Yo acabé comprando las cosas del día del libro una semana antes para evitar aglomeraciones. No por temas de COVID ni nada parecido, sino porque ya por naturaleza odio las multitudes. Me convierten en un trasgo huraño y malhumorado.

Al final me acabé gastando más pasta de la que debería, y de hecho el libro que estoy leyendo ahora mismo fue uno de los que compré. No es muy largo así que creo que la semana que viene ya podré ir diciendo lo que opino.

Y a mi tampoco me gusta la poesía. No es solo que no la entienda sino que es que tampoco he sentido nunca interés por ella para empezar. Es un tipo de arte sobre el cual no tengo ningún reparo en admitir mi total y absoluta apatía.
Y, como no podía ser de otra forma, uno de los tres libros que compré la semana pasada es técnicamente de poesía.

Soy nuna persona compleja y profunda. 

Jajaja a ver, tengo mis excepciones... escucho recitar la Canción del Pirata de Espronceda y me emociono jajaja

Al final no pude comprar nada porque están haciendo obra en mi casa y no ha habido forma de ir en horario de apertura... ya veré qué hago.

(24-04-2021 11:41)JuanmaNPI escribió:Uy ya lo siento pero "not my cup of tea"... no me entra, no la entiendo... es como el arte abstracto, será arte pero no perdería tiempo ni dinero en ello.

A mi la poesia tampoco es que me apasione demasiado. Pero hay algun que otro autor que me gusta o pienso que al menos tener algunas de sus obras importantes. En mi caso Becker es fijo. Machado tambien me gusta. Lorca, al menos diria que "Poeta en Nueva York" habria que tener. Y podriamos irnos a los del siglo de oro que tambien hay buenos, pero con tener algo de los que ya he mencionado me basta.

Bueno, leido Frankenstein, de Mary Shelley. Edición anotada de Leslie S. Klinger. 



Si alguien me pregunta acerca de un clásico al que entré con muchas ganas pero del que salí bastante decepcionado, suelo mencionar Drácula. Se me hizo un libro aburrido, lento y tedioso. Sin embargo, también suelo añadir a continuación que su estatus antiguo no tiene tanto que ver con mi opinión, y acto seguido menciono que Frankenstein, en cambio, sí que me gustó bastante.
No, no es la primera vez que leo Frankenstein. La primera fue en el instituto para clase de Inglés, una edición adaptada y resumida para jóvenes. El libro ya me gustó entonces, pero lo perdí y no sé donde anda, así que buscando alguna edición con la que sustituirlo hice lo más sensato y me pillé la más innecesariamente cara y aparatosa que encontré. No soy alguien que suela releer libros (principalmente porque ya tengo un backlog de la hostia), pero al ser una edición anotada y al haber tenido buenas experiencias con las anotaciones que hicieron que lograse entender un 15% del Ulises de Joyce, decidí hacer una excepción y volver a leer el cuento sobre la criatura. ¿Me sigue gustando tanto como recordaba?
Bueno... Obviamente el libro pierde algo de gracia al ya saber todo lo que va a pasar. Para los que no lo hayan leido, un hombre se obsesiona con un proyecto de ciencia que consiste en dar vida a un ser creado a base de partes de cadáveres, pero cuando lo consigue le regresa la lucidez y huye horrorizado, dejando a la criatura sola y desamparada por el mundo. Siendo rechazada y apaleada por la sociedad, el alma de la criatura va oscureciéndose cada vez más hasta que decide empezar a asesinar a los seres queridos de su creador, para vengarse de la persona que lo trajo al mundo.
Existe una tendencia a creer que Frankenstein es un aviso acerca de las obsesiones y la capacidad que la ciencia sin control ni moral puede tener sobre el mundo. Estoy en desacuerdo con esto. El error de Victor Frankenstein no fue tanto crear la criatura, sino no responsabilizarse de sus actos. La criatura nace con el corazón puro, pero al ser abandonada por su creador y abandonada en un mundo que la rechaza acaba volviéndose malvada. El típico caso de alguien que acaba volviéndose en el monstruo que todo el mundo cree que es. Hablando de la criatura, suele ser representada en los medios como un idiota babeante y rígido debido a la famosa y brillante interpretación de Boris Karloff, pero tampoco hay que olvidar que dicha película tampoco seguía mucho la historia original. La versión original de la criatura es completamente distinta, y no es solo perfectamente elocuente (una vez aprende a hablar) y demuestra gran inteligencia y capacidad adaptativa, sino que en muchas escenas se la describe como más ágil y rápida que cualquier hombre normal, capaz de moverse entre rocas y glaciares a vertiginosa rapidez con sus zancadas. Oh, y tiene el pelo largo.
Como siempre, las anotaciones acaban otorgando al libro de una profundidad añadida que sirve para hacer que leerlo de nuevo se sienta algo más fresco de lo que debería, aunque también es verdad que ciertos capítulos se hacen algo pesados al leerlos con ellas. En concreto, el primer capítulo de la historia en si (para quienes no lo sepan, el libro empieza con unas cartas de un capitán de barco antes de que Frankenstein empiece a contar su historia) es particularmente duro, puesto que trata sobre la infancia del protagonista, su educación y los libros que le gustaba leer... Y PODÉIS APOSTAR VUESTRO TRASERO A QUE LA VERSIÓN ANOTADA VA A DEDICAR PARRAFADAS A TODOS Y CADA UNO DE LOS AUTORES Y OBRAS QUE APARECEN NOMBRADAS. Esto amplia el volumen del capítulo hasta casi triplicar su contenido real. Otro capítulo algo lento es uno de los primeros al iniciarse la tercera parte, en la que Victor y su amigo Clerval hacen un viaje por Inglaterra, y pasan por multitud de ciudades y lugares de interés que en el relato solo son mencionados de pasada, pero que las anotaciones no dejan pasar por alto cuando se trata de explicar su localización e historia. Por lo demás, sin embargo, Frankenstein en realidad no es un libro nada largo si solo vas a leer la narración, pero si lees las anotaciones te das cuenta de muchas cosas interesantes sobre el relato. Estoy bastante contento con él... Aunque muchas de las anotaciones consistan en indicar los cambios que el relato sufrió cuando Mary Shelley lo reescribió años más tarde, y sean cosas como "La palabra 'necesidad' es sustituida por 'obligación' en la versión posterior".
De hecho, debo admitir que me estoy empezando a aficionar al tema de las ediciones anotadas. Compré otra hace un par de días, aunque aún no voy a leerla.

