19-01-2018 23:51
Yo pienso igual que Rivera: si un jugador quiere irse, se va a ir, salvo casos extremos, pero es lo que comenta, sobre todo en cuanto al tema rebeldía respecta. Llega un punto en el que tener un jugador amotinado causa demasiados problemas como para querer mantener la situación. Tampoco es que sea una práctica, de momento, muy extendida, pues casos del estilo se me vienen pocos a la cabeza, como el de Dembelé, pero luego tienes a gente como Coutinho que, pese a todo, pone su profesionalidad por encima de todo y sigue dando lo que se espera de él, quiera o no estar donde está.
En cualquier caso, sobre el tema Neymar, no me gustaría verle con la camiseta del Madrid pero es algo que, sinceramente, doy por hecho. Hasta en su momento se llegó a comentar que irse al PSG tan solo era un maniobra para poder recalar en el Madrid dos o tres temporadas después, como mucho. No tengo nada en contra de él, pero ha demostrado que, como el 99% de los jugadores, es un mercenario, por mucho que digan se haya ido para poder tener oportunidad alguna contra Messi o, como dijo él, porque el proyecto le atraía. Es igual que Dembelé o Coutinho: está muy bien que los hayamos fichado, pero creer que de haber tenido una oferta igual o mejor sobre la mesa del Madrid la habrían rechazado es de ser un iluso. A mí me entristece cada vez más el camino que el fútbol recorre, que se tire de talonario para fichar a la estrella de turno y a la gente de la casa, que verdaderamente siente los colores, se le de boleto.
En cualquier caso, sobre el tema Neymar, no me gustaría verle con la camiseta del Madrid pero es algo que, sinceramente, doy por hecho. Hasta en su momento se llegó a comentar que irse al PSG tan solo era un maniobra para poder recalar en el Madrid dos o tres temporadas después, como mucho. No tengo nada en contra de él, pero ha demostrado que, como el 99% de los jugadores, es un mercenario, por mucho que digan se haya ido para poder tener oportunidad alguna contra Messi o, como dijo él, porque el proyecto le atraía. Es igual que Dembelé o Coutinho: está muy bien que los hayamos fichado, pero creer que de haber tenido una oferta igual o mejor sobre la mesa del Madrid la habrían rechazado es de ser un iluso. A mí me entristece cada vez más el camino que el fútbol recorre, que se tire de talonario para fichar a la estrella de turno y a la gente de la casa, que verdaderamente siente los colores, se le de boleto.