bocas ni ojos ni... me parece una de los mejores apartados narrativos que me he echado al morro en tiempo:
Ameriespañomanga para la historia de un padre y un hijo. El padre, un poli facha y caduco, pero muy eficiente y resolutivo en su trabajo. El hijo, timorato, inseguro y pusilánime, pero ha logrado desarrollar su vida y su familia mejor que su viejo. Ambos unidos por el único caso que le taladra la cabeza desde hace décadas a papá, y que va a intentar resolver justito el día antes de su cena de jubilación del cuerpo.
Y ayer noche fue un "voy a leer un poco antes de irme a dormir", y cuando llevaba siete números me di cuenta que, o me iba a la cama, o me daban las tantas al leerme de tirón el integral enterito de Velvet. Ed Brubaker es un genio de la escritura de cómics, aún con sus tropiezos en Marvel a la hora de tratar a los superhéroes de forma más superheroica. Porque cuando lo ha hecho más a la suya, género negro, espionaje... le han quedado mucho mejor las cosas. Precisamente esta mini-saga es lo que nos da, espionaje en 1973, una trama de traiciones, doble juego, y mucha acción. Pues esta vez no lo hace con su compinche Sean Phillips, sino con otro grande como es Steve Epting, con quien llevó a cabo su gloriosa etapa en el Capitán América, donde resucitaría a Bucky Barnes y lo reconvertiría en el Soldado de Invierno. Palabras mayores.
Pues me ha parecido un vicio, un ritmo formidable, una intriga que me ha enganchado en los números que llevo. Y no podía a esperar a dejar una impronta por aquí de tanto como me ha pillado. Tengo que mencionar a la colorista Elizabeth Breitweiser, que aunque Brú y Phill hayan dejado de colaborar con ella hace unos años, es una artistaza, y mira, con su formidable colorido hace que Epting recuerde a Phillips en tantas correrías de la pareja en viñetas.