09-03-2019 16:30
Terremoto. Continuación de la película noruega La ola (Bolgen), esta vez con un terremoto en Oslo. Me ha gustado menos que la anterior, aquí se han pasado un poco más con las flipadas, cuando la primera se llevó alabanzas precisamente por ser algo más terrenal que la producción media del género de catástrofes.
El reino. Me ha gustado, es un buen thriller, funciona muy bien plasmando cinematográficamente lo que por desgracia podemos ver cualquier día sobre corrupción política en el telediario, con todos los tejemanejes que hay debajo de al mesa y cómo se cierra filas para intentar salvar al partido primero y a ellos después, porque el partido es lo primero... o eso dicen, je. Y mola ese momento en el que un españolito de a pie se guarda en el bolsillo un mal cambio a su favor mientras él y un Antonio de la Torre con la mierda hasta las orejas se quedan mirando el uno al otro, y es lo que he dicho otras veces, cada uno llega hasta donde puede.
Malos tiempos en El Royale. Un producto muy tarantiniano en las formas, pero faltando el punch en el ritmo, en la calidad de los diálogos y en el dibujo de personajes que daría contar con Quentin en el proyecto. No es mala, pero tampoco memorable.
(Ultima edición: 09-03-2019 16:30 por Xiphias.)
El reino. Me ha gustado, es un buen thriller, funciona muy bien plasmando cinematográficamente lo que por desgracia podemos ver cualquier día sobre corrupción política en el telediario, con todos los tejemanejes que hay debajo de al mesa y cómo se cierra filas para intentar salvar al partido primero y a ellos después, porque el partido es lo primero... o eso dicen, je. Y mola ese momento en el que un españolito de a pie se guarda en el bolsillo un mal cambio a su favor mientras él y un Antonio de la Torre con la mierda hasta las orejas se quedan mirando el uno al otro, y es lo que he dicho otras veces, cada uno llega hasta donde puede.
Malos tiempos en El Royale. Un producto muy tarantiniano en las formas, pero faltando el punch en el ritmo, en la calidad de los diálogos y en el dibujo de personajes que daría contar con Quentin en el proyecto. No es mala, pero tampoco memorable.