22-02-2018 00:27
(22-02-2018 00:12)Rosstheboss escribió:Desde la mismísima presentación de la idea inicial para su financiación, las críticas han sido tan absurdas como desproporcionadas. Su presentación y estreno a nivel nacional ha sido dantesco, las avalanchas de personas boicoteando los actos y presionando en diferentes eventos y festivales, ha sido troglodítico e hijoputesco como pocas cosas he visto. Y cuando se ha conseguido proyectar y montar mesas redondas o debates, las intromisiones, gritos y ruido hasta fuera de los recintos, han interrumpido y parado en algunos casos los eventos dentro de las salas.
Más vale que en ese documental salga el director comiendo niños, porque lo que se le ha hecho antes, durante y tras su estreno, es de simple y llana vergüenza que no sólo pase en nuestra nación, sino que encima, pueda tener proyección en el exterior, dado que este documental se ha presentado en diferentes eventos en varios países, cosechando buenas opiniones y críticas por cierto. Que se vea internacionalmente como se le ha tratado en su propio país es la enésima vergüenza nacional. Total, otra más.........
Yo entiendo algunas de esas críticas, otras no las comparto. El documental en sí mismo y todo lo que le rodea me parece absurdo -pero eso ya es una opinión personal-. Sus autores tienen todo el derecho del mundo a realizarlo, como en su derecho está la gente de protestar o criticarlo. No creo eso tenga nada que ver con los casos posteados en el mensaje inicial, en los cuales es la ley la que actúa para silenciar o censurar determinadas obras o personas. No hablamos de polémicas, o boicots, sino de casos en los que es el propio estado el que coarta o reprime la libertad de algunos de sus ciudadanos.