21-09-2018 00:11
Esta semana he estado en EEUU y me ha llamado mucho la atención la cultura de las propinas allí.
Antes que nada, mi opinión: las propinas están de más. Es decir, al camarero en cuestión se le paga por hacer su trabajo, y se le paga por hacerlo bien. Podemos entrar en temas como los sueldos que suelen cobrar, pero eso, a mi entender, es otra historia. La cuestión aquí al final es que a mí, por hacer bien mi trabajo, no se me paga un bonus(a veces sí, pero lo hace la propia empresa), se presupone que yo voy a ser suficientemente profesional como para dar todo lo que pueda en mi area, y se me paga correspondiente a eso por parte de la empresa con la que tengo un contrato.
Ahora bien, también entiendo que al final estas personas están cara al público y que no siempre se puede atender con una sonrisa, por lo que una propina puede servir como motivación. Además, el público en general muchas veces es idiota profundo.
En resumen, que no estoy de acuerdo con las propinas, pero las entiendo.
Ahora bien, lo que he visto en Norteamérica es otra cosa: Es prácticamente obligatorio dejar propina. Alguna vez ha sido opcional, pero las menos. En un puestecillo pakistaní en la calle me han medio obligado a colocar el dólar que me sobraba en el tarro de propinas. En otros sitios me han la han cobrado directamente, hasta el punto que ves que has pagado 47 dólares en una comida de 40 porque les ha dado por cobrarte en el propio recibo el 18% de propina.
¿Qué sentido tiene eso? Si la propina sirve como una especie de "motivación", qué motivación da cuando es obligada? El tipo que me obligó a meter la propina en el tarro, realmente, me pareció imbécil de remate, y a ese tío yo no le hubiera dado nada, sin embargo cobró de mí(alguien dirá que podría haberme negado, pero paso de que me escupan en la comida). ¿Qué motivación hay cuando te meten la propina directamente en el propio ticket de la comida? Si se cobra siempre, es como si no se cobrara nunca, más allá del propio hecho de que el cliente paga más.
Es algo que me ha chocado durante toda esta semana y, la verdad, me gustaría entenderlo.
Antes que nada, mi opinión: las propinas están de más. Es decir, al camarero en cuestión se le paga por hacer su trabajo, y se le paga por hacerlo bien. Podemos entrar en temas como los sueldos que suelen cobrar, pero eso, a mi entender, es otra historia. La cuestión aquí al final es que a mí, por hacer bien mi trabajo, no se me paga un bonus(a veces sí, pero lo hace la propia empresa), se presupone que yo voy a ser suficientemente profesional como para dar todo lo que pueda en mi area, y se me paga correspondiente a eso por parte de la empresa con la que tengo un contrato.
Ahora bien, también entiendo que al final estas personas están cara al público y que no siempre se puede atender con una sonrisa, por lo que una propina puede servir como motivación. Además, el público en general muchas veces es idiota profundo.
En resumen, que no estoy de acuerdo con las propinas, pero las entiendo.
Ahora bien, lo que he visto en Norteamérica es otra cosa: Es prácticamente obligatorio dejar propina. Alguna vez ha sido opcional, pero las menos. En un puestecillo pakistaní en la calle me han medio obligado a colocar el dólar que me sobraba en el tarro de propinas. En otros sitios me han la han cobrado directamente, hasta el punto que ves que has pagado 47 dólares en una comida de 40 porque les ha dado por cobrarte en el propio recibo el 18% de propina.
¿Qué sentido tiene eso? Si la propina sirve como una especie de "motivación", qué motivación da cuando es obligada? El tipo que me obligó a meter la propina en el tarro, realmente, me pareció imbécil de remate, y a ese tío yo no le hubiera dado nada, sin embargo cobró de mí(alguien dirá que podría haberme negado, pero paso de que me escupan en la comida). ¿Qué motivación hay cuando te meten la propina directamente en el propio ticket de la comida? Si se cobra siempre, es como si no se cobrara nunca, más allá del propio hecho de que el cliente paga más.
Es algo que me ha chocado durante toda esta semana y, la verdad, me gustaría entenderlo.