21-01-2016 15:03
Buenas
Comerciantes vascos en edad de jubilarse buscan jóvenes que quieran continuar con su negocio
"Unos 6.500 comercios vascos podrían verse abocados a cerrar si sus actuales dueños, que se encuentran próximos a la jubilación, no encuentran el relevo generacional que necesitan. Son comercios que en muchos casos llevan décadas en funcionamiento, que son rentables y que sólo necesitan quien quiera asumirlos: la eterno problema cuando los hijos o familiares no quieren seguir con el negocio familiar. Más noticias en la revista gratuita elEconomista País Vasco
"Estábamos pensando ya en retirarnos, pero nos daba mucha pena cerrar el negocio del que estamos orgullosos y que abrimos hace 24 años. Yo no tengo hijos, Patxo s├ì, pero tiene otra profesión, se dedica al mundo del estilismo y no está interesado en la tienda". Este es el panorama que tenía por delante Lourdes Magallón, una de las dueñas de la emblemática tienda de bacalao del Casco Viejo de Bilbao Pipil Saltsa, en que además del producto base se vendían platos cocinados por ellos con recetas clásicas.
Para evitar que situaciones como esta terminen cierres de negocios, con las dificultades que conlleva el arranque otro nuevo y que sobreviva, el Departamento de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno vasco creó el "Programa Berriz Enpresa" y encargó a las Cámaras de Comercio vascas que canalizasen su ejecución.
Programa de intermediación
Marian Arranz, de la Cámara de Bilbao, explica que este programa va mucho más allá de subvenciones para favorecer el traspaso empresarial, implica una intermediación de la Cámara entre los viejos comerciantes y los nuevos emprendedores; la tutorización del proyecto ayudando en la valoración económica de los negocios; agilizando de las licencias; dando formación empresarial para los nuevos dueños y asesorando en la elaboración de los planes de negocio y financiero.
El joven cocinero David Valverde soñaba con tener su propio negocio, su restaurante, pero no una tienda. Lourdes Magallón era una de las proveedoras de bacalao del restaurante en el que trabajaba David y fue ella la que le propuso que se pensara quedarse con la tienda. "Ella no quería que su negocio se perdiera, ni que lo cogiera cualquiera. Primero le dije que no, que yo era cocinero, pero al ver que la tienda también podía vender platos preparados lo repensé. El bacalao es un producto con muchas posibilidades en la cocina. Además con el programa Berriz Enpresa no tenía que hipotecarme para coger el negocio".
Dos meses David lleva ya la tienda, la ha redecorado; ha ampliado la carta de platos cocinados, creado la página web. Lourdes ha disfrutado presentándole a todos los clientes y proveedores como si fuera su propio hijo. David está muy ilusionado y en Navidades él sólo suministró 200 pedidos de platos cocinados. Reconoce, lleno de ilusión, que "venía a cocinar a las cuatro de la mañana y me iba a las diez de la noche. Pero es trabajar para mi. Me gusta mucho mi trabajo y cocinar".
Abdul Bijou lleva más de quince años en Bilbao, ciudad en la que reside con su familia y en la que trabajaba para otras fruterías, encargándose de la selección y compra de las frutas y verduras en el gran mercado de abastos de Mercabilbao. En este caso la propuesta que recibió fue para continuar con la Frutería Zaspi, un pequeño comercio del barrio de Santutxu de Bilbao. Abdul vio la oportunidad para trabajar para si mismo y lo que terminó de convencerle para dar el asalto fue la tutorización de la Cámara de Bilbao. "Me ayudaron con el plan de marketing y económico financiero, los trámites del traspaso, las cuestiones fiscales,..en todo." El también ha reorientado la frutería, quiere diferenciarse y competir "mediante la calidad". También "quería otro toque al diseño del local, algo más moderno y he metido productos de delicatessen y gourmet de gran calidad para diversificar"."
