21-06-2016 17:02
Así es. Y por eso la solución está en un poder judicial independiente (ni obstruído, ni instigado, ni nombrado a dedo).
Así como en reformas estructurales que sin aumentar la burocracia demasiado, si que fomenten un mayor control del dinero público: inspecciones transversales entre las distintas capas de la administración pública (nada de cortijos cerrados), auditorías externas periódicas por agencias independientes que no puedan repetir concurso 2 veces seguidas,┬á externalización de la gestión de algunos procesos sensibles para evitar condensar todo el poder en manos del ejecutivo. En definitiva: diseñar el sistema teniendo en cuenta la corruptiblidad de las personas, fomentar que haya muchos más ojos puestos sobre el dinero público y no darle las llaves del coche al primero que venga con una idea brillante.
Los paises en los realmente el sistema funciona se caracterizan porque 1) el gobierno teme a los periodistas (y no al revés), y 2) sectores público y privado colaboran sin mezclarse, vigilándose mutuamente, y siempre atentos a exponer los errores o irregularidades que cometa la otra parte a la primera de cambio. No se protegen entre ellos ni hacen negocios juntos por mordidas (Eso es una tradición hispano-mediterránea).
Desde luego si alguien cree que el sector público puede controlarse y regularse eficazmente a si mismo... está muy equivocado. Del mismo modo que sería una magufada afirmar que el sector privado es┬ácapaz de regularse y controlarse a si mismo. Lo primero es una dictadura del funcionariado, lo segundo es la ley de la selva.
Un Saludo
(Ultima edición: 21-06-2016 17:06 por MMalkavian.)
Así como en reformas estructurales que sin aumentar la burocracia demasiado, si que fomenten un mayor control del dinero público: inspecciones transversales entre las distintas capas de la administración pública (nada de cortijos cerrados), auditorías externas periódicas por agencias independientes que no puedan repetir concurso 2 veces seguidas,┬á externalización de la gestión de algunos procesos sensibles para evitar condensar todo el poder en manos del ejecutivo. En definitiva: diseñar el sistema teniendo en cuenta la corruptiblidad de las personas, fomentar que haya muchos más ojos puestos sobre el dinero público y no darle las llaves del coche al primero que venga con una idea brillante.
Los paises en los realmente el sistema funciona se caracterizan porque 1) el gobierno teme a los periodistas (y no al revés), y 2) sectores público y privado colaboran sin mezclarse, vigilándose mutuamente, y siempre atentos a exponer los errores o irregularidades que cometa la otra parte a la primera de cambio. No se protegen entre ellos ni hacen negocios juntos por mordidas (Eso es una tradición hispano-mediterránea).
Desde luego si alguien cree que el sector público puede controlarse y regularse eficazmente a si mismo... está muy equivocado. Del mismo modo que sería una magufada afirmar que el sector privado es┬ácapaz de regularse y controlarse a si mismo. Lo primero es una dictadura del funcionariado, lo segundo es la ley de la selva.
Un Saludo