27-10-2012 12:42
[html]<p style="text-align: justify;">Si te dicen que el juego que estás a punto de jugar ha costado 100 millones de dólares, seguramente te preguntes muchas cosas, empezando con la principal: ¿en qué coño se han gastado semejante pastizal? Pero eso no importa. No es tu dinero. Cuando estás a punto de jugar un juego que ha costado 100 millones de dólares, la única verdad es que las cifras no valen nada.</p>
<p style="text-align: justify;"><!--more</p>
<p style="text-align: justify;">┬áMax Payne 3 puede gustar y disgustar por muchas razones. Si eres fan de la saga, las relaciones con el pasado son anecdóticas. Max es un Henry Chinasky con pistolas, da igual que a su mujer y a su hija se la hayan cepillado unos yonquis de New Jersey. Es un puto borracho inmerso en una espiral autodestructiva al que le da lo mismo ocho que ochenta. Si eres fan de la saga y con eso te vale para relacionar lo anterior con el presente, genial. Sigue adelante. Pero si no eres fan, agradecerás que te arrojen a los leones sin más referencia que la que aparecen por tus ojos.</p>
<div style="text-align: center;"><iframe src="http://www.youtube.com/embed/PhdeWlGpwS0" frameborder="0" width="560" height="315"></iframe></div>
<p style="text-align: center;"><strong>Tears de Health. Track estrella de la BSO.</strong></p>
<p style="text-align: justify;">Edificios de lujo en hiriente contraste con la miseria de las favelas. Imbéciles hasta arriba de coca manoseando a señoritas de alto caché la hora. Deficientes neuronales sacudiendo el cuerpo en pleno trance etílico al son de alguna canción estúpida con sobredosis de autotune. Lo estás viendo. Te envuelve. Es el encefalograma plano del asco. Felicidades: estás dentro de Max.</p>
<p style="text-align: justify;">A partir de ese logro, de lo difícil que resulta empatizar con un fracasado cuya últimas ligaduras con la realidad perduran en la estantería de los vasos de whisky, lo demás viene solo. Es confuso; incluso puede aburrir. No siempre es fácil hacer interesante lo que no lo sería ni para el propio Max. Acodarte a la barra del bar y vigilar niñatos no es lo que se dice apasionante, según se aprecia. Tú no bajas la guardia; lógico, cada script es un aviso. Pero Max está hasta los huevos de todo.</p>
<p style="text-align: justify;">Y ahí vienen curvas.</p>
<p style="text-align: justify;">La espiral descendente a los infiernos puede ser algo brusca. Un día estás vestido de traje creyéndote un guardaespaldas y al otro te pones una camisa ridícula y empiezas a desvariar. Con el norte en el culo, fracaso tras fracaso, sólo te queda apostar lo último que te queda: la vida. Y no es que te importe demasiado. De eso a que Da Silva, una de las pocas personas honestas que verás, te implique en la investigación de uno de los mayores horrores que dormita agazapado a la vista de todos, apenas hay un sí.</p>
<p style="text-align: justify;"><a href="http://33bits.es/blog/wp-content/uploads/2012/10/da-silva.png"><img class="aligncenter wp-image-955" title="Da Silva" src="http://33bits.es/blog/wp-content/uploads/2012/10/da-silva-300x168.png" alt="" width="373" height="208" /></a></p>
<p style="text-align: justify;"><em>┬á┬á<strong>┬áÔÇØWhy? because youÔÇÖre not a dumb gringo? or because you are?</strong></em></p>
<p style="text-align: justify;">Con una primera parte lenta, ligeramente ÔÇ£rescatadaÔÇØ por el primer flashback, la singladura se vuelve embestida cuando se abre el plano y comienzan a desfilar fuerzas abrumadoras, que escapan de nuestra mundana comprensión de borracho idiota.</p>
<p style="text-align: justify;">Max Payne 3 es clasicismo disfrazado de experiencia. Te sorprenderá poco si no te satisfacen los patrones simples, pero su gunplay es de una calidad incuestionable, y posiblemente sea el mejor TSP de la actual generación. Max Payne 3 es simpleza abarrotada de complejidad añadida. Tampoco te sorprenderá por sus gráficos, pero al buen observador no pasará desapercibida la inconmensurable calidad de su diseño de niveles. Y no te sorprenderá; cierto, no son demasiado originales.</p>
