10-01-2018 16:53
Un par de curiosidades majas:
Oscuridades Programadas: CRÓNICAS DESDE TURQUÍA, SIRIA E IRAQ :de la autora de 'una judía americana perdida en Israel', Sarah Glidden. Formato cómic-historia autobiográfica, como el anterior, y como el anterior, dotado de un toque de sensibilidad, calor y sabor humano. Y si, otra vez la autora va de viaje, esta vez de la mano de un medio digital de Seatle, durante dos meses en Turquía, Iraq y Siria. Sus compañeros buscando testimonios y consiguiendo historias, y Sarah retratando lo que ve, oye y siente en sus viñetas, y buscando ese grial sobre qué es el periodismo de verdad. Maravilloso.
John Rommer Marino: cómic de aventuras en la mar a la antigua usanza, con historias autoconclusivas en un ambiente exótico, el pacifico sur, con sus islas, sus tribus, su gente ruda del mar, sus peligros, el encanto de lugares y situaciones.........Todo encuadrado en un marco realista, sin ningún toque sobrenatural. Y, de hecho, tiene un ancla con la realidad curiosa, la amistad del protagonista nada menos que con Robert Louis Stevenson, que se fue a vivir a Samoa en sus últimos años de vida, y ahí se hizo amigo de John, quien le cuenta sus historias, o las protagonizan ambos. Otra pequeña maravilla.
(Ultima edición: 10-01-2018 16:55 por Rosstheboss.)
Oscuridades Programadas: CRÓNICAS DESDE TURQUÍA, SIRIA E IRAQ :de la autora de 'una judía americana perdida en Israel', Sarah Glidden. Formato cómic-historia autobiográfica, como el anterior, y como el anterior, dotado de un toque de sensibilidad, calor y sabor humano. Y si, otra vez la autora va de viaje, esta vez de la mano de un medio digital de Seatle, durante dos meses en Turquía, Iraq y Siria. Sus compañeros buscando testimonios y consiguiendo historias, y Sarah retratando lo que ve, oye y siente en sus viñetas, y buscando ese grial sobre qué es el periodismo de verdad. Maravilloso.
John Rommer Marino: cómic de aventuras en la mar a la antigua usanza, con historias autoconclusivas en un ambiente exótico, el pacifico sur, con sus islas, sus tribus, su gente ruda del mar, sus peligros, el encanto de lugares y situaciones.........Todo encuadrado en un marco realista, sin ningún toque sobrenatural. Y, de hecho, tiene un ancla con la realidad curiosa, la amistad del protagonista nada menos que con Robert Louis Stevenson, que se fue a vivir a Samoa en sus últimos años de vida, y ahí se hizo amigo de John, quien le cuenta sus historias, o las protagonizan ambos. Otra pequeña maravilla.