24-02-2015 17:05
Si tenemos una pantalla funcionando a 60 Hz (refresca la imagen 60 veces por segundo) y hay que mostrar 60 fps, las cuentas salen claras y evidentes. La concordancia es total.
Si en esa misma pantalla de 60 Hz quedemos mostrar 30 fps, de nuevo es fácil porque basta repetir cada imagen en dos refrescos contiguos y ya.
Pongamos ahora 45 fps en esa misma pantalla de 60 Hz... Ahí las cuentas ya no salen exactas, de forma que habría repetición de algunos fotogramas y otros no, lo que facilita la aparición del llamado sttutering o microparones por problemas de sincronía entre framerate y refresco de la pantalla. Las tecnologías de G-sync y FreeSync buscan solucionar este problemas a la vez que otros.
Si en esa misma pantalla de 60 Hz quedemos mostrar 30 fps, de nuevo es fácil porque basta repetir cada imagen en dos refrescos contiguos y ya.
Pongamos ahora 45 fps en esa misma pantalla de 60 Hz... Ahí las cuentas ya no salen exactas, de forma que habría repetición de algunos fotogramas y otros no, lo que facilita la aparición del llamado sttutering o microparones por problemas de sincronía entre framerate y refresco de la pantalla. Las tecnologías de G-sync y FreeSync buscan solucionar este problemas a la vez que otros.