02-11-2014 12:58
Me he dejado traspuesto El eclipse de Antonioni. Brutalerrima la escena inicial, la cámara tan encerrada y enmudecida como sus protagonistas para reflejar la soledad e incomunicación tras la ruptura sentimental. Misma atmósfera hasta llegar al tumulto de corredores de bolsa, donde el dinero es tan efímero como las relaciones personales. ¿Para qué apostar si tan pronto como ganas vuelves a perder? Si quedaban dudas de la intrascendencia de ese coqueteo entre Vitti y Delon, maravilloso final donde observamos los edificios, los árboles, los personajes secundarios, todo, menos a ellos, los supuestos protagonistas.