Durante el pasado fin de semana, EA y Respawn pusieron en marcha una suerte de beta abierta para Titanfall 2. Esa prueba técnica del multijugador sirvió de ensayo para los nuevos servidores dedicados, claro, pero también para recoger opiniones del personal. Y no todas fueron positivas.

Los desarrolladores dicen haber tomado buena nota y ha anunciado ya unos pocos ajustes de cara al juego final.

La mayoría de quejas tenían que ver, claro, con cosillas que no se mantienen como en el primer Titanfall. El movimiento de los pilotos no es exactamente el mismo, la barrita que te permite llamar al Titán hay que llenarla con puntos por muertes y objetivos, los robots son menos resistentes que la última vez, los mapas son demasiado abiertos...

Para casi todo tienen respuesta desde Respawn, ya sea con aclaraciones o con pequeños cambios. Así, los pilotos volverán a correr más deprisa por las paredes y ganarán más velocidad si encadenan varios de esos wallruns. Será más fácil hacer eso en determinados mapas, cuentan, porque lo visto el otro día no es necesariamente representativo de lo que veremos en el juego final: «el diseño relativamente plano y abierto de Homestead», explican, busca crear zonas donde las armas de largo alcance sean más efectivas. Prometen enseñar pronto otros entornos más «tradicionales».

Un poco de todo hay también con los acompañantes mecánicos de cuatro metros. Para empezar, la caidita del Titán recordará un poco más a la original porque «una pequeña cantidad del indicador se llenará de forma pasiva cada pocos segundos». El sistema inicialmente propuesto para la secuela subía solo con puntos, ya digo, para fomentar la importancia de los distintos objetivos en cada modo de juego. Pero muchos lo vieron como una racha de bajas y quita, quita, que eso es del otro. El escudo y el blindaje de los robots se quedará de momento como estaba hace unos días, aunque sí recuerdan que en la beta no está todo el contenido: habrá clases de Titanes y modificaciones para los mismos más orientados a la defensa y la resistencia.

Son críticas con sentido, aunque también la contestación de Respawn me parece muy válida. Yo me lo pasé muy bien jugando a Titanfall 2 el otro día, debo decir. Algunas novedades que no han sido bien recibidas me parecen un acierto —creo que la del rodeo para robar pilas y dárselas a un compañero es una buena mecánica que muchos no han entendido todavía—, aunque sí es verdad que el diseño es un poco ganchocentrista; las habilidades especiales de otras clases no son tan útiles ni encajan igual de bien con el resto del conjunto.

Sin embargo, no hay noticias sobre los que también en mi opinión son los dos problemas más evidentes del juego: la incomprensible ausencia del modo Desgaste —el principal en la entrega original— y lo de que no te puedas equipar una pistolica además del arma anti-Titán.

Veremos cómo va la cosa con el segundo intento, que empieza mañana mismo. Algunos de estos cambios ya estarán implementados para entonces, pero otros se harán esperar hasta el 28 de octubre.

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