19-06-2012 00:09
Mi caso es prácticamente idéntico al de Franchuzas. Mi primo me regaló la NES cuando salió su hermana mayor, durante unos años estuve pasmado con ésta, pero con el paso del tiempo me fascinaba más y más la idea de tener una Snes. Cada vez que visitaba la casa de mis tíos descubría nuevos juegos con los que no podía ni soñar; Yoshi's Island, A Link to the Past, Street Fighter, Secret of Mana, etc... con lo cual comencé a pedirla insistentemente cada navidad. Tal y como me esperaba la consola jamás llegó, con lo que decidí abandonar la idea y pedir una bicicleta.
Llegó el día de Reyes. Aquella mañana me desperté confiado con poder encontrar mi preciado vehículo al pie del árbol de navidad, pero en vez de eso me encontré un par de cachos de carbón. Por aquel entonces yo tenía la férrea convicción de que aquellos trozos negruzcos significaban que había sido malo durante el año, con lo cual me puse a llorar desconsoladamente... poco después descubriría que tras una cortina del salón se escondería una flamante Nintendo 64.
No pude ser más feliz.┬á ;D
Llegó el día de Reyes. Aquella mañana me desperté confiado con poder encontrar mi preciado vehículo al pie del árbol de navidad, pero en vez de eso me encontré un par de cachos de carbón. Por aquel entonces yo tenía la férrea convicción de que aquellos trozos negruzcos significaban que había sido malo durante el año, con lo cual me puse a llorar desconsoladamente... poco después descubriría que tras una cortina del salón se escondería una flamante Nintendo 64.
No pude ser más feliz.┬á ;D
Life's too short to play bad games!