21-12-2018 17:32
La memoria de la Guerra Fría, recuerda cómo había un miedo y runrún bajo la superficie, en el que el único país que jamás había tenido un golpe de estado en su historia, los EEUU, sufrieran un golpe
El golpe se perpetuaría (como se relata en la mítica película "Siete Días de Mayo") en contra de un presidente demócrata o de izquierdas, que llevara demasiado lejos una política de apaciguamiento a los soviéticos, cediendo países a su esfera de influencia, aceptando reducciones de armamento que dejaran a los EEUU en inferioridad, etc. Este golpe lo liderarían militares de extrema derecha, al estilo de Curtis Lemay (que sería candidato a la vicepresidencia con el segregacionista Wallace).
Pero ahora se da la situación de que el runrún para terminar destituyendo a un presidente que es un peligro para la seguridad nacional se hace contra un republicano. Un personaje que destaca ante todo por ser histrión, no republicano, pero un presidente republicano al fin y al cabo.
Otro republicano, infinitamente más competente que Trump (Nixon), también fue destituido unos años después de que llegara a acuerdos con los rusos, que fueron vistos por los sectores más halcones como una especie de traición. No obstante, Trump no es Nixon. Nixon, antes del Watergate, fue uno de los presidentes más populares de la historia y arrasó en la reelección de 1972.
(Ultima edición: 21-12-2018 17:41 por Agatocles.)
El golpe se perpetuaría (como se relata en la mítica película "Siete Días de Mayo") en contra de un presidente demócrata o de izquierdas, que llevara demasiado lejos una política de apaciguamiento a los soviéticos, cediendo países a su esfera de influencia, aceptando reducciones de armamento que dejaran a los EEUU en inferioridad, etc. Este golpe lo liderarían militares de extrema derecha, al estilo de Curtis Lemay (que sería candidato a la vicepresidencia con el segregacionista Wallace).
Pero ahora se da la situación de que el runrún para terminar destituyendo a un presidente que es un peligro para la seguridad nacional se hace contra un republicano. Un personaje que destaca ante todo por ser histrión, no republicano, pero un presidente republicano al fin y al cabo.
Otro republicano, infinitamente más competente que Trump (Nixon), también fue destituido unos años después de que llegara a acuerdos con los rusos, que fueron vistos por los sectores más halcones como una especie de traición. No obstante, Trump no es Nixon. Nixon, antes del Watergate, fue uno de los presidentes más populares de la historia y arrasó en la reelección de 1972.