He aquí mi resumen de la semana.
Empezada una partida de
Endless Legend con los Mykara.
Son la facción nueva de la última expansión, una especie de hombres-planta fúngicos, y vuelven a ser una facción extraña de narices. Los Mykara solo pueden construir la ciudad capital. No pueden construir colonos ni extenderse, así que van a estar jugando con una sola ciudad. Lo que SÍ pueden hacer, sin embargo, es lanzar esporas y crear brotes en lugares de interés fuera de su territorio. Pueden capturar y obtener bonificaciones de yacimientos de recursos que están fuera de su territorio, pueden tomar control de aldeas neutrales mediante sus cordyceps, y si capturan una ciudad enemiga pueden hacer más o menos lo mismo. Nunca controlarán más de una ciudad, pero si tienen una ciudad enemiga en estado de simbiosis recibirán recursos de ella.
Los brotes fúngicos también bloquean a los otros jugadores, los cuales tienen que deshacerse de ellos antes de poder interactuar con la casilla donde los metiste. Puedes meterlos en ruinas, por ejemplo, para evitar que otros jugadores las exploren de inmediato. Quitar los brotes lleva unos cuantos turnos.
Como contrapartida, además de lo de no poder construir más de una ciudad, los Mykara balancean el hecho de poder extraer recursos desde fuera de su territorio con el hecho de que los extraen más lentamente que el resto de facciones. Además, los brotes cada vez son más caros, y a medida que los vas creando los precios pueden dispararse.
Lo malo de este tipo de facciones a lo Venecia del
Civilization V, en el sentido de que solo pueden construir una ciudad, es que si empiezas en un territorio de mierda ya puedes dar la partida por perdida. Otras facciones pueden extenderse e intentar compensar un inicio lento, pero si solo puedes construir una ciudad vas a tragarte la mediocridad de tu territorio inicial durante toda la partida. Esto fue lo que me pasó de hecho con la primera partida que intenté jugar con ellos, la cual reinicié porque incluso aunque hubiese acabado ganando (lo cual es posible teniendo en cuenta el nivel del que hace alarde la CPU en este juego) hubiese sido pesado, lento, cansino y agónico. Además, he notado que
Endless Legend es un juego que da una ligera ventaja a los imperios horizontales (es decir, los que esparcen sus recursos en muchas ciudades en vez de concentrarlos todos en una de manera vertical).
A pesar de esto, el estilo de juego de estos bichos es muy interesante y curioso.
Seguí con
Wargroove.
Ya pasé la zona del desierto, y estoy en el nivel en el que introducen las unidades acuáticas, lo cual me pilló algo por sorpresa porque por alguna razón me había olvidado por completo de la probable existencia de barcos. XD
El juego va gustándome más por momentos. Sigo pensando que
Advance Wars era mejor y la verdad es que algunas de las decisiones de diseño que han tomado me parecen desafortunadas, pero he logrado dejar algo de lado algunas de las cosas que no me convencían al principio.
Pero bueno, a ver como sigue la cosa.
En algún momento de esta vida, acabaré con
Baldur's Gate 2: Throne of Bhaal.
Pero ese día no ha sido esta semana. En su lugar, me he cargado al penúltimo Bhaalspawn, Abazigal, el cual era un dragón, por supuesto.
El combate contra Abazigal no fue especialmente memorable salvo por el hecho de que el bicho pegaba fuerte y tenía unas defensas de la hostia, lo cual hizo que todo durase más de lo que a mí me hubiese gustado. Creo que su hijo Draconis era algo más difícil, pero también es cierto que aquél cayó más rápido.
Solo queda uno. Y ya sé donde está. Una vez lo haya encontrado, veremos si todo este suplicio acaba de una vez por todas.
Y, por supuesto,
FFXIV.
Este año, para la festividad del día de Pascua, te dan un mapa repleto de letras y tienes que descubrir, mediante unas pistas que te dan unos NPCs, donde han escondido dos huevos. El puzzle es bastante peliagudo en realidad. Tienes que trazar una línea en el mapa entre los puntos en los que están los NPCs en el orden correcto, y sacar una palabra por cada letra con la que te cruzas. No suena muy complicado, pero hasta que te das cuenta de donde está el truco puedes estar dándole vueltas al tarro durante horas como un idiota.
La recompensa es un traje bastante majo, aunque no se puede comparar con los huevos de Fabergé volantes del 2017.
Por otra parte, subí mi reputación al máximo con los Vath, una raza de hombres-bestia con aspecto de insecto. A ver cuanto tardo con los Ixali y el resto de tribus de las expansiones.
Y eso es todo. Tengo la impresión de que
Baldur's Gate 2 caerá por fin esta semana. Casi me cuesta recordar como era el mundo antes de que empezase a jugarlo.