No, el siguiente libro es otro de Mundodisco. Voy a ir alternándolos para no quemar mucho la saga. El último fue Rechicero, así que quienes sepan el orden ya sabrán cual es el que me toca ahora. Intentaré ponerme a leerlo a partir de las 12 de la noche, tal como indican las supersticiones.

Creo que ya comenté por este foro que me regalaron las ediciones anotadas de 2 tomazos de Lovecraft. La verdad es que el libro en sí merece la pena tenerlo como objeto de colección, aunque las anotaciones las hubiese preferido de otra forma... creo que le quitan demasiado espacio a la narración quedando en un formado columna gruesa que no me termina de convencer.

(01-05-2021 00:16)JuanmaNPI escribió:Creo que ya comenté por este foro que me regalaron las ediciones anotadas de 2 tomazos de Lovecraft. La verdad es que el libro en sí merece la pena tenerlo como objeto de colección, aunque las anotaciones las hubiese preferido de otra forma... creo que le quitan demasiado espacio a la narración quedando en un formado columna gruesa que no me termina de convencer.

De hecho, creo que las ediciones anotadas de Lovecraft son también del mismo tío. Y al ser de la misma editorial seguramente será el mismo formato.
Yo las estaba buscando, pero lo he dejado un poco de lado porque dentro de poco tengo pensado retomar una saga de la que solo leí el primer libro hace años, y creo que me va a tomar algo de tiempo leerlas. Además, teniendo ya las de Valdemar (y, de hecho, sin haber leído aún el segundo volumen) tampoco les doy especial prioridad.

Yo he terminado "El Demonio de Arbennios" regalado en Sant Jordi.

No es un súper ventas, pero entretiene.

Yo ahora estoy con el La Guerra de Calibán, que comencé justo después de terminar El despertar del Leviatán. La verdad es que, como me pasa un poco con The Expanse, el principio del libro se me hizo un poco bola, pero la segunda mitad la devoré, y con éste voy igual. 

Algún día tendré que ponerme definitivamente con la serie, porque he estado 4 o 5 veces comenzándola y no paso del capítulo 5 nunca.

Terminado "El Demonio de Arbennios", he vuelto a mi lectura de "La niña perdida" de Ramón Somoza.

Son mini lecturas que cuestan no más de 1€ y que si te van las historias de ciencia ficción, entra como el agua fría en un día de calor.

Me he pasado por la librería como cada 2-3 meses, que aunque sea poca ayuda no quiero que cierren.

@Rafa El de Lupin me lo compré yo también hará una semana. XD


En fin, leido Brujerías, de Terry Pratchett. El libro #6 del Mundodisco.



