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(14-12-2012 15:55)Juntacadaveres link [ -> ]¿Soy el único que no entiende un carajo de lo que escribe aii?

Cita:Crónica del Chanchullo


Ost para acompañar:



Repaso de herramientas antes de dar el golpe:
-Xbox 360 FAT, del año catapún, comprada a raíz del hype Oblivioniano. Resucitada como el mostro de Frankenstein con 15 minutos de sobrecalentamiento toallil. Cómo chillaba la condenada.
-Disco duro de 20 gigas, separado, para intentar quedármelo de extranjis.
-Caja de la consola
-Mando de segunda mano que estaba algo cascado que me coló algún tipo, pero que cumplió conmigo y mis hermanos para pasar el Tales of Vesperia de cabo a rabo.
-Una revista de Carrefour con la oferta y un folleto con la ídem, mis pricipales armas para combatir el tiquismiqueo de no poder usar el ticket con otras consolas aparte de la 360.

Objetivos principales:
-Deshacerme de un ladrillo de (probablemente) 2007
-Conseguir PS3 Slim de 12 gigas por 120 pavos (sé que son pocos gigas, pero para Mgs4, Dark Souls y Valkyria Chroniles, pa' qué más)
Objetivos secundarios:
-Conseguir chollazo Xbox 250 gb + 4 juegos
-Quedarme con el disco duro de 20 gb, que sigo usando con otra xbox FAT que compré hace año y medio de segunda mano

Operación de dos miembros, un farsante y un conductor. Yo soy el primero. El coche queda en manos de mi madre un conductor veterano de los bajos fondos. Antes de llegar al Carrefour repasamos el plan al detalle:

-Tú dejame hablar a mí. Si el pájaro echa a volar antes de cazarlo, me inventaré una milonga: "Es para un amigo que está de Erasmus, no es mi consola". Si el trato sale como yo espero, necesito de todos tus reflejos para salir cuanto antes, sin distraernos con los adornos, los colores y los pasillos de ropa.
-¿Pero hijo, tú no tienes ya dos equisbós? :roll:
-¡Calla y conduce! >

Al llegar al oscuro y húmedo parking (la tarde acompaña con cielo encapotado, de un gris oscuro que no augura buena suerte, pero que proporciona un ambientazo que te cagas) dejo la caja en el coche, confiando en las experiencias de otros chanchulleros en Meri. La necesito para la segunda xbox antes mentada, y que actualmente disfruto. Camino por la rampa mecánica, sujentando ante mí la 360 en posición horizotal, procurando no inclinarla ni un grado de ángulo, pues creció en mí un temor similar al de un estudiante de laboratorio con sus experimetos: El más mínimo cambio en las circunstancias puede dar resultados indeseados, así que para asegurarme de que no aparezcan las temidas luces rojas, evito moverla de su posición tras su repentino despertar tras años de coma (lo sé, estoy chalao).

Entramos.



El primer obstáculo se presenta con la guardiana de los arcos láser antes de entrar a la zona de productos. Ya sabéis, esos empleados que con una suerte de guillotina cierran bolsas de plastico al vacío para bolsos y cacharros de fuera del establecimiento para evitar malentendidos de robos y demás. Doy el primer paso, para que cojan confianza.

-Hola buenas, vengo a lo del plan renove. Por eso vengo con los cacharros al aire... O
-Sí, sí, ya sé de qué va esto, tranquilo :-)
-Qué, ¿ya se ha apuntado gente al chollo este?
-Sí, han venido ya unos cuantos.

Bien. Deduzco de ello que no habrá muchos problemas con el papeleo y me quedo esperanzado con que ya tengan experiencia con el servicio. Cuanto antes acaben, mejor, así no me dará tiempo a venirme abajo. Nos dirigimos rápidamente. El conductor me acompaña en calidad de cómplice sueta-bolsa, pieza clave en mi meta de conseguir retene el disco duro viejo (pero funcional) conmigo. Será el último objeto en salir de la bolsa tras los cables y el mando y no saldrá a la vista si no es necesario...

Es hora del encuentro cara a cara con El Encargado.



Empiezo algo nervioso. Este local y yo tenemos una historia. Algo relacionado con un cuele de una Nintendo DS con demo de Metroid Prime Hunters y unos píxeles muertos que regresó para cambiarse por un mismo pack pero sin píxeles muertos... ejem. Lo primero es sacar la consola encima de unas cajas de teles de pantalla plana como pueda y los cables. El Encargado atiende a otros clientes con soltura al mismo tiempo, distraído, sin concederle mucha importancia al canchullero que se dispone a pasar a la acción. Empieza la operación con un traspiés de mi compañero. Mientras coloco con sumo cuidado la consola, él saca los cables, el mando... ¡y el disco duro!

- (en voz baja) Ssshhh, ¡qué haces! El disco duro no lo saques, ya te he repetido que nooo!
- Ay, yo no sé... :oops:

Uff, creo que El Encargado no se ha dado cuenta. Estaba con los otros clientes. Primeros tembleques. Las puntas de las orejas comienzan a picar.

