El viernes se pone a la venta Call of Duty: Black Ops IIII y los jugadores que lo compren en versión física se van a encontrar con una desagradable sorpresa. Tomaos con calma las ansias por jugar porque vais a necesitar de un tiempo extra para completar la instalación.

El parche de lanzamiento que tendréis que descargar es de 50GB, algo que en la edición digital ya viene incluido con la descarga del propio juego. Esta actualización es indispensable para poder acceder al multijugador, el modo zombies o Spacialist Headquarters. 

Para que vayáis haciendo hueco en el espacio del disco duro de la consola, la instalación más el parche requiere de 112GB disponibles. Este espacio luego se ver reducido una vez instalado el juego y su actualización a 55GB pero necesita de ese espacio adicional para todo el proceso.

El modo al que sí podréis acceder sin necesidad de completar la descarga e instalación completa es el battle royale Blackout. Al 30% de la misma ya os dejará jugar.

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A eso no pueden llamarlo parche, pues no parchea nada.

A mí a estas alturas no me parece grabe lo de los 80-100 GB para ciertos juegos.

Lo que sí me parece terrorífico es lo de los parches. No me entra en la cabeza que cualquier juego con años detrás, justo cuando lo lanzan, o 4 días después, necesite un parche que pesa más que otro juego en sí. Los 20 de FFXV, los casi 30 que tendrá RDR2, ahora este con 50... Algo se hace muy mal cuando tras años con el juego, hay que chutarle algo tan tocho una vez acabado que no puede venir ya dentro. Es que hay indies ya de 4GB que al vajarlo son 7 por el parche. Y en relación, ese 4-3 también me parece muy hardcore.