<p style="text-align: justify;">Pero es lo más cercano que querrás estar de una favela.</p>
[/html]
<p style="text-align: justify;"><!--more</p>
<p style="text-align: justify;">┬áMax Payne 3 puede gustar y disgustar por muchas razones. Si eres fan de la saga, las relaciones con el pasado son anecdóticas. Max es un Henry Chinasky con pistolas, da igual que a su mujer y a su hija se la hayan cepillado unos yonquis de New Jersey. Es un puto borracho inmerso en una espiral autodestructiva al que le da lo mismo ocho que ochenta. Si eres fan de la saga y con eso te vale para relacionar lo anterior con el presente, genial. Sigue adelante. Pero si no eres fan, agradecerás que te arrojen a los leones sin más referencia que la que aparecen por tus ojos.</p>
<div style="text-align: center;"><iframe src="http://www.youtube.com/embed/PhdeWlGpwS0" frameborder="0" width="560" height="315"></iframe></div>
<p style="text-align: center;"><strong>Tears de Health. Track estrella de la BSO.</strong></p>
<p style="text-align: justify;">Edificios de lujo en hiriente contraste con la miseria de las favelas. Imbéciles hasta arriba de coca manoseando a señoritas de alto caché la hora. Deficientes neuronales sacudiendo el cuerpo en pleno trance etílico al son de alguna canción estúpida con sobredosis de autotune. Lo estás viendo. Te envuelve. Es el encefalograma plano del asco. Felicidades: estás dentro de Max.</p>
<p style="text-align: justify;">A partir de ese logro, de lo difícil que resulta empatizar con un fracasado cuya últimas ligaduras con la realidad perduran en la estantería de los vasos de whisky, lo demás viene solo. Es confuso; incluso puede aburrir. No siempre es fácil hacer interesante lo que no lo sería ni para el propio Max. Acodarte a la barra del bar y vigilar niñatos no es lo que se dice apasionante, según se aprecia. Tú no bajas la guardia; lógico, cada script es un aviso. Pero Max está hasta los huevos de todo.</p>
<p style="text-align: justify;">Y ahí vienen curvas.</p>
<p style="text-align: justify;">La espiral descendente a los infiernos puede ser algo brusca. Un día estás vestido de traje creyéndote un guardaespaldas y al otro te pones una camisa ridícula y empiezas a desvariar. Con el norte en el culo, fracaso tras fracaso, sólo te queda apostar lo último que te queda: la vida. Y no es que te importe demasiado. De eso a que Da Silva, una de las pocas personas honestas que verás, te implique en la investigación de uno de los mayores horrores que dormita agazapado a la vista de todos, apenas hay un sí.</p>
<p style="text-align: justify;"><a href="http://33bits.es/blog/wp-content/uploads/2012/10/da-silva.png"><img class="aligncenter wp-image-955" title="Da Silva" src="http://33bits.es/blog/wp-content/uploads/2012/10/da-silva-300x168.png" alt="" width="373" height="208" /></a></p>
<p style="text-align: justify;"><em>┬á┬á<strong>┬áÔÇØWhy? because youÔÇÖre not a dumb gringo? or because you are?</strong></em></p>
<p style="text-align: justify;">Con una primera parte lenta, ligeramente ÔÇ£rescatadaÔÇØ por el primer flashback, la singladura se vuelve embestida cuando se abre el plano y comienzan a desfilar fuerzas abrumadoras, que escapan de nuestra mundana comprensión de borracho idiota.</p>
<p style="text-align: justify;">Max Payne 3 es clasicismo disfrazado de experiencia. Te sorprenderá poco si no te satisfacen los patrones simples, pero su gunplay es de una calidad incuestionable, y posiblemente sea el mejor TSP de la actual generación. Max Payne 3 es simpleza abarrotada de complejidad añadida. Tampoco te sorprenderá por sus gráficos, pero al buen observador no pasará desapercibida la inconmensurable calidad de su diseño de niveles. Y no te sorprenderá; cierto, no son demasiado originales.</p>
<p style="text-align: justify;">Pero es lo más cercano que querrás estar de una favela.</p>
[/html]