Tras el asesinato del rey de Lancre, uno de los guardias todavía fiel a su antiguo señor escapa con el bebé del príncipe y logra entregarlo a un grupo de tres brujas que viven en las montañas. Lord Felmet, el regente usurpador, se entera del hecho y se obsesiona con las brujas pensando que están tramando en su contra. Esto, combinado con la tierra del lugar, que parece rechazar por principios la presencia del nuevo regente, fuerza a las brujas a romper su política de no intervenir en los asuntos del reino.
En mi humilde opinión, es aquí, en el libro 6, donde Mundodisco finalmente logra arrancar. El libro 4, Mort, estaba bien, pero siempre he sentido que, salvo un par de escenas, nunca llegaba a los puntos de brillantez a los que libros posteriores de la saga llegan, y realmente el hecho de que es un buen libro rodeado de lo que hasta ese momento eran otros libros algo flojos (cosa que hasta Pratchett mismo admitió, y siendo el propio autor dijo que era mejor empezar por el libro 5) hace que parezca mejor de lo que es. No opino lo mismo de Brujerías. Creo que este es el punto en el que Pratchett finalmente encontró su mojo.
El libro sigue a las tres integrantes del aquelarre local: Yaya Ceravieja, una bruja orgullosa y obsesionada por las formas; Tata Ogg, simpática, juerguista, y bastante "aventurera" en su juventud, hasta el punto en el que la mitad del reino son hijos o parientes suyos; y Magrat, una chica joven y poco agraciada con unas ideas sobre brujería algo "hippies", a quien Yaya considera como "demasiado modernilla". No es el primer encuentro que el lector tiene con Yaya Ceravieja, ya aparecía en Ritos Iguales, el libro #3. Ella es, sin duda alguna, uno de los mejores personajes que ha parido la saga. Su estirada y orgullosa actitud y su manía por juzgar y desaprobar las formas de los demás por nimiedades, combinadas con esos momentos de ignorancia debido a su estancamiento en el pasado que su orgullo le impide reconocer, la convierten en un personaje con muchas escenas extremadamente entretenidas. Es imposible no quererla, y su contraposición con la despreocupada Tata y la inexperta aunque ilusionada Magrat funciona de maravilla.
El libro viene con cierto truco, sin embargo, y es que todo él es una enorme referencia a Hamlet. Contiene muchos guiños a escenas y frases que si no estás familiarizado con la obra de Shakespeare se te van a pasar por alto, pero a su favor diré que a pesar de ello sigue siendo perfectamente disfrutable. A diferencia de otros libros pasados, también me dio la sensación de que el ritmo y las bromas estaban mejor hiladas. En libros anteriores a veces notaba que la situación de pronto se paraba en seco para que el narrador o los personajes soltasen una broma, en ocasiones llegando incluso a cambiar de escena un momento para presentarte otra que no tenía otra función que resultar graciosa. En este libro no tuve esa sensación. Todo se siente mucho más orgánico y natural. Ninguna escena me pareció de que solo existiese para soltar una broma y regresar a lo que realmente importa. Las bromas y gracias están ahí, pero me parecieron mucho mejor integradas en la trama. Además, este es uno de esos libros que lograron hacerme reir, literalmente. No me malinterpretéis, ¿Sonreir? ¿Resultarme divertidos? ¿Soltar algo de aire por la nariz? Muchos libros lo hacen. ¿Pero directamente hacerme soltar una carcajada? Eso ya es mucho más raro. Brujerías logró hacerlo dos veces, si no me equivoco.
La verdad es que creo que este sería el primer libro de la saga que me atrevería a recomendar incluso a alguien que no sienta especial afinidad por la fantasía.


Ahora voy a ponerme a leer la segunda parte de una saga de la cual leí el primer libro hace años, pero que hasta ahora nunca me sentí inclinado a continuar. Y, si digo la verdad, tampoco sé muy bien por que me ha dado por ahí ahora, pero hey, mis hábitos de lectura funcionan de forma misteriosa e impredecible.
Ahí van un par de pistas:

Spoiler :

Más obvio imposible.

¿Wormsand? Me moló también esa saga, aunque me quedé en el libro catorce, y ahora me da palo ponerme con los ocho que quedan. Pero hay que reconocer que pocas seres literarias sobre el mundo del cricket hay mejores.

Sobre Brujerías, joder con los años y la memoria, no sé sí me falta este o "Brujas de Viaje". Creo que este, porque juraría que el otro ya se une con "Lores y Damas". Y oye, un buen motivo para volver a la biblio, que estos libros se leen solos y muy rápido.