El Rey sin Nombre es un jefe diseñado para destrozar al jugador que ha llegado hasta ahí a base de rodar al tuntun. Ahora, si quieres sobrevivir, vas a rodar cuando yo diga y como yo diga.

-Ornstein y Smough: Sí, se trata de un jefe de dos fases, y además, múltiple. Este momento es considerado el punto de inflexión en la madurez del jugador con respecto a la jugabilidad y las mecánicas del juego. Hay dos jefes simultáneamente que por separado no serían un gran desafío, pero juntos exprimen las habilidades del jugador para controlar el entorno y ambos enemigos. Además, una vez vence a uno de los dos, se añade una fase, con una nueva vida del jefe y, siendo objetivos, Ornstein chetado puede ser un quebradero de cabeza. Bien, este primer pico de dificultad es un jefe de dos fases.

-Artorias: es un combate contra un solo enemigo, muy agresivo, con golpes demoledores y además tiene la posibilidad de doparse el daño y la agresividad, si el jugador lo permite. Pero es un combate justo: los movimientos son evidentes, hay pocos golpes injustos (a mí lo de la voltereta triple-cuádruple cuando el jugador está en el suelo me parece un poco puta mierda, no puede hacer nada) y consta solo de una fase. ¿Es difícil? Sí, de cojones. Pero solo hay un jefe, una barra de vida, una fase. Fin.

-Manus: podría añadir a Kalameet también, pero no creo que sea más difícil que Manus y es un jefe muy subjetivo en relación con la dificultad, a diferencia de Manus. Manus es, a todas luces y sin discusión, el jefe más agresivo del juego y, por si fuera poco, el que tiene más vida. Es un jefe con una velocidad en los golpes y son un rango muy poderosos. Además cuenta con un combo que como te enganche la primera hostia te las comes todas, un golpe que podría considerarse algo injusto, pero es evidente cuándo lo va a hacer y la ventana de reacción es amplia. Es un jefe con dos fases, la segunda se activa en torno a los 2/4 de vida y empieza a tirar magias oscuras, que hacen un daño bestial. Para eso, el jugador ha tenido que encontrar el Amuleto de plata, equiparlo y usarlo en el momento adecuado. Se premia la exploración del jugador y que lea los putos objetos. Y además, después de tirar las magias Manus da tiempo a recuperarse, equipar el estus y volver al combate. Es un jefe justo, con dos fases, pero con una sola vida.

Aquí seguramente va a haber fiesta porque me sorprende que varios de vosotros consideréis los jefes del DLC los más jodidos no ya del juego, sino de la saga. Veamos:

Me cuesta pensar en picos de dificultad en el juego base porque son jefes cuya dificultad es muy subjetiva. A mí por ejemplo me costaron un cojón el Demonio de Fundición, Veldstat o Nashandra. Ahora mismo los fundo sin problemas, pero en su momento las pasé putas. Sin embargo, en DS2 abundan los jefes múltiples: Centinela de Ruinas, Amada Freja del Duque, Gárgolas del Campanario, Jinetes de Dragón Gemelos, Vigilante y Defensor del Trono... Pero, objetivamente, los jefes más difíciles son opcionales:

-Morador de la Oscuridad: acabar con este tremendo hijo de puta sin piromancias y a melee es un infierno. Tiene una enorme variedad de ataques y las piromancias y las magias oscuras hacen muchísimo daño. Por si fuera poco, su segunda fase es una mitosis de sí mismo y hay que pelear con dos, simultáneamente. Se puede hacer, pero es extremadamente difícil por ser un jefe muy poderoso que se multiplica. Sin embargo, es un jefe, con una vida y dos fases.

-Dragón Anciano: es un jefe muy sencillo, pero a la vez difícil, o al menos a mí me lo parece, y es que el fuego mata de un golpe en la primera partida salvo que el jugador tenga vida para dar y regalar. Es un combate realmente sencillo en términos de mecánicas: pegar y correr, pero no hay margen para el error. Un jefe, una fase, una vida.

Vayamos con los DLC :

Curiosamente, creo que el DLC con los jefes más difíciles es el primero, Corona del Rey Hundido.

-Elana, Reina Escuálida: sudé sangre, sudor y lágrimas para derrotarla en una run que hice sin escudo y a solo rodar en NG++. Es un jefe que pega muy duro, tira magias oscuras y, por si fuera poco, invoca a un puto Veldstat. Es muy complicado hacer frente a todo y encima lidiar con los teletransporter a la espalda. Es un jefe que tira de muchas prácticas sucias: múltiples enemigos, transporte a puntos ciegos. Pero no es imposible. Nuevamente, un jefe, una vida y, que yo recuerde, una fase.

