Buenas tardes.
2º día de Dark Souls II.
2º día de Dark Souls II.
Spoiler :
Ayer lo dejé tras vencer al Jinete de Dragones, y quería continuar explorando la Torre de la Llama de Heide. Fui por el puente que se activa con el mecanismo tras derrotar a los caballeros viejos, y otro Jefe. 'Viejo matadragones' as know as Ornstein, o eso parece. Me ha gustado mucho que hayan metido un Jefe tan carismático, aunque supone otro reto descafeinado pues no pone en serias dificultades salvo despiste, como me pasó a mí, y acabó conmigo la primera vez. La segunda fue la última. Tras derrotarle, hablé con lo que parece un miembro de los Caballeros Azules, simpático como las arañas. Luego fui explorando por otra zona y llegué a un muelle, pero decidí esperar un poco puesto que por ahí probablemente se continuaría.
Quería cargarme al Perseguidor a modo de vendetta, y bueno, por ahora el único Jefe que me ha puesto en serios aprietos. Es muy veloz, extremadamente ágil, y muy, muy fuerte. Al margen de la curiosa habilidad de maldecir (Es una pasada cómo le cambia la estética cuando consigue maldecir. Mola muchísimo). Con paciencia y midiendo los tiempos, acabó cayendo tras 3-4 intentos. Jefe bastante duro, he de decir, aunque imagino que tendría truco, que no es ni más ni menos que asestarle un cañonazo a bocajarro con las ballestas. Lo preferí hacer de manera tradicional. Continué explorando la zona, y no recuerdo nada más destacable en esta parte.
Luego fui al muelle, y ya para empezar he de decir que es una zona que no em gusta nada. Especialmente por tener agua. Y el agua mata. Y no me gusta morir. Los enemigos eran bastante asequibles, aunque los bichos extraños esos de cuatro patas que desangran son algo duros. Pillándoles la espalda caen fácil, eso sí. He explorando bastante la zona, con desagradables emboscadas esporádicamente, y he tocado una especie de campana que acercó el barco. Conseguí llegar hasta la otra parte del muelle, y me dirigí hacia allí. En un abrir y cerrar de ojo veo que me persiguen 4 tíos, y si con dos ya voy justo, entre los cuatro me destrozaron. Varias veces además. Luego pensé un poco, y fui a buscarlos yo en vez de dejar que ellos vinieran. Una vez muertos, entré al barco, y tras acabar con todos los tripulantes, avancé, y atravesé la niebla, para enfrentarme al Centinela Flexible. Espacio reducido y patrón de ataque agresivo, poco más. Cuidado y medir tiempos, y cae muy fácil. A la primera. Tras derrotarlo he explorado el resto del barco y tras tocar lo que parecía una brújula de navegación, ha sonado la campana y el barco ha zarpado, llevándome a una nueva zona donde he encontrado una hoguera. Aquí lo he dejado.
Tengo ahora mismo nivel 40 y algo, la Espada bastarda a +4, el set de Caballero de Élite con Yelmo Varego y Guanteles de bandolero, y el escudo medio que vende el mercader. Por ahora no me va mal, aunque todo me hace un daño devastador. Me gusta mucho que haya Jefes tan seguido, aunque el reto solo me lo ha ofrecido el Perseguidor, que me parece un Jefe formidable y con una estética brillante. Me gusta mucho. Veremos luego qué tal.
Quería cargarme al Perseguidor a modo de vendetta, y bueno, por ahora el único Jefe que me ha puesto en serios aprietos. Es muy veloz, extremadamente ágil, y muy, muy fuerte. Al margen de la curiosa habilidad de maldecir (Es una pasada cómo le cambia la estética cuando consigue maldecir. Mola muchísimo). Con paciencia y midiendo los tiempos, acabó cayendo tras 3-4 intentos. Jefe bastante duro, he de decir, aunque imagino que tendría truco, que no es ni más ni menos que asestarle un cañonazo a bocajarro con las ballestas. Lo preferí hacer de manera tradicional. Continué explorando la zona, y no recuerdo nada más destacable en esta parte.
Luego fui al muelle, y ya para empezar he de decir que es una zona que no em gusta nada. Especialmente por tener agua. Y el agua mata. Y no me gusta morir. Los enemigos eran bastante asequibles, aunque los bichos extraños esos de cuatro patas que desangran son algo duros. Pillándoles la espalda caen fácil, eso sí. He explorando bastante la zona, con desagradables emboscadas esporádicamente, y he tocado una especie de campana que acercó el barco. Conseguí llegar hasta la otra parte del muelle, y me dirigí hacia allí. En un abrir y cerrar de ojo veo que me persiguen 4 tíos, y si con dos ya voy justo, entre los cuatro me destrozaron. Varias veces además. Luego pensé un poco, y fui a buscarlos yo en vez de dejar que ellos vinieran. Una vez muertos, entré al barco, y tras acabar con todos los tripulantes, avancé, y atravesé la niebla, para enfrentarme al Centinela Flexible. Espacio reducido y patrón de ataque agresivo, poco más. Cuidado y medir tiempos, y cae muy fácil. A la primera. Tras derrotarlo he explorado el resto del barco y tras tocar lo que parecía una brújula de navegación, ha sonado la campana y el barco ha zarpado, llevándome a una nueva zona donde he encontrado una hoguera. Aquí lo he dejado.
Tengo ahora mismo nivel 40 y algo, la Espada bastarda a +4, el set de Caballero de Élite con Yelmo Varego y Guanteles de bandolero, y el escudo medio que vende el mercader. Por ahora no me va mal, aunque todo me hace un daño devastador. Me gusta mucho que haya Jefes tan seguido, aunque el reto solo me lo ha ofrecido el Perseguidor, que me parece un Jefe formidable y con una estética brillante. Me gusta mucho. Veremos luego qué tal.
![[Imagen: QXiqbuC.gif]](http://i.imgur.com/QXiqbuC.gif)