20-09-2013 05:08
Creo que este es el hilo apropiado para contar mi "historia".
Soy de los que esperaba GTA V desde que se anunció a finales del 2011. El martes fue por fin el día, estuve en la fila apenas me dio tiempo y después de una hora salí de ahí con mi copia de Xbox 360.
Y lo mejor estaba por venir. A la consola simplemente le dieron ganas de empezar a fallar (es una Slim) primero con "interferencia" como cuando se zamarrea el cable por componentes. A los 40 minutos de juego, ya la pantalla se partió en una especie de tearing eterno en la parte de arriba, lo que me lleva a pensar que la consola está con fallas de GPU por sobrecalentamiento o algo por el estilo. Sin ir más lejos, la salida HDMI dejó de funcionar hace semanas porque le dio la gana.
Habiendo jugado unas tres horas (quedé en la misión de "Mark Zuckerberg") decidí optar por lo sano y deshacerme de mi copia, algo que sería bastante sencillo considerado que la otra gran cadena de tiendas especializadas de mi ciudad tuvo un problema con los envíos y por celebrarse dos feriados legales (miércoles y jueves por fiestas patrias), no hubo entregas y mucha gente quedó marcando ocupado hasta el próximo lunes. Dicho y hecho, por 55 dólares encontré un feliz y desesperado comprador, a su vez que con ese dinero me agencio el juego para PS3, pero eso será recién el sábado o lunes.
Todo lo anterior no tendría nada de extraño, excepto que después de eso mi 360 lleva dos días sin dar problema alguno, incluso funcionando por varias horas seguidas. Ahora, mientras todos hacen selfies (durante el tiempo que tuve el juego estuvo caído el Social Club) yo le doy una segunda repasada a The Ballad of Gay Tony en la Xbox. La misma que con GTA V parecía con cortocircuito.
Supongo que me tocará joderme jugando con el DualShock -que lo detesto, sobre todo a la hora de apuntar y disparar- pero eso antes que quedarme a medias con una consola que en cualquier momento tira la toalla. Si a mi 360 se le hubiera ocurrido fallar tres días antes... pero no, tenía que ser el 17 de septiembre.
Soy de los que esperaba GTA V desde que se anunció a finales del 2011. El martes fue por fin el día, estuve en la fila apenas me dio tiempo y después de una hora salí de ahí con mi copia de Xbox 360.
Y lo mejor estaba por venir. A la consola simplemente le dieron ganas de empezar a fallar (es una Slim) primero con "interferencia" como cuando se zamarrea el cable por componentes. A los 40 minutos de juego, ya la pantalla se partió en una especie de tearing eterno en la parte de arriba, lo que me lleva a pensar que la consola está con fallas de GPU por sobrecalentamiento o algo por el estilo. Sin ir más lejos, la salida HDMI dejó de funcionar hace semanas porque le dio la gana.
Habiendo jugado unas tres horas (quedé en la misión de "Mark Zuckerberg") decidí optar por lo sano y deshacerme de mi copia, algo que sería bastante sencillo considerado que la otra gran cadena de tiendas especializadas de mi ciudad tuvo un problema con los envíos y por celebrarse dos feriados legales (miércoles y jueves por fiestas patrias), no hubo entregas y mucha gente quedó marcando ocupado hasta el próximo lunes. Dicho y hecho, por 55 dólares encontré un feliz y desesperado comprador, a su vez que con ese dinero me agencio el juego para PS3, pero eso será recién el sábado o lunes.
Todo lo anterior no tendría nada de extraño, excepto que después de eso mi 360 lleva dos días sin dar problema alguno, incluso funcionando por varias horas seguidas. Ahora, mientras todos hacen selfies (durante el tiempo que tuve el juego estuvo caído el Social Club) yo le doy una segunda repasada a The Ballad of Gay Tony en la Xbox. La misma que con GTA V parecía con cortocircuito.
Supongo que me tocará joderme jugando con el DualShock -que lo detesto, sobre todo a la hora de apuntar y disparar- pero eso antes que quedarme a medias con una consola que en cualquier momento tira la toalla. Si a mi 360 se le hubiera ocurrido fallar tres días antes... pero no, tenía que ser el 17 de septiembre.
Quiero todo el tocino y los huevos que tengas.