-Sihn, el Dragón Durmiente: creo que este jefe define el nefasto sistema de combate y colisiones de DS2 en relación con los otros juegos de FS. El bicho hace un daño brutal con todos los ataques, pero es cuestión, como siempre, de acostumbrarse al patrón y rezar para no intoxicarte con el sida que cae del cielo. No es extraordinariamente difícil, pero toca los huevos que las armas se te hagan mierda porque la piel del dragón es de, no sé, ácido. Un jefe, una fase, una vida.

-Los tres mosqueteros: Seguramente soy el único gilipollas que ha matado a estos subnormales porque sí. ¿Una losa de titanita por tal sufrimiento? Hasta luego. Esto es dificultad artificial: un infierno de camino, tres jefes, tres vidas, una fase, eso sí. Pero es repugnante y no me vale eso de "ejk está pensado para hacerlo en coop". Pues te metes el coop por el culo y lo dejas opcional, aumentándole la vida y el daño al jefe o yo que sé. Pero no me obligues a jugar acompañado con un diseño de nivel o jefe que fuerce a ello.

De la Corona del Rey de Hierro creo que solo hay un jefe difícil de verdad. El Demonio de Fundición Hacendado y Sir Alonne no creo que entrañen más dificultad que otros.

-Caballero de Humo: Seguramente el jefe más difícil del juego. A mi juicio, es el Artorias de DS2. Es un jefe exigente, muy agresivo, pero es eso, el jef ey ya está, sin gilipolleces. Es verdad que hay algo de puzle con las cuñas y las efigies, pero eliminarlas es parte de la exploración, y se fuerza al jugador a hacerlo para obtener ventajas. Me parece adecuado. El problema de Raime es su segunda fase, que tiene algunos golpes que GUAU ESAS HITBOXES. Pero una vez más, es aprender el patrón de movimiento y rezar para que la caja de impacto no te alcance. Un jefe, una vida, dos fases.

Del DLC Corona del Rey de Marfil no creo que haya jefes difíciles, salvo Zallen y Lud, que están en la que unánimemente considerada la peor zona de la puta historia de From Software. Ni lo comento para no calentarme.

Dos de los Señores de la Ceniza, salvo Aldritch y Yhorm, tienen dos fases con sus dos vidas buenas: Vigilantes del Abismo y los Príncipes Gemelos. Los dos primeros jefes no son especialmente difíciles, aunque a mí Aldritch se me atragantó por las flechas que destruyen. Su segunda fase no es ninguna locura, y la de Yhrom tampoco. Los Vigilantes del Abismo no suponen un gran pico de dificultad, pero sí se trata del primer jefe "serio". Dos fases, dos barras de vida y en la primera jefes múltiples. Con los Príncipes Gemelos la cosa se pone más seria y tenemos un jefe exigente, como es Lorian, que luego viene acompañado en su segunda fase de Lothric, y al combate a melee se le suman las magias. Es un combate bastante exigente por la agresividad de Lorian y el daño que hacen algunas magias de Lothric. Dos jefes, dos vidas, dos fases.

-En el resto del juego base, solo creo que son considerados picos de dificultad Sulyvahn, la Bailarina del Valle Boreal y el Rey sin Nombre. Todos tienen dos fases, pero solo los dos primeros tienen una vida. El Rey sin Nombre, el mayor pico de dificultad del juego base, tiene varias fases, dos evidentes, por el cambio de barra de vida y de jefe, y luego entre dos y tres cuando el jugador se enfrenta al Rey sin Nombre. Es un jefe que, como decía al principio, castiga muchísimo el spam roll y además mete hostias como panes. Esos movimientos ralentizados son devastadores después de tantas horas de juego.

Vayamos con los DLC

Con respecto a Cenizas de Ariandel es sencillo:

-Friede: empezamos fuerte con un jefe de tres putas fases, dos jefes en una de ellas, y un subidón de dificultad muy pepino en la última fase. A ver, a mi me encanta Friede, me parece uno de los mejores jefes de la saga y la última fase es un auténtico espectáculo, pero creo que la dificultad reside en desgastar al jugador en las primeras fases, obligarle a precisar y ahorrar estus para llegar fresco y con recursos a la última fase. Y creo que FS puede trabajar más fino que esto.

Vamos con la Ciudad Anillada:

Aquí realmente no tengo mucha queja porque, si bien es cierto que considero que tiene dos de los jefes más jodidos de la saga, y pongo a Midir en el segundo lugar y al jefe final de Sekiro en primer lugar, son justos: un jefe, dos fases, una vida. Joder, es el espíritu de la dificulta de From Software, es como siempre han hecho las cosas y es lo que realmente valoro en sus juegos. Ponme a un enemigo MUY difícil, ponle varias fases si quieres, pero joder, un solo enemigo y una sola vida, no pido más. Y con Midir y Gael creo que está muy bien ejecutado. Jefes extremadamente exigentes, con segundas fases brutales, daño demencial y muy, muy agresivos. Pero justos, en esencia.

Los demonios y los otros jefes son anecdóticos, pero creo que se entiende lo que quiero decir.