33bits

Llevaba literalmente años sin ver el aspecto de los Avatars de Xbox, y me ha sorprendido en cambio de diseño que han ido sufriendo: ahora parecen menos Miis y más Bratz, y sus ojos resultan particularmente incómodos. Por lo visto este tipo de caras aún no se ha implementado y vendrá con una presumible oleada nueva de actualizaciones donde se incluirán cositas que hasta ahora no existían en Avatarlandia.┬á

Una buena noticia en este sentido es que Microsoft ha dado el brazo a torcer unos milímetros más en cuestiones de diversidad ylas sillas serán dentro de poco parte del catálogo de prendas y accesorios, para que gente como servidor de ustedes se parezca un poquito más al moñeco hecho a su imagen y semejanza.

Tenemos, eso sí, un profundo debate en la redacción sobre un asunto extremadamente importante relativo a este asunto de las sillas de ruedas para Avatars: las putas banderitas. ¿Se nos escapa algún tipo de diferencia cultural o directamente no eran capaces de hacer algo del todo bien? ¿Necesitaban cagarla aunque solo fuese un poquito o en Estados Unidos los discapacitados tienen por costumbre vestir sus sillas con banderitas como si fuesen un Rayo McQueen de juguete? ¡Ilustradnos! También podemos hablar del diseño de la silla, que parece de 1965 o robada del sótano de un geriátrico, pero con un poco de suerte igual podemos personalizar colores y estructura. ¡Se abre un nuevo camino a la creatividad! ¡Fantasía!

Por otro lado, se agradece el ánimo integrador que están desarrollando últimamente los fabricantes de consolas en cuestiones como la accesibilidad (la asignación personalizada de botones es una maravilla que ha solucionado muchos problemas) y de identificación. Queda un largo camino por recorrer en este tipo de asuntos, y aunque hayamos tardado más años de lo que deberíamos en arrancar, lo importante es que la cosa está en marcha.

Fuente

Joder qué feotes se han vuelto, sí.

Porque no hay nada tan importante en esta vida como recordarle a un tullido que es un tullido.