PlayStation 4 Pro, además de contar con una GPU completamente nueva y varias mejoras en otras partes del hardware, cuenta con un módulo extra de RAM y del cual ya os hemos hablado en el pasado. Sony ha incluido en este nuevo modelo un extra de 1GB de memoria del tipo DDR3, cuya función no es otro que conseguir liberar a la memoria principal (8GB del tipo GDDR5), del engorroso trabajo que resulta mantener aplicaciones abiertas en segundo plano. Por supuesto, esta liberación se traduce en que los desarrolladores pueden acceder a más memoria principal para usarla en los juegos; 512MB en total para ser exactos. Ahora bien, ¿qué supone esto para un juego? De ello ha hablado Rok Erjavec, director técnico de Crytek.

Según ha comentado el señor Erjavec: -"el sistema nos devuelve 512MB adicionales en comparación con PlayStation 4, lo cual es suficiente para ocupar el incremento de los requisitos de cosas como la resolución 4K, características de renderización de mayor calidad, etc. Partiendo de un aumento de aproximadamente un 10%, puede ser visto como algo relativo a la consola base, pero está ahí principalmente para permitir de forma clara mejoras específicas en PlayStation 4 Pro sin que los desarrolladores tengan que hacer malabares"-. Para Crytek, este extra de memoria sirve para apuntalar algunas características visuales en PlayStation 4 Pro. Puede que no sea mucho, pero los desarrolladores agradecen cualquier aumento en el acceso a la memoria base.

PlayStation 4 Pro está disponible para su adquisición desde el pasado 10 de noviembre y a un precio de 399 euros/dólares. Gracias a este sistema, los títulos creados contarán con mejoras en el apartado técnico y/o visual; los desarrolladores tienen total libertad para decidir qué hacer. De momento, muchos están apostando por aumentar la resolución en televisores 4K o la técnica del super-sampling en televisores 1080p. Otros, como Crystal Dynamics con 'Rise of the Tomb Raider', han ido un poco más lejos.

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