Hablar de como el arte se inspira barra copia barra fusila obras anteriores es lo que hace que justamente el arte crezca. La originalidad es importante, pero el usar un punto de partida con éxito y trabajar a través de él es lo que hace avanzar las cosas. En el mundo del videojuego esto me parece bastante más acentuado si cabe, porque propuestas que añaden unos pocos detalles adicionales, pueden lograr un avance directo. Y a golpe de esos avances pasamos de manejar palitroques en PONG! a burradas como esta. En 1983, SEGA tuvo la idea de hacer una recreativa donde un tipo debe llegar hasta la parte superior para… ¿Tocar? ¿Besar? ¿Otras cosas? A un enorme gorila juguetón. Pero modificando la perspectiva, y añadiendo alguna coseja extra. Así es como tenemos este Congo Bongo que ahora se presenta en esta sección. O Tip Top, como también les sonará a los veteranos.

https://portal.33bits.net/congo-bongo-el...ega-en-3d/

@Rosstheboss

Pues a pesar de la "sutil inspiración" he de decir que tiene buena pinta. La versión de Atari 2600 me parece que es muy meritoria y tiene muy buena pinta para ser la máquina que es, con la lógica tijera de por medio. Y la de Coleco deja a las claras su superioridad aunque se quedase al final ahí anclada en ventas en comparación.

Para mi la más chocante es la versión de la SG-1000, una consola más potente que la Atari 2600, con el mismo procesador de la Master System/Mark III... y dejan el juego en 2D. Ahí sí que la primera fase parece lo que parece con esa decisión. Y la segunda fase de Atari 2600, en "modo-7 rupreste" también es bastante maja.

(14-09-2022 10:44)Rosstheboss escribió:Para mi la más chocante es la versión de la SG-1000, una consola más potente que la Atari 2600, con el mismo procesador de la Master System/Mark III... y dejan el juego en 2D. Ahí sí que la primera fase parece lo que parece con esa decisión. Y la segunda fase de Atari 2600, en "modo-7 rupreste" también es bastante maja.

Lo de la SG-1000... el juego sigue estando curioso pero pierde el gran aliciente y acaba siendo muy descafeinado al lado del Donkey Kong, la verdad.