Cada uno de mayo subo al norte con amigos que militan en el sindicato ELA, llevo ya un montón de años compartiendo ese día con ellos en una jornada de manifestación y reivindicación completamente pacífica, donde la gente lleva a sus niños pequeños, cochecitos de bebé, ancianos...........sin nada parecido a un roce o amago violento.
Ese fatídico 14 N fue una sesión bastante multitudinaria a pie de calle desde la mañana, con familias enteras en la calle, hasta las diez de la noche, y buscando la calma justamente para no dar la munición que la policía y los medios necesitaban para reventar y deslegitimar toda la jornada. Salta la chispa por una bolsa de pintura que justamente le cae al jefe del operativo y comienza toda la puta vergüenza.
Porque si todo el argumentario es que los perroflautas van a montarla, que me enseñen imágenes grabadas por la policía o las cámaras que registran todos los ángulos del edificio del Gobierno de La Rioja sobre aparezca esa violencia perroflautica, que ni eso se ha presentado en el juicio, ni eso. Básicamente la palabra del otrora jefe del operativo policial (actual jefe de la policía local de Logroño) diciendo que "hubo mucha violencia" <me lo creo, me lo creo, un amigo mío tuvo que salir por patas con su mujer y su hija de quince años por las cargas policiales >, con una tonelada de vídeos de asistentes que mostraban de donde venía esa violencia.
Así que vamos a dejarnos de gilipolleces y a reconocer en algún momento que las fuerzas de seguridad del estado se han usado en numerosas ocasiones como perros de caza desde hace décadas. Que el que haya nacido y crecido en un entorno más seguro y acomodado, bien por él; los que lo hemos hecho en barrios más normales, a lo mejor hemos visto cosas y abusos que no llegan tanto a los medios <aunque ahí están también el tema de Roquetas de Mar o Cartagena >.
