30-04-2017 02:32
Antes he hablado de lo poco sorprendentes que suelen ser muchas películas de gala de Oscars, y por suerte, ahí están directores como Martín Scorcesse para ofrecer algo que, al menos, sea más estimulante y especial. He visto Silencio, más de dos horas y media de película con tempo calmado, bella fotografía y escenas secas desprovistas hasta de música en muchos casos. Trata sobre las terribles consecuencias de la represión de la religión cristiana en el Japón del siglo XVII, con el otrora Spiderman de cura central. Fantástica, una pequeña joyita para la noche del sábado.