Reflexión sobre la dificultad en los juegos

[chente]

Buenas.

Estas líneas van destinadas a conocer vuestra opinión sobre la verdadera importancia de la dificultad en los videojuegos. Me gustaría saber qué peso específico creeis que debería tener este aspecto en los mismos, y si el que suponga un reto siempre es positivo, siendo por el contrario algo negativo la ausencia de ello.

Particularmente, siempre he buscado el reto en los videojuegos (como todo el mundo, he jugado a muchos juegos que no me han ofrecido esto, habiendo disfrutado de algunos bastante).

Quizá no sea un requisito imprescindible (el único requisito imprescindible es que resulte divertido a quien lo juega en mi opinión), pero pienso que siempre es un valor añadido, y su ausencia implica siempre en mí cierta desilusión.

Habría luego que valorar qué generos requieren más la presencia de este reto que otros (en mi opinión por ejemplo las plataformas y los RPGs en todas sus variantes son uno de ellos), y además ver en qué punto está el nivel que se puede superar para considerarlo como algo frustrante y poco satisfactorio o simplemen algo retante (en mi caso la frustración no siempre ha sido contraria a diversión, pero entendería que para los demás si lo fuese).

Se me viene a la cabeza Mario Galaxy (el primero, ya que el segundo no me apeteció empezarlo). Es una obra maestra por su jugabilidad, variedad y diseño de niveles. Esto es impepinable independientemente del gusto de cada cual, pero la dificultad lastra al título en mi opinión (salvo los escenarios finales tras rescatar a Peach, donde disfruté algo más del juego).

Sentí que debieron haber ofrecido niveles más retantes, pero igualmente me divertí muchísimo y lo disfruté como el que más.

Luego tenemos el ejemplo de los hack con Ninja Gaiden (requisito imprescindible que sean retantes para tener que sacar todo el partido a las posibilidades jugables del título) o de Dark Souls (este todavía lo tengo por jugar, pero de oidas su dificultas es considerada por la mayoría como un añadido y no algo que reste).

Mirando el mundillo con una visión algo más global, creo que es evidente que la tendencia es hacia la casualización del mercado, hacia la creación de juegos más accesibles para las masas (lo veo lógico, ya que esto al fin y al cabo es un negocio, y como tal interesa llegar al máximo número de personas), y no puedo evitar sentir que salvo algunos reductos, los que amamos la dificultad elevada, estamos en una época que no nos es propicia en absoluto.


Cuál es vuestra opinión de todo esto?


Saludos.