21-11-2018 23:31
Este verano hablábamos del trauma que supuso el desarrollo de Quantum Break en Remedy y la tremenda erosión que propició su gestación que acabó, entre otras cosas, con el presidente de la compañía, Matias Myllyrinne, dejando el estudio en 2015, tras doce años como empleado y seis al frente de la empresa. Le sustituyó el antiguo CEO de RedLynx (los del Trials, ahora subsidiaria de Ubisoft), y ya en aquella época supimos que su siguiente destino profesional era convertirse en jefe de desarrollo de Wargaming, pero ahí le perdimos la pista.
Hoy sabemos (y su LinkedIn lo confirma) que el pasado mes de octubre abandonó la multinacional bielorrusa de los juegos de tanques y acaba de arrancar su propio proyecto: ha vuelto a Helsinki para fundar su estudio de desarrollo, Redhill Games, que planea centrarse en la creación de juegos free-to-play para PC, presumiblemente para poner en práctica lo aprendido en Wargaming.
La presidencia del estudio de momento recaerá sobre el propio Myllyrinne, pero la fundación es cosa de dos: él mismo y el checo Miloš Jeřábek, otro exmiembro de Remedy que ejerció de diseñador de niveles y director de producción precisamente de Quantum Break, y que también llevo a cabo tareas de diseño en Mafia II para 2K Czech. En la plantilla, que todavía está a medio completar, constan también otros exempleados tanto de Remedy como de Wargaming (además de Guerrilla y Starbreeze), así que parece claro que Myllyrinne ha estado pescando en sus antiguos trabajos.
Paralelamente parece que Matias Myllyrinne también ha inaugurado otra empresa, Masu Corporation, una consultora de inversión con sede en Chipre donde él mismo ejercerá de inversor inicial y asesor estratégico, presumiblemente para buscar fórmulas para financiar su propio estudio o atraer posibles inversores a sus proyectos.
Fuente
Hoy sabemos (y su LinkedIn lo confirma) que el pasado mes de octubre abandonó la multinacional bielorrusa de los juegos de tanques y acaba de arrancar su propio proyecto: ha vuelto a Helsinki para fundar su estudio de desarrollo, Redhill Games, que planea centrarse en la creación de juegos free-to-play para PC, presumiblemente para poner en práctica lo aprendido en Wargaming.
La presidencia del estudio de momento recaerá sobre el propio Myllyrinne, pero la fundación es cosa de dos: él mismo y el checo Miloš Jeřábek, otro exmiembro de Remedy que ejerció de diseñador de niveles y director de producción precisamente de Quantum Break, y que también llevo a cabo tareas de diseño en Mafia II para 2K Czech. En la plantilla, que todavía está a medio completar, constan también otros exempleados tanto de Remedy como de Wargaming (además de Guerrilla y Starbreeze), así que parece claro que Myllyrinne ha estado pescando en sus antiguos trabajos.
Paralelamente parece que Matias Myllyrinne también ha inaugurado otra empresa, Masu Corporation, una consultora de inversión con sede en Chipre donde él mismo ejercerá de inversor inicial y asesor estratégico, presumiblemente para buscar fórmulas para financiar su propio estudio o atraer posibles inversores a sus proyectos.
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