A pesar de mis neuróticos cuidados, la guardiana de las bolas al vacío manoseó la consola propinando un par de golpes en las esquinas en la mesita de la entrada. El Encargado se comporta con igual desparpajo. Agarrando el ladrillo como quien mueve un palo de madera, colocándolo en el suelo, cerca de las estanterías de los televisores donde hay enchufes. Coloca la consola en posición vertical (¿horror?). La enchufa a la toma de corriente. Hasta aquí, según lo esperado tras leer al forero Parritron. Pero la cosa no acaba ahí. Recuerdo de mi anterior mensaje:


""""Enciende sin luces rojas pero al ratillo de estar con el menú salen rallas raras y una vez me ha salido un pantallaco verde. Como se líen a probar juegos..."""""


Repito, la cosa no acabó conectando esa central eléctrica que llaman cable de corriente. El Encargado se dispone a conectar el euroconector a una de las muchas teles expuestas. Ahora sí: ¡Horror!



(No sé para qué le echo tanto cuento escribiendo. El lector avispado, por lógica, ya sabe que el plan me ha salido más o menos bien. Si no, para qué estirarse con tanto texto)

Los pilares de mi plan se derrumban como un caseto de Angry Birds. El estómago se me encoje hasta quedarse del tamaño de un higo chumbo. Mejor no hablar de otras partes del cuerpo... ¿Probará juego? ¿La consola reventará con luces rojas o con fallos gráficos en pantalla? ¿Cuánto durará el momento incómodo? ¿Cómo se llama mi primo inventado para excusarme y ocultar la desfachatez de mi plan? De algún modo la suerte me sonríe. La consola responde bien. El Encargado abre la bandeja (con esto nunca he tenido problema). Intenta probar el mando. "No tiene pilas, eh...", "Ah..." El Encargado habla:

-Esto parece que va.

Desenchufa el euroconector (más bien los componentes). El riesgo de los fallos gráficos, se soluciona por sí solo. Pero no es momento de respirar aliviado. La consola sigue encendida... y seguirá encendida durante un buen rato, hasta que me sacan el ticket descuento. Ahí se quedó durante todo el proceso, el verde, acechando para parpadear de color rojo cual ojo de Sauron cuanto menos lo esperara. Una bomba de relojería que aun no me creo que no estallase.

En estas, yo hecho un manojo de nervios (¡menudo cerebro para Ocean's Eleven!), pregunto por la PS3, folleto en mano. Esta parte del plan, no salió bien. El Encargado contraatacó con un papel colgado en su stand, con una página de word con casillas que relaciona la consola usada con la nueva para canjear. Mi defensa del determinante indefinido "cualquier" en "cualquier consola" no sirvió de nada. Mi antiguo profesor de Lengua estaría decepcionado, imagino. Por eso y por timar. En fin. Será cosa reclamos anteriores y ya estarían preparados para luchar con la ambigüedad del folleto. Yo estaba echo un flan, así que apenas pensé en la legendaria Hoja de Reeeeclaaaamaaaaciooooneeeeeeee'. Quería salir escopetado con mi consola cuanto antes.

Todavía quedaba el mal rato hasta que todo estuviera cerrado. La cnsola seguía ahí en el suelo. Por ahora ninguna palabra sobre el disco duro. Eso, además del precio del descuento. Consola FAT, vieja, sin disco duro, sin cable ethernet, sin auriculares del Live... La situación discurre con mucha frialdad. Apena intercambiamos palabras. Se acerca el Encargado Dos. ¡Alarma! ¿Y si este es un gamer enteraillo y me descubre? Pero nada, sin problemas. Ese Encargado Dos parecía más centrado en aprender el proceso de encargado que de mí y mi consola. Un trepilla. En todos los curros encuentras alguno.

Hasta que no me dieron el ticket no supe que me estaba saliendo con la mía: 80 eurazos y disco duro viejo que vuelve para casa por Navidaaaaad.. Me pidieron DNIy nombre y apellidos POR CIERTO. Yo estaba rojo como un tomate, sin creerme que todo estuviera rodando tan bien, a pesar de la crisis del euroconector. Pero mi cerebro actuó por mí y me parece que algún numero y letra del DNI acabó equivocado... no me acuerdo, está todo borroso O Firmé unos cuántos papeles, algo de Anovo Iberia. Luego lo leo más tranquilamente y os respondo a alguna duda si hace falta.

Consigo mi consola, el pack xbox 360. Objetivos principales al 50%. Secundarios al 100%. ¡Pero no acaba ahí la película! Falta LA HUIDA



Vocecitas en mi cabeza. Mi conciencia me gritaba "¡Corre insensato!¡Chorizo!". Mi yo malvado "¡Que se dan cuenta de que falta el hdd!¡Huye como la corza herida!". Yo desandaba el camino a paso ligero, con e pack de la xbox entre mis brazos. ¿Recordáis los momentos de caos en el GTA:San Andreas, con los ciudadanos corriendo llevandose televisores de culo ancho? Pues yo igual. Miraba hacia atrás. Creo ver el flequillo del encargado, la camiseta azul tras de mí. Las orejas del lobo. Nervios, nervios. Me topo de nuevo con la señora Bolsa al Vacío, que me tiene que quitar el cacharro negro que precinta la caja de la consola. Vamos, vamos, que me pillan. Vuelta al pasillo de salida, vuelta a a rampa. Vamos conductor, corre, no te quedes atrás.

Llegamos al coche...



Me siento hasta mal. Esta noche no pegaré ojo. Pero al menos será acompañado de una reluciente xbox nueva, que me protegerá del coco.