08-07-2012 16:09
(08-07-2012 16:00)Bart_10 link escribió:Entenderás que cuando tengo que pagarle el pan a una gente que me trata como a basura y que cree que su mierda es oro puro, entenderás que de ese hecho surge cierta crispación. En cuanto a lo de que no pierda el tiempo, estás hablando con alguien que se vió la película de Daddy Yankee.
Yo no siento que nadie me haya tratado como basura por muy bocachanclas que sea, principalmente porque no me afecta lo que pueda decir esa gente. Entiendo que el creador de Fez, por ejemplo, pueda parecer un auténtico capullo (y probablemente lo sea), pero eso no quita para que el documento sea interesante.
Dentro de la industria del videojuego, el cine o la música tenemos cientos de ejemplos de personas con egos subidos que realizan grandes creaciones, y en mi opinión hay que separar una cosa de la otra... si no fuese así, yo por lo menos, reduciría a la mitad mis productos de ocio. Que el cantante de Tool o Lars Von Trier menosprecien a su público me hace valorarlos negativamente como personas, pero si lo que hacen me parece bueno tengo que reconocerlo, tampoco creo que haya que renegar de la obra de Wagner porque fuese nazi. Yo no pago con la intención de dar de comer a nadie o porque me parezca buena o mala persona (amén de que muchas veces no podemos saberlo, igual Miyamoto se dedicaba a robarle el bolso a las viejas en sus tiempos mozos, vete a saber), si no que pago si lo que me ofrecen es un producto que considero bueno a buen precio. Que gracias a eso la persona, buena o mala, obtenga dinero me parece algo perfectamente lícito.
Por otro lado, si creo que en la película Blow tiene demasiado creída la etiqueta de incomprendido, pero por ejemplo la parte del Team Meat me parece mucho más sincera y normal. Al final son solo dos tíos que quieren que su juego salga adelante, nada más. Además, que alguien opine que los juegos más comerciales son basura (como ocurre en la película) me parece una opción totalmente válida, aunque no la comparta. No sé porque nosotros vamos a poder opinar de ciertos temas y ellos no.