05-06-2014 14:55
(05-06-2014 14:45)seph1roth link escribió:De ahi mi comentario de medida "medieval" lo de la castración química...porque no se si puede ser la solución o un simple parche mal puesto. Lo que comentas de las armas es un buen ejemplo...
El problema es que hay muchos factores, uno puede ser un adicto al sexo (que en casos extremos es una enfermedad pura y dura) pero si mezclamos esto con el hecho de que si una persona con esta enfermedad no puede satisfacerse con otras recurre a la violencia y/o la violación, o si encima tiene el fetiche sexual al mismo tiempo de los menores peor me lo pones...
Como rehabilitamos a una persona que tiene una enfermedad mental de este calibre? de verdad se puede rehabilitar o es algo simplemente educativo? aquí hay muchos factores, puede que el comportamiento le venga por una serie de factores que han sucedido en su vida que han desencadenado en esto y otro por el simple hecho de que tiene una enfermedad mental irreversible.
No se si me explico...
Una puntualización, toda persona que tiene atracción hacia menores (y no hablo de chavalillas de 16 años con más teta que cabeza), tiene una desviación del comportamiento sexual, sea por los motivos que sean. Quiero decir, no hay gente "normal" que se sienta atraída por niños de 5 años, son conceptos incompatibles.
Por otra parte, el problema de alguien que tiene la pulsión de satisfacerse físicamente a través las relaciones sexuales con un menor y no puede evitarla, es precisamente que dicha pulsión o impulso no va a satisfacerse con material como películas o cómics, ni le va a bastar, ni le va a apaciguar, quizá todo lo contrario. Otra cosa sería hablar de esos pedófilos que sienten atracción hacia los menores y se pasan toda su vida sin matar a una mosca porque pueden controlar el avalanzarse sobre un chaval al igual que tú y yo no vamos por la calle lanzándonos encima de las tías.
Vuelvo al ejemplo de siempre, que haya todo tipo de porno al alcance de la mano y servicios de prostitución no hace que muchos violadores sigan delinquiendo. El problema tiene muchas fuentes, que van desde posible características genéticas muy específicas a factores educativos o contextos sociofamiliares chungos, pero también hay un factor de educación a nivel de sociedad que en algunos casos puede equilibrar la balanza hacia un lado u otro, en el sentido de que cuanto más concienciada está una sociedad, más se reducen los comportamientos deictivos. No es el único factor ni muchísimo menos, pero ayuda. Un ejemplo de ello es el bajo índice de criminalidad de algunos países.