Análisis Tales of Symphonia: Dawn of the New World
#1
Cita
[justify]En el mismo espacio conviven superpuestos dos mundos muy diferentes: Sylvarant y Tethe'alla, Ambos mundos tienen un elegido para buscar la salvación, una ardua tarea. La salvación de uno de los mundos conlleva la destrucción de otro, por lo que prácticamente se puede decir que ambos elegidos son rivales entre sí. Sylvarant es un mundo decadente y con un futuro completamente incierto debido a que su tiempo se agota más pronto que tarde, y su elegida es Colette Brunel, una chica de 15 años que vive en Iselia, un pueblo bastante humilde. Tethe┬┤alla, en cambio, es un mundo mucho más vigoroso que parece no tener tantos problemas como Sylvarant, de momento. Zelos Wilder es su elegido, un joven de 22 años y de familia bien posicionada, residente en Meltokio, una de las ciudades más avanzadas de todas las que pueden encontrarse sumando ambos mundos.

La tarea del elegido consiste en visitar los diversos sellos elementales, que hacen las veces de santuario, para despertar a los Espíritus Supremos. Esta tarea deja huellas permanentes en la vida del elegido, debido a que con cada Espíritu que despiertan van sufriendo poco a poco los efectos de la transformación en ángel, con un destino fatal... Es el precio de lograr la regeneración de su mundo. durante nuestra extensa aventura en Tales of Symphonia conocimos a otra serie de personajes, cada uno con su destino e inquietudes: Lloyd Irving, el acompañante de Colette durante su travesía y protagonista principal del juego, y otros no menos importantes como Sheena Fujibayashi, Presea Combatir, Regal Bryant, Genis y Raine Sage y el memorable Kratos Aurion, entre otros.[/justify]

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