04-01-2016 21:43
Una derrota contra el Bar├ºa o Atleti para que convoque a los medios para ratificar su confianza y que empiece el ciclo. Mediáticamente, Zidane tiene el marrón de que a poco que haga dos partidos malos se lo van a comer con el "Zidane no servía", "es un novato" y similares en plan salvaje.
La figura que todos conocemos y admiramos de Zidane no existe en este terreno, el tema es que se podría llamar Ernesto García; nunca ha entrenado a un equipo ni en 2ª siquiera. Insisto que si no gana nada, yo ni se lo tendría en cuenta, pero ya te estás arriesgando a tener otro año entero -en parte por compromiso- sin tener ni idea de quién o qué es zidane como entrenador.
Es obvio que cuando las cosas van mal, entrenador fuera y a probar suerte, pasa en todos los equipos del mundo, la pregunta sería si realmente es mejor malo conocido o bueno por conocer, más aún cuando es evidente que Benítez poco ha podido hacer si valoramos las cosas que todos hemos visto. Él no tiene culpa de que el club no sepa quién está sancionado, ni de que tras un gol los jugadores se crucen de brazos, ni de los numerosos problemas extradeportivos o lo que hace uno por las noches. Ha sido muy barato matarle cuando ya desde el día 1 no parecía que gustase a nadie.
PD: Sobre lo que decís Jase y Dani, creo que ambos tenéis razón. Lo primero es la profesionalidad (Dani) y luego está la motivación (Jase). Lo que se os escapa es que ambas cosas no tienen que estar relacionadas entre si. La motivación del jugador es ver a uno del Bar├ºa meándole en su casa, lo que automáticamente tendría que hacer que al siguiente balón vayas a matarte a por él como si fuese el último de tu vida, o que todos te peguen palos, que tu rival pinche y tú lo aproveches dando un porrazo en la mesa. Esa es la motivación y no el llevarte de colegueo con el jefe. ESO no lo tiene que dar el entrenador, tiene que nacer de uno mismo pero es evidente que preferían tirar su orgullo al suelo con tal de terminar de cargarse al que siempre es el señalado tras la derrota. Me parece gravísimo como los jugadores son capaces incluso de dejarse humillar ante el Bar├ºa en casa para lograr su objetivo incluso dañando salvajemente al club en ese partido y, por ende, a todos, hasta al máximo mandatario.
(Ultima edición: 04-01-2016 21:46 por Rivera.)
La figura que todos conocemos y admiramos de Zidane no existe en este terreno, el tema es que se podría llamar Ernesto García; nunca ha entrenado a un equipo ni en 2ª siquiera. Insisto que si no gana nada, yo ni se lo tendría en cuenta, pero ya te estás arriesgando a tener otro año entero -en parte por compromiso- sin tener ni idea de quién o qué es zidane como entrenador.
Es obvio que cuando las cosas van mal, entrenador fuera y a probar suerte, pasa en todos los equipos del mundo, la pregunta sería si realmente es mejor malo conocido o bueno por conocer, más aún cuando es evidente que Benítez poco ha podido hacer si valoramos las cosas que todos hemos visto. Él no tiene culpa de que el club no sepa quién está sancionado, ni de que tras un gol los jugadores se crucen de brazos, ni de los numerosos problemas extradeportivos o lo que hace uno por las noches. Ha sido muy barato matarle cuando ya desde el día 1 no parecía que gustase a nadie.
PD: Sobre lo que decís Jase y Dani, creo que ambos tenéis razón. Lo primero es la profesionalidad (Dani) y luego está la motivación (Jase). Lo que se os escapa es que ambas cosas no tienen que estar relacionadas entre si. La motivación del jugador es ver a uno del Bar├ºa meándole en su casa, lo que automáticamente tendría que hacer que al siguiente balón vayas a matarte a por él como si fuese el último de tu vida, o que todos te peguen palos, que tu rival pinche y tú lo aproveches dando un porrazo en la mesa. Esa es la motivación y no el llevarte de colegueo con el jefe. ESO no lo tiene que dar el entrenador, tiene que nacer de uno mismo pero es evidente que preferían tirar su orgullo al suelo con tal de terminar de cargarse al que siempre es el señalado tras la derrota. Me parece gravísimo como los jugadores son capaces incluso de dejarse humillar ante el Bar├ºa en casa para lograr su objetivo incluso dañando salvajemente al club en ese partido y, por ende, a todos, hasta al máximo mandatario.