05-12-2016 19:09
Es muy difícil meterle mano y valorar ciertos apartados de este juego.
¿El mundo es maravilloso en detalles y ambientación? Sí.
¿Hay zonas elaboradas y algún que otro secreto? Sí.
¿Qué aporta el mundo a la historia potente que se espera de un FF y que además se publicita como algo espectacular? Nada.
El juego me parece una mentira, pero no una de esas mentiras de mierda sino una muy divertida. Me alegro de haberlo comprado, me lo he pasado bien y seguiré en el post-game, sin duda. El tema es que te das cuenta de que la historia es mala, su desarrollo jugable es un auténtico esperpento (pasillos, QTE, vídeos, control limitado, idas de olla sin explicación...) y lo que el juego sabe hacer MUY bien es meterte viajes y paseos entre cada uno de esos puntos, haciéndote pensar que estás en un gran viaje y que el juego es complejo y largo, cuando es justo lo contrario: la historia es un suspiro y el resto parece inabarcable pero es un copia y pega como los interiores esos blancos de ladrillo de Oblivión con los cofres rellenados con un script. Aquí no hay cofres, sino puntos brillantes a lo Xenoblade donde de cada 50 hallazgos, 49 son pociones o ingredientes de cocina.
Alguna mazmorra está "bien" si se compara con un pasillo recto, pero no dejan de ser muchos pasillos cruzados con alguna zona distinta pero vamos...
De personajes, guión y narrativa no puedo hablar porque parece que estoy solo por ahora, cuando lo vayáis acabando lo haremos, pero vamos, que FFXIII y su rollo Lu'Cie y Fal'Cie, Oerba, el Nido y tal me parecen mucho mejores que lo que he visto aquí. De esa historia tengo recuerdos, de esta me olvidaré pasado mañana. Mal asunto centrarse en el grupo principal y que todo lo que ves por el viaje quede en una absoluta anécdota al nivel de un NPC de una taberna cualquiera en un RPG cualquiera.
Pero insisto pese a los palos, el combate es una gozada, y eso hace que no te aburras y que cualquier misión de mierda y repetitiva se pueda convertir en un pequeño reto o de te momentos espectaculares. Luego, la ambientación ayuda a pasarlo genial por ahí, aunque el objetivo sea llegar al fin del mundo porque el cocinero random B quiere una zanahoria, en las chorrocientas misiones de ese corte que hay
PD: Volvería a comprar el juego el día 1. Lo que son las cosas, es que como digo, analizar en frío esto es un dolor.
(Ultima edición: 05-12-2016 19:12 por Rivera.)
¿El mundo es maravilloso en detalles y ambientación? Sí.
¿Hay zonas elaboradas y algún que otro secreto? Sí.
¿Qué aporta el mundo a la historia potente que se espera de un FF y que además se publicita como algo espectacular? Nada.
El juego me parece una mentira, pero no una de esas mentiras de mierda sino una muy divertida. Me alegro de haberlo comprado, me lo he pasado bien y seguiré en el post-game, sin duda. El tema es que te das cuenta de que la historia es mala, su desarrollo jugable es un auténtico esperpento (pasillos, QTE, vídeos, control limitado, idas de olla sin explicación...) y lo que el juego sabe hacer MUY bien es meterte viajes y paseos entre cada uno de esos puntos, haciéndote pensar que estás en un gran viaje y que el juego es complejo y largo, cuando es justo lo contrario: la historia es un suspiro y el resto parece inabarcable pero es un copia y pega como los interiores esos blancos de ladrillo de Oblivión con los cofres rellenados con un script. Aquí no hay cofres, sino puntos brillantes a lo Xenoblade donde de cada 50 hallazgos, 49 son pociones o ingredientes de cocina.
Alguna mazmorra está "bien" si se compara con un pasillo recto, pero no dejan de ser muchos pasillos cruzados con alguna zona distinta pero vamos...
De personajes, guión y narrativa no puedo hablar porque parece que estoy solo por ahora, cuando lo vayáis acabando lo haremos, pero vamos, que FFXIII y su rollo Lu'Cie y Fal'Cie, Oerba, el Nido y tal me parecen mucho mejores que lo que he visto aquí. De esa historia tengo recuerdos, de esta me olvidaré pasado mañana. Mal asunto centrarse en el grupo principal y que todo lo que ves por el viaje quede en una absoluta anécdota al nivel de un NPC de una taberna cualquiera en un RPG cualquiera.
Pero insisto pese a los palos, el combate es una gozada, y eso hace que no te aburras y que cualquier misión de mierda y repetitiva se pueda convertir en un pequeño reto o de te momentos espectaculares. Luego, la ambientación ayuda a pasarlo genial por ahí, aunque el objetivo sea llegar al fin del mundo porque el cocinero random B quiere una zanahoria, en las chorrocientas misiones de ese corte que hay
PD: Volvería a comprar el juego el día 1. Lo que son las cosas, es que como digo, analizar en frío esto es un dolor.