20-07-2015 12:26
Otra grata sorpresa en otro cómic del no esperaba mucho: un álbum que recopila números de una etapa de amazing spiderman "adolescente", y no solo por volver a los años de Peter en el insti sino por el mismo tono de la historia. Y eso es lo que me ha soprendido, que una serie de chavales plasmada en viñetas me haya parecido tan "guay" (¿Aun dicen "guay" los jóvenes?) y entretenida. Además han metido cosas curiosas en la juventud de Peter como Enma Frost metiendo los morros en su vida, y un nuevo personaje, Chaz, que viene a alegrar y enredar un poquillo la vida de spdey y su aun inmadura relación con Gwen Stacy.
Y como le comenté a Yonyx hace unos meses, me estoy poniendo al día con la asignatura pendiente de conocer algo más a Enki Bilal, y he terminado la ciudad que no existía y las falanges del orden negro. La primera, una historia sobre una ciudad, de un sueño y la gente tanto de baja como de alta cuna que habita en ella. La segunda, una persecución de una camarilla de viejos soldados cansados hacia otros soldados para arreglar una cuenta pendiente desde la misma guerra civil española. En ambos casos, el guión es de Pierre Christine, y ambas historias son bastante interesantes dentro lo que proponen, ambas también con un trato cercado de las personas en ellas implicadas, y ese dibujo detallista y de tono triste de Bilal es soberbio y se adapta a dos historias tan dispares.
Y como le comenté a Yonyx hace unos meses, me estoy poniendo al día con la asignatura pendiente de conocer algo más a Enki Bilal, y he terminado la ciudad que no existía y las falanges del orden negro. La primera, una historia sobre una ciudad, de un sueño y la gente tanto de baja como de alta cuna que habita en ella. La segunda, una persecución de una camarilla de viejos soldados cansados hacia otros soldados para arreglar una cuenta pendiente desde la misma guerra civil española. En ambos casos, el guión es de Pierre Christine, y ambas historias son bastante interesantes dentro lo que proponen, ambas también con un trato cercado de las personas en ellas implicadas, y ese dibujo detallista y de tono triste de Bilal es soberbio y se adapta a dos historias tan dispares.