Fuente: http://www.eleconomista.es/pais_vasco/no...gocio.html
Un saludo
Comerciantes vascos en edad de jubilarse buscan jóvenes que quieran continuar con su negocio
"Unos 6.500 comercios vascos podrían verse abocados a cerrar si sus actuales dueños, que se encuentran próximos a la jubilación, no encuentran el relevo generacional que necesitan. Son comercios que en muchos casos llevan décadas en funcionamiento, que son rentables y que sólo necesitan quien quiera asumirlos: la eterno problema cuando los hijos o familiares no quieren seguir con el negocio familiar. Más noticias en la revista gratuita elEconomista País Vasco
"Estábamos pensando ya en retirarnos, pero nos daba mucha pena cerrar el negocio del que estamos orgullosos y que abrimos hace 24 años. Yo no tengo hijos, Patxo s├ì, pero tiene otra profesión, se dedica al mundo del estilismo y no está interesado en la tienda". Este es el panorama que tenía por delante Lourdes Magallón, una de las dueñas de la emblemática tienda de bacalao del Casco Viejo de Bilbao Pipil Saltsa, en que además del producto base se vendían platos cocinados por ellos con recetas clásicas.
Para evitar que situaciones como esta terminen cierres de negocios, con las dificultades que conlleva el arranque otro nuevo y que sobreviva, el Departamento de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno vasco creó el "Programa Berriz Enpresa" y encargó a las Cámaras de Comercio vascas que canalizasen su ejecución.
Programa de intermediación
Marian Arranz, de la Cámara de Bilbao, explica que este programa va mucho más allá de subvenciones para favorecer el traspaso empresarial, implica una intermediación de la Cámara entre los viejos comerciantes y los nuevos emprendedores; la tutorización del proyecto ayudando en la valoración económica de los negocios; agilizando de las licencias; dando formación empresarial para los nuevos dueños y asesorando en la elaboración de los planes de negocio y financiero.
El joven cocinero David Valverde soñaba con tener su propio negocio, su restaurante, pero no una tienda. Lourdes Magallón era una de las proveedoras de bacalao del restaurante en el que trabajaba David y fue ella la que le propuso que se pensara quedarse con la tienda. "Ella no quería que su negocio se perdiera, ni que lo cogiera cualquiera. Primero le dije que no, que yo era cocinero, pero al ver que la tienda también podía vender platos preparados lo repensé. El bacalao es un producto con muchas posibilidades en la cocina. Además con el programa Berriz Enpresa no tenía que hipotecarme para coger el negocio".
Dos meses David lleva ya la tienda, la ha redecorado; ha ampliado la carta de platos cocinados, creado la página web. Lourdes ha disfrutado presentándole a todos los clientes y proveedores como si fuera su propio hijo. David está muy ilusionado y en Navidades él sólo suministró 200 pedidos de platos cocinados. Reconoce, lleno de ilusión, que "venía a cocinar a las cuatro de la mañana y me iba a las diez de la noche. Pero es trabajar para mi. Me gusta mucho mi trabajo y cocinar".
Abdul Bijou lleva más de quince años en Bilbao, ciudad en la que reside con su familia y en la que trabajaba para otras fruterías, encargándose de la selección y compra de las frutas y verduras en el gran mercado de abastos de Mercabilbao. En este caso la propuesta que recibió fue para continuar con la Frutería Zaspi, un pequeño comercio del barrio de Santutxu de Bilbao. Abdul vio la oportunidad para trabajar para si mismo y lo que terminó de convencerle para dar el asalto fue la tutorización de la Cámara de Bilbao. "Me ayudaron con el plan de marketing y económico financiero, los trámites del traspaso, las cuestiones fiscales,..en todo." El también ha reorientado la frutería, quiere diferenciarse y competir "mediante la calidad". También "quería otro toque al diseño del local, algo más moderno y he metido productos de delicatessen y gourmet de gran calidad para diversificar"."
Fuente: http://www.eleconomista.es/pais_vasco/no...gocio.html
Un saludo